Autopartes y logística: claves de la adaptación al nuevo escenario comercial argentino

Pablo Daniel Novas, líder de compras y contrataciones en una empresa de neumáticos, analiza los desafíos logísticos, comerciales y productivos del rubro autopartista

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Pablo Daniel Novas es líder
Pablo Daniel Novas es líder de compras y contrataciones en una empresa de neumáticos (Foto: Movant Connection)

“Hoy no alcanza con vender, hay que sostener al cliente”, asegura Pablo. En un contexto de apertura comercial, alta exigencia operativa y transformación tecnológica, señala que la logística aparece como un diferencial decisivo en el sector autopartista.

¿Cómo evolucionó el sector de autopartes en los últimos años?

El sector acompañó la evolución de la industria automotriz. En las últimas dos décadas, Argentina vivió su mejor momento en producción de vehículos, lo que impulsó también a los fabricantes de autopartes. A medida que las automotrices subieron sus estándares de calidad, los proveedores se vieron obligados a adaptarse y profesionalizarse.

Muchas autopartes se fabrican como equipo original, es decir, salen con el vehículo desde la planta. Eso eleva las exigencias y obliga a cumplir normas impuestas por las casas matrices. El resultado ha sido una mejora sostenida del nivel general del sector, tanto en tecnología como en calidad.

¿Cuál es el rol de la innovación en este contexto?

La innovación atraviesa todo: desde los materiales de fabricación hasta los procesos internos. En el caso de los neumáticos, por ejemplo, hoy existen herramientas que permiten medir el desgaste en tiempo real, chips que almacenan datos de uso o sensores que indican el estado del producto. Todo esto acompaña a vehículos cada vez más potentes, con más tecnología y mayores exigencias de seguridad.

También ha cambiado el uso que se le da a ciertos vehículos. Por ejemplo, las pick-ups antes eran pensadas para el campo, pero hoy también se usan para llevar chicos al colegio en ciudad. Eso exigió rediseñar los neumáticos para adaptarse a ambos entornos, algo que obligó a repensar literalmente la rueda. No se trata sólo de innovación por moda, sino de responder a nuevas necesidades concretas.

¿Qué lugar ocupa la logística en la competitividad del sector?

La logística es central. Es lo que garantiza que el producto llegue en tiempo y forma. En nuestro rubro, la combinación de proveedores ágiles, transporte confiable y buena planificación hace la diferencia. Cuando el proveedor está preparado para responder a una urgencia o imprevisto, está marcando una ventaja competitiva clara.

También hay factores técnicos que influyen: no es lo mismo cargar un neumático para uso urbano que para arena o ripio. Las presiones cambian, los materiales también, y todo eso requiere una logística especializada. Pero aún con la mejor tecnología, si no hay organización ni capacidad de respuesta, se pierden oportunidades valiosas.

¿Cuál es el impacto de no contar con una planta productiva en el país?

Tener o no una planta local tiene sus ventajas y desventajas. En muchos casos, las empresas con producción local enfrentan hoy serios cuellos de botella por los costos altos, sobre todo si se combinan con caídas en las ventas. Esto está generando paradas de planta y complicaciones importantes. En cambio, operar como importador evita algunos de esos problemas, aunque también se expone a otras variables, como la política cambiaria.

En Argentina, producir localmente no es barato. Hay ejemplos como México, donde el costo de producir es mucho más competitivo y por eso atrae a tantas empresas. En nuestro caso, hasta que no haya una baja real de impuestos y una mayor estabilidad, seguir fabricando en el país es un gran desafío. Hoy muchas empresas se están viendo afectadas por la reducción de protecciones estatales y el ingreso de productos importados, en un escenario de libre mercado que obliga a ser mucho más competitivos.

En el caso de los
En el caso de los neumáticos, hoy existen herramientas que permiten medir el desgaste en tiempo real, chips que almacenan datos de uso o sensores que indican el estado del producto (Foto: Shutterstock)

¿Qué elementos son importantes a la hora de realizar compras estratégicas?

En el comercio exterior y en las compras en general, el servicio es el verdadero diferencial. El precio siempre importa, pero muchas veces lo que realmente hace la diferencia es tener un proveedor que responda cuando otros no pueden. Por ejemplo, si necesitás un transporte urgente o una entrega imprevista y ese proveedor cumple, ahí es donde se ve el verdadero valor.

En operaciones con grandes volúmenes, un camión que no llega a tiempo o un barco que se demora genera perjuicios financieros y de reputación. Por eso, el sobreprecio que pueda tener un proveedor confiable se diluye frente a las consecuencias de una falla logística. Los proveedores que perduran son aquellos que, ante una crisis, tienen disponibilidad y ofrecen soluciones rápidas.

¿Cómo ves el futuro del sector autopartista?

Los primeros meses del año mostraron un panorama alentador en términos de ventas y actividad. Sin embargo, hay una transición en marcha hacia un mercado más abierto, sin cepo cambiario ni regulaciones excesivas. Eso genera incertidumbre pero también oportunidades.

Vamos hacia una competencia real, donde ganará quien ofrezca mejor producto, mejor servicio y mejor precio. En ese sentido, la postventa también va a jugar un rol clave. No alcanza con vender, hay que sostener al cliente. El consumidor ya no está atado a una única opción y eso obliga a todos a estar a la altura.

¿Qué desafíos plantea este nuevo escenario comercial?

Nos enfrentamos a un paradigma nuevo para Argentina, uno más similar al de otros países donde oferta y demanda definen las reglas. Hay muchos jugadores nuevos, marcas que no conocíamos, y otras que están reaccionando con garantías más largas o servicios diferenciales. En definitiva, se abre un mercado más competitivo y el consumidor es quien más se beneficiará.

No estamos acostumbrados a esta lógica, venimos de muchos años con reglas cambiantes y estructuras poco estables. Pero si el mercado logra estabilizarse, seguramente en el futuro vamos a ver una evolución interesante, con más opciones, más transparencia y mejores condiciones para todos los que sepan adaptarse.