Brasil elimina aranceles y redefine el escenario logístico automotriz con Argentina

Un nuevo decreto firmado en Brasil eliminó los aranceles para autopartes importadas desde Argentina y amplió el acuerdo bilateral vigente en el sector automotriz. Esta medida representa una medida fundamental para la consolidación de una integración logística más eficiente entre ambos países, en un contexto de aumento sostenido del comercio regional.

El acuerdo incluye la eliminación de aranceles para vehículos como buses, vans y camiones de hasta cinco toneladas, además de autopartes no producidas localmente. Esta iniciativa busca facilitar el comercio, reducir costos y aumentar la competitividad de la industria en ambos lados de la frontera.

A nivel logístico, esto supone una mayor previsibilidad para las operaciones de transporte internacional terrestre, una disminución de trámites aduaneros y una mejora en la sincronización de cadenas de suministro entre fábricas y centros de distribución.

El impacto económico de este intercambio es significativo: en 2024, el comercio bilateral de productos automotrices alcanzó los 13.700 millones de dólares, lo que representó la mitad del comercio total entre ambos países. Hasta mayo de 2025, el flujo comercial acumulado ya alcanzó los 12.600 millones, con un crecimiento interanual del 26,2 %.

Estos números no solo reflejan una recuperación económica, sino que también generan nuevas demandas sobre la infraestructura logística. La eliminación de aranceles en el sector automotriz aumentará la frecuencia de envíos entre plantas, proveedores y ensambladoras, lo que exige una optimización de los nodos logísticos binacionales, una mayor digitalización de procesos aduaneros y una gestión más eficiente del transporte terrestre.

Además de los aspectos arancelarios, el acuerdo actualiza la clasificación de productos y perfecciona las reglas de origen, fundamentales para definir el contenido nacional de los bienes comercializados. Esta precisión normativa brinda mayor seguridad jurídica y operativa para el sector privado, lo que puede traducirse en menos demoras y costos asociados a inspecciones y certificaciones.

Como contrapartida, las empresas que accedan a la exención arancelaria deberán —según lo estipulado por el nuevo protocolo firmado por el gobierno brasileño— invertir el 2 % del valor importado en investigación, desarrollo o programas industriales estratégicos. Esta obligación plantea una oportunidad para modernizar procesos de producción, digitalizar cadenas de abastecimiento y reforzar la trazabilidad del sector, lo que impactará positivamente en la logística a mediano plazo.

La integración regional en el sector automotriz avanza hacia una nueva etapa, donde la eliminación de barreras y la convergencia regulatoria impulsan la necesidad de sistemas logísticos interoperables. La evolución del comercio bilateral no solo depende de los acuerdos firmados, sino también de la capacidad del sistema logístico para absorber el incremento en el flujo de mercancías sin generar cuellos de botella.

Invertir en rutas estratégicas, ampliar zonas francas, fortalecer los pasos fronterizos y fomentar el transporte intermodal serán pasos clave para sostener esta dinámica. En un escenario donde el volumen automotriz representa una proporción significativa del comercio regional, mejorar la logística es tanto una necesidad operativa como una ventaja competitiva.