Gestión efectiva de inventarios: el arte de evitar el desperdicio y maximizar el flujo

En un contexto volátil, las empresas que integran datos, previsión y tecnología logran inventarios más ágiles, menores costos y una cadena de suministro más sólida

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Eduardo Gutiérrez Barzola es máster
Eduardo Gutiérrez Barzola es máster en supply chain, especialista en optimización de inventarios, demand planning y compras (Foto: Movant Connection)

En el dinámico mundo de la gestión de la cadena de suministro, el inventario es a menudo un arma de doble filo: es un activo vital que asegura la continuidad del negocio, pero también puede ser un pasivo costoso si se gestiona de forma ineficiente.

La gestión efectiva de inventarios no se trata solo de contar lo que hay en el almacén; es una disciplina estratégica enfocada en encontrar el punto de equilibrio perfecto entre tener suficiente stock para satisfacer la demanda sin incurrir en excesos que inmovilizan capital.

Tener un exceso de inventario genera altos costos de mantenimiento, incluyendo almacenamiento, seguros, depreciación y, lo más crítico, el riesgo de tener stock obsoleto. Por otro lado, la escasez de inventario (quiebre de stock) resulta en pérdidas de ventas inmediatas y un daño irreparable a la fidelidad del cliente, ya que el nivel de servicio disminuye.

La gestión efectiva es, por tanto, una palanca directa para mejorar la liquidez y la rentabilidad de la empresa.

Un inventario bien gestionado es
Un inventario bien gestionado es aquel que entra y sale con eficiencia, minimizando el tiempo que el capital permanece inmovilizado (Foto: Shutterstock)

Estrategias para una gestión de inventarios inteligente

Para transformar el inventario de un riesgo a una ventaja competitiva, las organizaciones deben migrar de enfoques reactivos a una planificación proactiva y basada en datos, desde mi experiencia considero los siguientes puntos relevantes:

1. Segmentar el inventario: Clasificación ABC/XYZ

No todos los productos en el portafolio merecen el mismo grado de atención, por ello recomiendo:

  • Clasificación ABC (Valor): Identifica los ítems de alto valor ($A$), valor medio ($B$) y bajo valor ($C$). Los ítems $A$ requieren la máxima precisión en el control.
  • Clasificación XYZ (Demanda): Identifica la variabilidad de la demanda (constante $X$, variable $Y$, errática $Z$). Esto es esencial para elegir el modelo adecuado para generar el pronóstico más preciso.

2. Diagnóstico de patrones de demanda

Analizar el comportamiento de la demanda a través de los patrones de que si tiene un movimiento estable, con tendencia, si es estacional o errática permite aplicar el modelo de forecasting más preciso y establecer los niveles de stock de seguridad apropiados.

3. Implementación de políticas diferenciadas

Una vez establecido la clasificación ABC/XYZ, además del análisis de patrones de la demanda, junto con los modelos generativos de pronósticos, se va a establecer parámetros de planeamiento, establecidos en:

  • Puntos de Reorden (ROP): Niveles automatizados que indican cuándo realizar un pedido.
  • Stock de Seguridad: Calculado en función del tiempo de entrega del proveedor y la volatilidad de la demanda (desviación estándar).
  • Modelos Pull (Jalar): Para entornos de alta incertidumbre o bajo volumen (como DDMRP), donde la reposición se activa por el consumo real, no por pronósticos inciertos.

4. Tecnología como aliada

Migrar de hojas de cálculo manuales a sistemas de Planificación de Recursos Empresariales (ERP) con módulos dedicados a la gestión de inventario y Demand Planning es vital. Estas herramientas ofrecen visibilidad en tiempo real y automatización, minimizando errores y facilitando la toma de decisiones estratégicas, ahora más que nunca con tecnologías emergentes, con alcance y a medida que solicitan hoy en día las compañías. Considero que el factor cultural y humano es importante para garantizar el éxito en la implementación de nuevas herramientas.

En conclusión, considero que la meta principal de la gestión efectiva de inventarios es garantizar la máxima velocidad del flujo. Un inventario bien gestionado es aquel que entra y sale con eficiencia, minimizando el tiempo que el capital permanece inmovilizado.

En este sentido, adoptar un enfoque estratégico apoyado en un cambio cultural en el uso de nuevas tecnologías basados en IA o ML optimizarían dinámicamente los inventarios, con ellos las empresas no solo reducen costos y liberan capital, sino que también fortalecen su resiliencia operativa y su capacidad para ofrecer una experiencia de cliente insuperable.

En el entorno económico actual, la gestión avanzada del inventario se convierte en la ventaja competitiva silenciosa que diferencia a los líderes del mercado.