
La reciente muerte de Mario Vargas Llosa ha dejado un vacío literario, pero también ha puesto a su hijo mayor, Álvaro Vargas Llosa, en el centro de atención, no solo por heredar el legado literario de su padre, sino también por un título nobiliario importante que el escritor peruano recibió en 2011.
El escritor, quien dedicó su vida a la literatura y fue galardonado con el Premio Nobel, fue investido por el rey emérito Juan Carlos I de España como Marqués de Vargas Llosa, un reconocimiento que marcó un hito en su carrera en el 2011.
Esta distinción no solo refleja el reconocimiento oficial a su obra literaria, sino que también marcaba un momento crucial en la historia de la familia.
Un título que requiere reclamación
Aunque Álvaro Vargas Llosa es el heredero natural del marquesado, explicó en una reciente entrevista con La Nación que la herencia de este título no es automática.
“En principio, tengo que reclamarlo, así funciona. Esto no tiene tierras ni tiene tesoros, simplemente es un título”, comentó el hijo mayor de Mario Vargas Llosa.
De esta forma, dejó en claro que la distinción no implica ninguna fortuna o propiedades, sino que se trata únicamente de un reconocimiento honorífico que debe ser reclamado oficialmente.

La visión de Mario Vargas Llosa sobre el marquesado
Al referirse a la distinción otorgada a su padre, Álvaro Vargas Llosa reveló que su padre Mario le causaba mucha gracia la idea de que el marquesado tuviera su origen en su trayectoria literaria y no en un “reparto de favores”.
“A él le hacía gracia pensar que, dentro de doscientos años, alguien tuviera el marquesado Vargas Llosa, y que todo se hubiera originado en su Premio Nobel”, indicó.
El escritor peruano, quien siempre fue crítico de la monarquía, había aceptado el título, a pesar de su republicanismo.
“No soy un monárquico, soy un republicano de toda la vida, pero no me disgusta que dentro de doscientos años alguien tenga un título cuyo origen es la literatura”, reveló Álvaro que su padre le había dicho.
Esta declaración no solo refleja el aprecio de Mario por su obra literaria, sino también su visión sobre el simbolismo del título, que representaba el reconocimiento al trabajo artístico más que a un sistema de privilegios.
Jaime Bayly: “Patricia Llosa podría haber sido marquesa”
Jaime Bayly, periodista y escritor peruano, también se refirió al tema en su canal de YouTube, explicando que, dado el divorcio de Mario Vargas Llosa y Patricia Llosa, el título nobiliario pasará a ser heredado por Álvaro.
“Si no se hubiera divorciado de Patricia, entiendo que ella sería la marquesa viuda”, comentó Bayly, quien destacó la importancia del marquesado dentro de la historia de la familia Vargas Llosa.
Bayly explicó que, tras la muerte de Mario Vargas Llosa, el título de Marqués de Vargas Llosa será heredado por su hijo mayor.
“Según lo que he leído e investigado, el hijo mayor de Mario y Patricia, Álvaro Vargas Llosa, será quien herede el título nobiliario. Y algún día, lejano quizás, no será más Álvaro Vargas Llosa, sino el Marqués Álvaro Vargas Llosa”, agregó el escritor, enfatizando el cambio que representa en la historia familiar.
El legado cultural y literario de Mario Vargas Llosa
A pesar de la separación de sus padres, Álvaro Vargas Llosa ha mantenido una relación cercana con su padre y con el legado literario que él dejó. El periodista Jaime Bayly subrayó la importancia del marquesado, no solo como un título honorífico, sino como un símbolo del legado cultural y literario que Mario Vargas Llosa dejó no solo en Perú, sino en el mundo entero.
El título tiene carácter hereditario, lo que significa que, tras la muerte del escritor, pasará a ser de Álvaro, quien a partir de ahora será conocido formalmente como el Marqués Álvaro Vargas Llosa.
La millonaria herencia que dejó Mario Vargas Llosa
La vida de Mario Vargas Llosa, autor de "La ciudad y los perros", no solo se destacó por su brillante carrera literaria, sino también por su prominente vida pública y estatus internacional. Esto le permitió acumular un considerable patrimonio, incluido el premio Nobel de 2010 de un millón de euros, ingresos de adelantos editoriales, ventas de libros, derechos de autor y su contrato como columnista en El País de España.
Además de sus ingresos literarios, Vargas Llosa poseía propiedades en diversas partes del mundo. Tras su divorcio de Patricia Llosa, su patrimonio fue dividido. El escritor conservó un lujoso piso en Madrid, un apartamento en Londres (que luego vendió) y otro en París, donde residió en su juventud. Patricia Llosa retuvo propiedades en República Dominicana, Nueva York y la casa familiar en Lima, donde Vargas Llosa pasó sus últimos días.

Más Noticias
Masacre en Pataz: últimas noticias de la muerte de 13 mineros secuestrados dentro de socavón de mina en La Libertad
Se hallaron los cuerpos de los mineros secuestrados con signos de haber sido torturados antes de ser cruelmente asesinados por sicarios de la banda criminal de alias “Cuchillo”

Es el distrito más alejado de Pataz y el único en toda la provincia cuyo territorio está cubierto casi por completo por selva
Lo que más llama la atención de quienes visitan el distrito es su ubicación en plena selva alta, un área dominada por densos bosques lluviosos que se extienden entre las montañas

Los artistas que dominan el ranking de K-pop en iTunes Perú
La música coreana es un fenómeno que ha logrado abrirse camino en el mundo occidental, sobre todo tras el exitoso tema ‘Gangnam Style’ de PSY y la fama de BTS

Juan Luis Cipriani, denunciado por abuso sexual, está desacreditado para seguir en el colegio cardenalicio, señala Pedro Barreto
El cardenal Pedro Barreto afirmó que la sanción por abuso sexual impuesta por el papa Francisco a Cipriani desacredita su idoneidad para continuar en este órgano de la Iglesia

Masacre en Pataz es noticia internacional: Así informaron medios de todo el mundo sobre la “espiral de violencia sin control”
Los detalles sobre el secuestro y asesinato de 13 trabajadores en la mina La Poderosa se han difundido a nivel global, reflejando la creciente inseguridad en las zonas mineras del país y la incapacidad de las autoridades para detener el crimen organizado.
