Abastecimiento químico, logística y vínculos globales: desafíos de operar en un sector estratégico

Jorge de San Francisco, responsable de compras y comercio exterior, analiza el rol del tratamiento del agua en procesos productivos y los desafíos de planificar insumos críticos para su procesamiento

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Jorge de San Francisco es
Jorge de San Francisco es responsable de compras y comercio exterior (Foto: Movant Connection)

Al referirse al momento que atraviesa el sector, Jorge afirma que la industria química es “fundamental para cualquier proceso productivo”. En esta entrevista comparte su visión sobre abastecimiento, trazabilidad, logística de productos sensibles y la necesidad de sostener vínculos sólidos para operar en un entorno desafiante.

¿Cómo describirías tu mapa de abastecimiento entre insumos locales e importados?

Desde mi rol, me toca abastecerme en el mercado local y en el internacional. Gran parte de lo que se compra localmente en el sector también es importado. Te diría que el 85% de los productos que se utilizan tienen algún origen externo, porque no se fabrican en el país.

Con respecto a los orígenes, son variados, pero algunas de las materias primas principales vienen de Bélgica, Corea, China, Brasil y Francia.

¿Por qué China no aparece primero? ¿Tiene que ver con la especialidad de los productos?

Hay un volumen importante desde China, pero también se trabaja con plantas ubicadas en otros países. En materias primas químicas específicas, los orígenes más confiables para nosotros son Corea, Taiwán y Bélgica.

¿Cómo describirías la importancia de la industria química en la economía argentina?

Es fundamental. En mi caso, me toca trabajar muy de cerca con el tratamiento de agua, que está presente en todos los procesos productivos: desde potabilización hasta actividades industriales que necesitan un agua con características definidas. Además, sectores como petróleo y minería requieren procesos de recuperación y tratamiento de agua, lo que vuelve a la industria química clave para el desarrollo.

¿Qué nivel de recuperación permiten hoy esos procesos?

Actualmente están muy controlados por organismos del Estado. Las empresas son más conscientes de que, después del proceso industrial, deben tratar los efluentes antes de devolverlos a una cuenca. Eso marca una diferencia en términos de sustentabilidad.

¿Cuál es el impacto de la logística en los costos y en el precio final?

Los costos logísticos tienen una variabilidad estacional importante. Además, Argentina suele quedar al final de la lista para muchos servicios marítimos. En un momento hubo faltante de fletes porque gran parte de la capacidad estaba destinada a otros mercados, y se tuvieron que hacer muchas gestiones para sostener el nivel de stock.

El costo portuario es un punto crítico. Si traemos carga suelta, el valor en depósito fiscal puede triplicar o cuadruplicar el costo del flete internacional. Eso incide directamente en la estructura de costos.

Refiriéndose al impacto de la
Refiriéndose al impacto de la logística en la industria química, Jorge comenta que "los costos logísticos tienen una variabilidad estacional importante. Además, Argentina suele quedar al final de la lista para muchos servicios marítimos" (Foto: Shutterstock)

¿Es más difícil conseguir espacio en los barcos cuando se trata de productos químicos?

Sí. Muchas de las cargas con las que trato son IMO, es decir, mercadería clasificada como peligrosa según normas internacionales. En esos casos, el capitán del barco define qué se embarca y qué no. Cuando hay poca disponibilidad de espacio, suelen priorizar productos más simples y este tipo de cargas quedan afuera. Eso genera varios problemas en momentos de escasez de fletes.

¿Qué grado de intervención tienen terceros organismos en su operatoria?

En mi caso, interviene ANMAT, porque trabajo con productos vinculados al tratamiento de agua potable. Cada producto nuevo necesita autorización previa para su comercialización. Ese proceso demora alrededor de seis meses y luego la aprobación dura cinco años.

¿Qué importancia tienen los vínculos y la comunicación entre áreas dentro de la empresa?

Son básicos. Se trabaja con presupuestos que parten del presupuesto de ventas. Mientras ventas planifica mes a mes, yo tengo que programar con seis meses de anticipación. Desde que planifico hasta que llega la mercadería pasan 90 días, así que si no hay buena comunicación aparecen los baches productivos.

En los productos de fabricación propia, el consumo es más estable y se puede ajustar según la demanda. Siempre necesito al menos dos meses de stock.

¿Qué valor tiene el vínculo con proveedores internacionales?

Es clave. Me tocó trabajar con proveedores por muchos años y eso generó una relación de confianza muy fuerte. Incluso en momentos donde se podía importar pero no pagar, siguieron suministrando mercadería porque confiaban en la palabra que se construye con el tiempo.

La continuidad del equipo ayuda mucho. Para un proveedor externo no es lo mismo hablar con alguien que siempre fue claro, incluso en situaciones complejas. Aunque no comprendan del todo la dinámica local, valoran la honestidad y la consistencia.

¿Qué aprendiste al trabajar con distintas culturas?

Te cambia la forma de manejarte. Yo trato de ser auténtico. Si no hablo perfecto inglés, lo digo. Para mí la naturalidad es muy valorada afuera y me permitió construir buenos vínculos.