Si tienes alergia debes comer una cebolla cruda porque ayuda a reducir los síntomas provocados por los alérgenos

Es recomendable incluir cebolla cruda en ensaladas, salsas o jugos naturales durante las temporadas de mayor sensibilidad alérgica

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La cebolla cruda es rica
La cebolla cruda es rica en la quercetina, un flavonoide con potentes propiedades antihistamínicas (Imagen Ilustrativa Infobae)

El clima del Perú, variado por su geografía, puede influir significativamente en el aumento de alergias. En la costa, la alta humedad favorece la proliferación de ácaros y moho, comunes desencadenantes de alergias respiratorias. En la sierra, el aire seco y el polvo pueden irritar las vías respiratorias, mientras que en la selva, la constante humedad y vegetación densa elevan la presencia de esporas y polen.

Además, los cambios bruscos de temperatura y la contaminación ambiental, especialmente en zonas urbanas, agravan los síntomas alérgicos. Estas condiciones hacen que muchas personas desarrollen o intensifiquen reacciones alérgicas en diversas regiones del país.

Las alergias son una respuesta del sistema inmunológico ante sustancias que normalmente son inofensivas, como el polvo, el polen o ciertos alimentos. Se manifiestan a través de síntomas como estornudos, picazón, congestión nasal, ojos llorosos y enrojecimiento de la piel. Estos malestares son especialmente frecuentes durante las temporadas de frío, como el otoño y el invierno, cuando se cierran más las ventanas y aumenta la exposición a alérgenos como ácaros, moho y pelo de mascotas.

Aunque existen medicamentos para aliviar los síntomas, también hay alimentos que pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico y reducir las reacciones alérgicas. Uno de ellos es la cebolla cruda, que por su composición natural actúa como un aliado contra los efectos de las alergias.

¿Por qué debes comer una cebolla cruda si tienes alergia?

La cebolla contiene azufre y
La cebolla contiene azufre y antioxidantes que combaten la inflamación en las vías respiratorias (Imagen Ilustrativa Infobae)

La cebolla cruda es rica en compuestos naturales como la quercetina, un flavonoide con potentes propiedades antihistamínicas y antiinflamatorias. La quercetina ayuda a bloquear la liberación de histamina, que es la sustancia responsable de muchos de los síntomas alérgicos. Al reducir la histamina en el cuerpo, la cebolla cruda puede disminuir la intensidad de estornudos, congestión nasal y picazón en los ojos.

Además, la cebolla contiene azufre y antioxidantes que fortalecen el sistema inmune y combaten la inflamación en las vías respiratorias. Consumida cruda, conserva todas sus propiedades activas, lo que potencia sus beneficios. También actúa como un expectorante natural, ayudando a liberar las vías respiratorias en casos de alergias respiratorias o rinitis.

Es recomendable incluir cebolla cruda en ensaladas, salsas o jugos naturales durante las temporadas de mayor sensibilidad alérgica. Sin embargo, quienes padecen problemas gástricos deben consumirla con precaución.

Otros alimentos que ayudan a reducir los síntomas de la alergia

La cebolla también actúa como
La cebolla también actúa como un expectorante natural, en casos de alergias respiratorias o rinitis (Imagen Ilustrativa Infobae)

Además de la cebolla cruda, hay otros alimentos que pueden contribuir a aliviar los síntomas de la alergia:

  • Ajo: al igual que la cebolla, tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que fortalecen el sistema inmunológico.
  • Kion: es un potente antiinflamatorio natural que ayuda a reducir la congestión nasal y otros síntomas respiratorios.
  • Cítricos: naranjas, limones y mandarinas son ricos en vitamina C, que actúa como un antihistamínico natural y refuerza las defensas del cuerpo.
  • Miel natural: puede ayudar a desensibilizar el organismo a ciertos alérgenos locales, especialmente si es miel de la región.
  • Té verde: contiene antioxidantes que ayudan a reducir la inflamación y puede calmar las vías respiratorias irritadas.
  • Yogur natural o kéfir: las bacterias probióticas ayudan a equilibrar el sistema inmune y mejorar la tolerancia a ciertos alérgenos.

Recomendaciones para combatir las alergias

Además de incluir ciertos alimentos en la dieta, es importante seguir algunas recomendaciones para reducir el impacto de las alergias en el día a día:

  • Evitar la exposición a alérgenos conocidos: mantener las ventanas cerradas en días de mucho polen, usar fundas antiácaros y limpiar con regularidad.
  • Mantener una buena hidratación: beber suficiente agua ayuda a mantener las mucosas hidratadas y facilita la eliminación de alérgenos.
  • Ventilar los espacios cerrados: a pesar del frío, es recomendable abrir ventanas durante unos minutos cada día para renovar el aire.
  • Realizar lavados nasales con suero fisiológico: esta práctica ayuda a eliminar partículas irritantes de las fosas nasales.
  • Consultar con un especialista: en casos persistentes o graves, lo ideal es visitar a un alergólogo para recibir un diagnóstico adecuado y tratamiento personalizado.