La revolución de la IA impulsa nuevas rutas logísticas globales

El comercio mundial crecerá 2,4% en 2025 impulsado por los bienes vinculados a la inteligencia artificial, pero la Organización Mundial del Comercio advierte que el auge podría moderarse en 2026 por la economía y costos de almacenamiento

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La OMC detalla que la
La OMC detalla que la expansión abarca desde materias primas y componentes para la fabricación de chips hasta equipos destinados a centros de datos y aplicaciones de IA (Imagen: Shutterstock)

El nuevo informe “Global Trade Outlook and Statistics” de la Organización Mundial del Comercio (OMC) revela que los bienes vinculados a la inteligencia artificial (IA) se convirtieron en el motor principal del crecimiento del comercio global.

Durante el primer semestre de 2025, el intercambio de estos productos —que incluyen semiconductores, procesadores, servidores y equipos de telecomunicaciones— aumentó más de 20% interanual y explicó el 43% del crecimiento total del comercio mundial, a pesar de representar menos del 10% del volumen total de mercancías.

El efecto IA en la logística global

El fenómeno refleja una reconfiguración de las cadenas de suministro hacia la infraestructura digital. La OMC detalla que la expansión abarca desde materias primas y componentes para la fabricación de chips hasta equipos destinados a centros de datos y aplicaciones de IA. Asia concentra casi dos tercios del comercio mundial de bienes tecnológicos, liderada por economías como Corea del Sur, Japón, China, Vietnam y Tailandia.

América del Norte también experimenta un repunte: las importaciones de semiconductores en Estados Unidos aumentaron 36%, con una demanda sostenida de servidores y máquinas automáticas de procesamiento de datos. En paralelo, México y Canadá reforzaron su integración regional en la cadena electrónica, consolidando el rol del continente en la logística de alto valor.

Europa, en tanto, contribuyó con cerca del 10% del crecimiento de este comercio, principalmente por el incremento en servidores y equipos de telecomunicaciones, mientras moderniza su infraestructura digital. En África y Medio Oriente comienzan a observarse señales de inversión en conectividad y centros de datos, que podrían generar nuevas rutas logísticas para el sector tecnológico.

En América Latina, el informe proyecta un fuerte aumento de las importaciones (+8,8%) y un crecimiento más moderado de las exportaciones (+2,4%) durante 2025, impulsado por la expansión del comercio tecnológico y la recuperación del consumo interno.

Brasil y Chile destacan por el incremento en la importación de equipos vinculados a la computación y la nube, reflejando la instalación de nuevos centros de datos regionales y una creciente integración con las cadenas de suministro digitales globales.

La OMC también señala un repunte del 19% en los pagos por servicios de transporte desde América del Sur y el Caribe, lo que confirma la mayor actividad portuaria y de servicios logísticos en la región.

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Brasil y Chile destacan por el incremento en la importación de equipos vinculados a la computación y la nube, reflejando la instalación de nuevos centros de datos regionales y una creciente integración con las cadenas de suministro digitales globales (Foto: Shutterstock)

Puertos activos y almacenamiento en alza

Más allá de los bienes tecnológicos, la OMC subraya que el tráfico portuario global creció 6% interanual en la primera mitad del año, impulsado por el “frontloading” de importaciones en Norteamérica: empresas que adelantaron compras para evitar el impacto de nuevos aranceles. Este comportamiento generó un aumento en la demanda de espacios de almacenamiento, tanto en depósitos tradicionales como en zonas francas y almacenes fiscales, utilizados para diferir pagos de tarifas y mitigar la incertidumbre comercial.

El informe señala que el incremento en los inventarios fue más pronunciado en sectores como maquinaria, automotriz, químicos y electrónicos, y que este cambio estructural puede elevar los costos logísticos globales. Según estimaciones citadas por la OMC, el costo de mantener inventarios representa entre 16% y 20% del valor del bien por año, lo que podría generar una “corrección” durante 2026, cuando las empresas reduzcan sus existencias y la demanda de transporte se modere.

Servicios logísticos y señales de desaceleración

El comercio mundial de servicios también muestra un comportamiento dual. La OMC prevé que las exportaciones de servicios de transporte crezcan 2,5% en 2025, pero desaceleren a 1,8% en 2026, reflejando el enfriamiento previsto del comercio de mercancías. Las exportaciones de servicios digitales y logísticos —como gestión de datos, seguimiento en tiempo real y ciberseguridad— se mantienen en expansión, con un crecimiento estimado de 6,1% este año.

En América Latina, el dinamismo de los servicios de transporte contrasta con un crecimiento más lento del comercio de servicios totales (1,6% en 2025), aunque la región mantiene una tendencia ascendente en logística y turismo.

La OMC prevé que, a medida que los países latinoamericanos consoliden sus inversiones en infraestructura y digitalización portuaria, la región podría mejorar su posición en el mapa logístico global.

El tráfico portuario europeo registró un repunte del 7,4%, con recuperación en puertos del norte como Rotterdam y Hamburgo, mientras que la actividad portuaria china aumentó 6,1%, impulsada por la reactivación exportadora. Las terminales de Asia Sudoriental, por su parte, capitalizan el desvío de flujos comerciales desde Estados Unidos hacia nuevas plataformas productivas en la región.

Perspectivas: entre el dinamismo y la cautela

En términos generales, la OMC elevó su proyección de crecimiento del comercio mundial de mercancías a 2,4% para 2025, frente al 0,9% estimado en agosto, aunque recortó la previsión para 2026 a 0,5%. La mejora temporal se explica por la solidez del consumo y la inversión en tecnología, pero la organización anticipa que la desaceleración económica y las tensiones comerciales podrían frenar la expansión logística el próximo año.

El análisis macroeconómico advierte además que el auge de las importaciones en 2025 podría ser un efecto transitorio del almacenamiento preventivo. A medida que las empresas ajusten sus niveles de inventario y se enfrenten al impacto pleno de los aranceles, es probable que la demanda de transporte, almacenamiento y servicios logísticos se estabilice.

Un nuevo mapa de la logística mundial

El crecimiento de los bienes vinculados a la inteligencia artificial marca una nueva fase en el comercio global, donde la infraestructura tecnológica y la logística se vuelven inseparables. Los flujos comerciales se están reorganizando alrededor de centros de innovación, hubs digitales y corredores multimodales que conectan Asia con América y Europa.

Mientras tanto, la capacidad de adaptación de las cadenas logísticas —frente a costos crecientes, nuevas tecnologías y políticas comerciales cambiantes— será clave para sostener la expansión del comercio internacional en los próximos años.