
Desde la Unión de Industrial de la Provincia de Buenos Aires consideramos clave la búsqueda de una solución integral, es decir federal, que rompa con las ataduras que truncan el desarrollo de la economía. Día a día trabajamos con ese horizonte, con vistas a superar las dificultades internas y externas, como la pandemia o el conflicto en Ucrania. Estas son tragedias que además de la pérdida humana plantean nuevos desafíos a la hora de poner de pie a nuestro querido país. Dificultan el camino hacia la añorada estabilidad económica, un logro que nos daría previsibilidad y nos permitiría seguir creciendo.
De este modo, desde un esquema con visión federal, sostenemos que Buenos Aires representa una pieza fundamental de la maquinaria destinada a motorizar la economía nacional. Para eso es necesaria una estrategia que atienda las problemáticas de nuestro sector, tal como lo hacemos en UIPBA, nucleando a toda la industria bonaerense con propuestas y acciones para el fortalecimiento de cada una de las entidades productivas. Como también trabajamos en la incorporación de nuestros socios a los espacios de diálogo que tratan temas fundamentales para el crecimiento sostenido del sector manteniendo una relación con el Gobierno Provincial y con el Gobierno Nacional a través de la Unión Industrial Argentina. UIPBA cumplió el domingo pasado 44 años impulsando la participación del sector privado en el desarrollo industrial.
Esa articulación entre las asociaciones industriales y el sector público nos permitió salir fortalecidos de momentos complejos. Tal como se evidencia en las estadísticas positivas de recuperación económica que motorizan la producción bonaerense. La fuerte tracción que ejerce nuestra provincia sobre el aparato productivo resulta cuantificable si observamos los datos más recientes registrados sobre comercio exterior.
Por ejemplo, en febrero, las exportaciones de la industria bonaerense totalizaron 2.500 millones de dólares, marcando un alza del 50,3 por ciento interanual, principalmente con el impulso de los productos primarios y el rubro de Combustibles y energía. Estos aumentos se reiteran en contraste con los niveles de la prepandemia, donde las exportaciones treparon un 44,8 por ciento en términos interanuales por encima de febrero de 2020.
Por otro lado, en la provincia las exportaciones de origen industrial acumularon en el primer bimestre de 2022 un aumento de 22,7 por ciento en el cotejo interanual, con todos los rubros incluidos dentro del movimiento alcista. En sumatoria, estas manufacturas y las de origen agropecuario mostraron en febrero un incremento del 26,1 por ciento en la comparación interanual, manteniendo así la tendencia positiva de 2021.
Desde la UIPBA creemos que es prioritario profundizar esta línea de trabajo, para seguir propiciando todo tipo de avances. Con ese objetivo, el año pasado firmamos un acuerdo de cooperación junto con la Cámara Americana de la Industria y Comercio de Florida, Estados Unidos. El entendimiento permitió favorecer, asistir y potenciar las exportaciones de los productos de la provincia de Buenos Aires.
De igual forma, afirmamos que para que la industria continúe desarrollándose, es de vital importancia estimular el mercado interno. En este sentido, al analizar los datos del consumo privado en territorio bonaerense, se observa que las ventas totales en supermercados en febrero se elevaron un 8,7 por ciento en términos interanuales y 3,8 puntos porcentuales contra el mismo mes de 2020.
Hasta febrero, este indicador alcanzaba el noveno mes consecutivo en alza. No obstante, es perceptible cierto desfase en el consumo respecto a la rápida recuperación de la industria. Por este motivo instamos a seguir fortaleciendo el mercado interno, a fines de sostener subas como las que presentaron rubros como Electrónicos y artículos para el hogar, Productos de verdulería y frutería y Bebidas y Carnes, que lideraron el movimiento ascendente en ese período.
En estrecha relación con el consumo se encuentran indicadores como el empleo y el desempleo. Dentro de esta medición, se aprecia que en enero se generaron más de 31 mil puestos de trabajo en el sector industrial privado de la provincia, una cifra que equivale a un incremento del 2,8 por ciento en la comparación interanual. Los nuevos puestos representaron un 44 por ciento del total de aquellos surgidos en torno al sector privado bonaerense, que fueron más de 70 mil.
A propósito de la tasa de desempleo en el mercado laboral de Buenos Aires, que era de 8,2 por ciento en el cuarto trimestre de 2021, se presentaron reducciones tanto en el cotejo interanual como en contraste con el mismo trimestre de 2019, en sintonía con la recuperación de la actividad económica. En el primer caso la disminución fue de 5,9 puntos porcentuales, mientras que para el segundo alcanzó el 2,6 por ciento versus el cuarto trimestre de 2019.
Por último, resulta central recordar los datos de la actividad sectorial en Buenos Aires, que en 2021 se expandió 15,4 por ciento, con pico en noviembre. El descenso de diciembre se debió a fenómenos como el ausentismo provocado por la tercera ola de Covid, entre otras causas vinculadas con la estación de verano, como las vacaciones.
Así las cosas, si bien la producción industrial local disminuyó un 3,2 por ciento en enero con respecto a fines de año, creció un 2,4 por ciento interanual e incluso un 1,1 por ciento contra el mismo mes de 2020. En esa dinámica traccionaron al alza Productos químicos, Minerales no metálicos, Alimentos y bebidas y Maquinaria y equipo.
En virtud de ello apremia seguir multiplicando esfuerzos para propulsar la actividad sectorial de nuestra provincia, que cumple un rol protagónico dentro de la dinamización de la economía argentina. La industria es fundamental en la generación de divisas así como también en la creación de empleo genuino que estimula el consumo. Una comunidad local con una industria sólida produce que otros sectores también crezcan y se desarrollen.
La experiencia que nos otorgan estos 44 años que se cumplen desde la conformación de la UIPBA nos permiten proyectar y afirmar que, para que la industria siga creciendo, además de la previsibilidad, la estimulación del consumo y la capacidad del acceso a divisas para posibilitar la importación de insumos necesarios para la producción, se deberán tomar otras medidas de amplio alcance.
Con este panorama, entonces, será esencial diferenciar el régimen tributario por sector y por capacidad de pago, así como generar un nuevo marco normativo referido a lo laboral que se ajuste a los nuevos puestos de trabajo y sea beneficioso de igual manera tanto para el empleador como para el empleado, entre otras soluciones acordes a estos tiempos. De ello dependerá, en gran medida, la posibilidad de fortalecer un círculo virtuoso que consolide la emancipación económica del país, con la actividad bonaerense en un rol asegurado de protagonista.
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