
En un intento por reactivar uno de los corredores marítimos más estratégicos del mundo, la Autoridad del Canal de Suez anunció un descuento del 15% en las tasas de tránsito para los portacontenedores con carga neta igual o superior a las 130.000 toneladas. Esta medida, que entra en vigor el 15 de mayo y se extenderá por 90 días, busca contrarrestar la drástica caída del tráfico provocada por la crisis en el mar Rojo y las tensiones geopolíticas de los últimos meses.
Desde principios de 2024, la navegación por esta arteria clave para el comercio internacional se redujo en aproximadamente un 50%, pasando de más de 70 buques diarios a entre 30 y 40. El desvío de rutas hacia el Cabo de Buena Esperanza, si bien garantiza mayor seguridad ante ataques en la zona del mar Rojo, representa un mayor costo operativo y un incremento significativo en los tiempos de tránsito para las navieras. Este desvío ha generado pérdidas estimadas en 600 millones de dólares mensuales para Egipto, país que depende del canal como una de sus principales fuentes de ingreso en divisas.
El incentivo anunciado representa un giro en la estrategia de la autoridad gestora del canal, que hasta hace poco había descartado cualquier ajuste en las tarifas. La decisión parece motivada por la necesidad urgente de atraer nuevamente a las grandes embarcaciones, especialmente en un contexto donde se empieza a vislumbrar una tregua regional que podría mejorar las condiciones de navegación. En efecto, el anuncio coincide con la reciente declaración de alto el fuego entre Estados Unidos y los rebeldes hutíes en Yemen, un paso que diversos actores internacionales interpretan como clave para estabilizar el tránsito marítimo.
Repercusiones para la logística internacional
La decisión de ofrecer descuentos directos y automáticos, sin necesidad de trámites adicionales por parte de las compañías navieras, busca brindar señales claras de previsibilidad y competitividad. Desde una perspectiva logística, el retorno de los grandes portacontenedores al canal representa una mejora sustancial en los tiempos de entrega, la planificación de rutas y la eficiencia en el uso de recursos.
Esta medida tiene el potencial de beneficiar a las cadenas de suministro globales que dependen del tránsito fluido entre Asia y Europa, especialmente en sectores como la tecnología, la industria automotriz y los bienes de consumo masivo, donde cada día de retraso genera costos adicionales. También podría impactar positivamente en la reducción de emisiones, al evitar los desvíos prolongados que implican mayores consumos de combustible.

Un paso más hacia la consolidación logística en el Mediterráneo
En paralelo al anuncio del descuento, el gobierno egipcio intensificó sus contactos diplomáticos y logísticos con actores clave del transporte marítimo mundial. En este sentido, el ministro de Exteriores del país africano recibió el mismo día a una importante delegación de una de las principales navieras del mundo, con el objetivo de reforzar la cooperación en materia logística y portuaria.
Durante el encuentro, se destacaron los proyectos conjuntos para el desarrollo de infraestructura estratégica, entre ellos la expansión de una terminal de contenedores en el puerto oriental de Port Said. Este proyecto busca posicionar al canal no solo como una vía de tránsito, sino como un verdadero hub logístico para el Mediterráneo oriental y meridional, en línea con las nuevas dinámicas del comercio global que privilegian centros intermodales cercanos a las rutas marítimas principales.
La inversión en infraestructura portuaria y la búsqueda de asociaciones estratégicas refuerzan el mensaje de que Egipto quiere retomar su lugar como actor logístico relevante en la región. Además, la reactivación del tráfico en el canal es vista como un punto de partida para normalizar otras actividades económicas que dependen directamente de la fluidez del comercio internacional.
Desafíos pendientes
Pese al optimismo que genera esta reapertura parcial del canal a través de incentivos, aún persisten desafíos significativos. La recuperación plena del tráfico dependerá en gran medida de la estabilidad en el mar Rojo y de la evolución de los conflictos regionales que afectan la percepción de riesgo de las navieras.
Asimismo, las navieras evalúan constantemente la relación costo-beneficio entre las tarifas, los riesgos de seguridad y la eficiencia operativa. Si bien el descuento actual puede actuar como un alivio temporal, será necesario acompañarlo de medidas sostenidas que garanticen previsibilidad a largo plazo, tanto desde el punto de vista tarifario como de la seguridad marítima.
En este contexto, el Canal de Suez vuelve a ocupar el centro del tablero logístico global. Las próximas semanas serán decisivas para evaluar si estas medidas logran revertir la tendencia a la baja y reposicionar al canal como el corredor preferido para el comercio intercontinental.
Últimas Noticias
Exigencias logísticas y potencial exportador de la industria minera argentina
Verónica Nohara, Country Managing Director de una mina de oro y plata en Argentina, comparte algunas de las claves que pueden llevar a la minería nacional a su máximo nivel

Autopartes y logística: claves de la adaptación al nuevo escenario comercial argentino
Pablo Daniel Novas, líder de compras y contrataciones en una empresa de neumáticos, analiza los desafíos logísticos, comerciales y productivos del rubro autopartista

El BID propone un modelo para anticipar fallas viales ante amenazas climáticas en América Latina
La iniciativa se centra en mejorar el diseño, mantenimiento y operación de caminos y puentes ante eventos extremos, con participación de expertos técnicos, actores locales y equipos de emergencia

Planificación, control y asesoramiento como claves para una gestión aduanera eficiente
Juan Carlos De Giacomo, presidente de una empresa de despachantes de aduana y vicepresidente de CAESCE, advierte sobre los riesgos de improvisar y destaca el rol de la experiencia en un entorno cada vez más dinámico

IRU advierte sobre desafíos globales en el transporte: falta de choferes, digitalización y emisiones
Un nuevo informe de la Unión Internacional de Transporte por Carretera (IRU) señala que el sistema logístico necesita más formación, mejores rutas y tecnologías aplicadas
