Dina Boluarte insiste con el “terrorismo urbano” durante homenaje a los comandos Chavín de Huántar

La presidenta de la República señaló que las principales amenazas al Perú tienen nuevos rostros como la delincuencia y el crimen organizado

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La presidenta de la República señaló que las principales amenazas al Perú tienen nuevos rostros como la delincuencia y el crimen organizado. (Fuente: Canal N)

La presidenta Dina Boluarte participó del homenaje a los comandos Chavín de Huántar por el 28° aniversario de la operación que liberó a más setenta rehenes de las manos del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Durante su intervención, la jefa de Estado recordó la amenaza terrorista que azotó al Perú durante los últimos veinte años del siglo pasado e intentó generar un vínculo con la crisis de inseguridad ciudadana que día a día cobra la vida de los ciudadanos.

“Hoy, cuando conmemoramos este episodio de nuestra historia, lo hacemos mirando el presente. Hoy la amenaza tiene otros rostros: la delincuencia, el crimen organizado, el narcotráfico, la minería ilegal, enemigos de la sociedad que roban no solo pertenencias sino también las vidas de nuestros compatriotas”, dijo durante la ceremonia.

Dina Boluarte ha sido cuestionada
Dina Boluarte ha sido cuestionada por fomentar el proyecto de ley de Terrorismo urbano.

Boluarte reiteró su postura en torno a la intensidad con la que se combatirá la ola delincuencial, recalcó que será con la misma firmeza con la que se hizo frente al terrorismo de los ochentas y noventas. “Enfrentaremos estas nuevas amenazas que encajan bien con el concepto de terrorismo urbano. La misión no ha cambiado: proteger a la patria para avanzar hacia el desarrollo que permita un mejor futuro para todos los peruanos”, recalcó.

La presidenta de la República ha optado por insistir con un término que diversos especialistas han cuestionado al igual que el proyecto de ley que el Ejecutivo ha presentado al Congreso de la República. En este se pretende tipificar como terrorismo urbano una serie de delitos ya existentes. El Parlamento hasta la fecha no ha debatido la propuesta en el Pleno.

El Comando Chavín de Huántar en el Desfile Militar 2023. Video: Infobae Perú / Clara Giraldo

El politólogo Noam López calificó la medida como un “sinsentido”, señalando que solo agrupa delitos existentes bajo una nueva etiqueta que genera confusión. La iniciativa incluye crímenes como sicariato, secuestro, extorsión y minería ilegal, pero López argumenta que organizaciones criminales como Barrio King o One Family buscan lucro y no fines políticos, lo que hace inapropiado el término “terrorismo”.​

Además, López cuestionó el uso del término “urbano”, ya que grupos criminales operan tanto en zonas urbanas como rurales, como se observa con ‘Los Pulpos’ en La Libertad. El especialista también criticó la falta de inteligencia policial en los operativos, calificando las acciones como “show masivo”. En resumen, la propuesta es vista como una medida simbólica que no aborda las causas estructurales de la inseguridad ciudadana.​

El especialista también cuestionó que no se invierta más en inteligencia para combatir la ola delincuencial. Esta medida sería crucial para que los estados de emergencia sean medidas exitosas.

Histórico evento

El 22 de abril de 1997, la valentía y la determinación se unieron para poner fin a uno de los episodios más oscuros de Perú. La Operación Chavín de Huántar liberó a más de 70 rehenes tras 126 días de cautiverio en la residencia del embajador japonés en Lima. Detrás de este acto heroico se esconde una historia de planificación meticulosa, coraje desmedido y sacrificio supremo. (Andina)

El operativo Chavín de Huántar fue una acción militar llevada a cabo en Perú el 22 de abril de 1997, con el objetivo de rescatar a 72 rehenes secuestrados por el grupo terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Los insurgentes habían tomado la residencia del embajador de Japón en Lima el 17 de diciembre de 1996, durante una celebración diplomática. Durante más de cuatro meses, mantuvieron cautivos a diplomáticos, militares y civiles, exigiendo la liberación de presos del MRTA.

El gobierno peruano, liderado entonces por el presidente Alberto Fujimori, planeó en secreto una operación de rescate liderada por comandos de élite del Ejército. La misión, que tomó su nombre del sitio arqueológico Chavín de Huántar, se ejecutó con precisión: los militares ingresaron al inmueble a través de túneles cavados previamente. En menos de media hora, lograron liberar a casi todos los rehenes, abatir a los 14 terroristas y rescatar con vida a 71 de los 72 secuestrados.

El operativo fue considerado un éxito militar y un símbolo de la lucha contra el terrorismo en Perú, aunque también generó controversia por denuncias de ejecuciones extrajudiciales de algunos miembros del MRTA capturados con vida.