La demanda global de carga aérea creció un 2,2 % pese a la presión de nuevas políticas comerciales

Las rutas comerciales de Asia impulsaron el crecimiento del sector logístico aéreo, compensando caídas en otros mercados y mostrando adaptación frente a cambios regulatorios

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En un entorno de incertidumbre
En un entorno de incertidumbre regulatoria y volatilidad económica, la logística aérea se consolida como una herramienta significativa para sostener el comercio internacional (Foto: Movant Connection)

El transporte aéreo de carga cerró mayo de 2025 con un crecimiento interanual del 2,2 %, según los últimos datos publicados por la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA). La capacidad también creció un 2 %, consolidando una recuperación progresiva del sector, aunque con señales de desaceleración frente a meses anteriores. Esta dinámica se produce en un contexto de tensiones comerciales que afectan especialmente a las rutas entre Asia y América del Norte.

A pesar de que el tráfico en ese corredor cayó un 10,7 %, los mercados de Asia-Pacífico, Medio Oriente y Europa mantuvieron el dinamismo del sector. Las aerolíneas asiáticas lideraron el crecimiento con una suba del 8,3 % en la demanda de carga, impulsadas por el traslado anticipado de productos tecnológicos ante la entrada en vigor de nuevos aranceles.

Por otra parte, el tráfico en Norteamérica se contrajo un 5,8 %, reflejando el impacto directo de la eliminación de exenciones para envíos pequeños y los cambios regulatorios en materia de comercio electrónico.

El impacto logístico de los cambios normativos

La transformación en las reglas comerciales impuso nuevos desafíos para la planificación logística internacional. La eliminación de beneficios fiscales en Estados Unidos reconfiguró flujos tradicionales, obligando a desviar, acelerar o retrasar envíos. En ese escenario, la carga aérea volvió a demostrar su capacidad de respuesta rápida ante disrupciones, ajustando rutas y estrategias de entrega.

El volumen global de carga aérea (medido en toneladas-kilómetro de carga) creció por encima del comercio mundial de bienes (3,8 %) y de la producción industrial (2,6 %) durante abril, lo que evidencia una recuperación de la demanda vinculada a cadenas de suministro sensibles al tiempo. Sin embargo, el índice PMI manufacturero —que mide el nivel de actividad del sector y cuya barrera de expansión se ubica en 50— cayó a 49,1, lo que podría anticipar menores volúmenes en los próximos meses.

Tendencias regionales

Las rutas Asia–Europa (+13,4 %), Medio Oriente–Asia (+10,8 %) y dentro de Asia (+9,1 %) fueron las que más crecieron, impulsadas por una mayor demanda intrarregional y por la capacidad de adaptación frente a los nuevos escenarios normativos. En Europa, el aumento fue del 1,6 %, mientras que Medio Oriente registró una mejora del 3,6 %.

América Latina tuvo un desempeño moderado, con un incremento del 3,1 %, mientras que África registró una contracción del 2,1 %. Europa se mantuvo como la región con mayor factor de carga (51,8 %), lo que refleja una buena utilización de la capacidad disponible. Por el contrario, América del Norte y América Latina mostraron los niveles más bajos, con 38,2 % y 36,1 %, respectivamente, lo que plantea interrogantes sobre la eficiencia de las operaciones en esos mercados.

Según datos de la IATA,
Según datos de la IATA, el transporte aéreo de carga mostró un alza del 2,2 % frente a mayo de 2024, reflejando mayor dinamismo en rutas estratégicas (Foto: Shutterstock)

Ajustes en capacidad y rentabilidad

Los costos operativos se vieron favorecidos por una reducción del 18,8 % en el precio del combustible para aviones respecto a mayo de 2024. Sin embargo, esta variable no se tradujo en mejores márgenes, ya que los rendimientos del transporte cayeron por primera vez en el año (-2,9 % interanual).

En términos de capacidad, el aumento se concentró en la bodega de aviones de pasajeros, mientras que la oferta de aviones exclusivamente cargueros disminuyó ligeramente. Esta tendencia refleja la recuperación de la demanda turística y podría generar tensiones adicionales en mercados donde la logística aérea depende fuertemente de aviones de carga dedicados.

Flexibilidad y digitalización como claves logísticas

El comportamiento del sector durante mayo confirma que la logística aérea se adapta con agilidad a los cambios globales, pero también revela vulnerabilidades frente a decisiones comerciales unilaterales. La digitalización, la diversificación de rutas y el uso estratégico de los hubs regionales se vuelven fundamentales para asegurar entregas eficientes.

En un entorno de incertidumbre regulatoria y volatilidad económica, la logística aérea se consolida como una herramienta significativa para sostener el comercio internacional. A medida que se intensifican las exigencias de trazabilidad y previsibilidad, las empresas logísticas deberán apostar por tecnologías que aumenten la eficiencia y mitiguen los riesgos de disrupción en la cadena de suministro global.