Costa peruana en alerta por amenaza de fuertes ráfagas de viento hasta el 3 de junio

Estas condiciones están siendo provocadas por la intensificación del Anticiclón del Pacífico Sur y la presencia de un vórtice costero en niveles bajos de la atmósfera

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Senamhi advirtió que la costa
Senamhi advirtió que la costa del Perú sufrirá de fuertes vientos esta semana.

Durante tres días consecutivos, desde este domingo 1 hasta el martes 3 de junio, distintas zonas de la costa peruana permanecerán bajo vigilancia meteorológica debido al incremento de la velocidad del viento.

Así lo informó el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), que emitió un aviso de nivel amarillo por la presencia de ráfagas que podrían superar los 35 km/h en varios puntos del litoral, generando además efectos colaterales como reducción de visibilidad y levantamiento de polvo y arena.

La alerta incluye a regiones del norte, centro y sur del país. En la costa norte, se prevén vientos de hasta 35 km/h en provincias como Talara, Piura y Paita. En la costa central, las ráfagas alcanzarían los 33 km/h en zonas de Lima y el Callao, mientras que en Ica se esperan velocidades similares con predominancia de un flujo de sur a norte.

Estas condiciones están siendo provocadas por la intensificación del Anticiclón del Pacífico Sur y la presencia de un vórtice costero en niveles bajos de la atmósfera. Ambos fenómenos están alterando el comportamiento del clima habitual para esta época del año.

El primero, un sistema de alta presión que actúa sobre el océano, ha acercado su núcleo al continente, impulsando vientos más intensos hacia tierra firme. El segundo, un sistema rotativo de humedad cerca del mar, contribuye a una mayor cobertura nubosa y lloviznas dispersas.

En Lima Metropolitana y la provincia constitucional del Callao, distritos como Surco, Jesús María, Ancón y el Callao ya han reportado acumulaciones de llovizna, lo que, según los especialistas, confirma que el fenómeno ya está en desarrollo. Estos eventos suelen manifestarse con mayor intensidad en horas nocturnas y durante las primeras horas del día.

Este es el fenómeno que
Este es el fenómeno que causa las lloviznas, neblina y las bajas temperaturas en las noches de Lima

En paralelo, la sierra norte y centro del país también está bajo alerta. Senamhi ha identificado posibles ráfagas de viento superiores a los 45 km/h en departamentos como Cajamarca, La Libertad, Amazonas y San Martín, los cuales podrían experimentar afectaciones similares a las del litoral.

Frente a este escenario, el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) ha solicitado a las autoridades regionales y locales inspeccionar infraestructuras y realizar verificaciones de seguridad en edificaciones públicas y privadas. El objetivo es garantizar la integridad de techos, ventanas y otras estructuras vulnerables ante el embate del viento.

Por su parte, el Senamhi ha reiterado que los efectos asociados a estas condiciones no se limitan a la fuerza del viento. El ingreso de humedad oceánica, facilitado por el vórtice costero, viene generando una atmósfera densa, fría y de escasa visibilidad. Las lloviznas persistentes se extienden a lo largo del litoral, desde Piura hasta Ica, en muchos casos afectando las rutinas matutinas de los ciudadanos.

El monitoreo satelital muestra una extensa franja de nubosidad sobre el mar que se desplaza hacia el territorio continental. Este patrón ha sido reforzado por la corriente fría de Humboldt, que actúa como canalizador del aire frío hacia la costa.

La cobertura nubosa continuará en aumento durante estos días, especialmente en la madrugada y al anochecer, con presencia de niebla y neblina en zonas cercanas al mar. Estas condiciones atmosféricas podrían persistir más allá del 3 de junio, dependiendo de la evolución del anticiclón y del vórtice costero.

El Senamhi indicó que seguirá emitiendo actualizaciones a través de sus canales oficiales. Mientras tanto, los vientos continúan recorriendo la franja costera peruana, con una intensidad poco usual para esta etapa del año, dejando tras de sí cielos cubiertos, calles húmedas y una sensación térmica que sigue descendiendo.