Jezzine, el pequeño pueblo del Líbano de donde era originario el padre de Carlos Slim

El padre de Carlos Slim, Julián Slim Haddad, nació en el pintoresco pueblo libanés de Jezzine, al sur de Beirut

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Carlos Slim visitó el pueblo
Carlos Slim visitó el pueblo de su padre en el año 2010, cuando era el hombre más rico del mundo. REUTERS/Gustavo Graf

En el mundo de los grandes negocios en México, pocos nombres tienen el peso y la influencia de Carlos Slim Helú, considerado desde hace décadas como el hombre más rico de México y de Latinoamérica, además de figurar en distintas ocasiones como uno de los hombres más acaudalados del planeta. Sin embargo, detrás de su historia de éxito construida en la Ciudad de México, existe un origen que se remonta a un pequeño y pintoresco pueblo del sur del Líbano llamado Jezzine, lugar donde nació su padre, Julián Slim Haddad.

Jezzine es un pueblo montañoso y boscoso ubicado a unos 40 kilómetros al sur de Beirut, la capital libanesa, y a tan solo 22 kilómetros de la ciudad costera de Sidón. Este sitio es conocido como la “ciudad de las cataratas”, debido a las impresionantes cascadas que forman parte de su paisaje natural y que lo han convertido en un destino turístico destacado en la región.

Fue en este entorno de colinas verdes, pinos y calles estrechas donde nació Julián Slim Haddad, quien décadas después emigraría a México a principios del siglo XX para evitar ser reclutado por el ejército otomano. Como muchos migrantes libaneses de la época, llegó al país con escasos recursos, pero con una fuerte vocación de trabajo, característica que más tarde heredaría a sus descendientes.

Aunque la familia Slim Helú construyó en México uno de los imperios empresariales más importantes de América Latina, sus lazos con Jezzine nunca se perdieron del todo. De hecho, la casa donde nació Julián Slim Haddad aún permanece en pie dentro del pueblo, aunque actualmente se encuentra deshabitada y resguardada, sin acceso al público, como un símbolo del origen humilde de una de las fortunas más grandes del continente.

Además de su belleza natural, Jezzine es reconocido por su riqueza cultural y artesanal. Destaca especialmente por la fabricación tradicional de cubiertos, dagas ornamentales y piezas de metal, así como por la producción de vino artesanal, actividades que han dado identidad al pueblo durante generaciones.

 Jezzine, el pueblo del
Jezzine, el pueblo del sur del Líbano donde nació Julián Slim Haddad, padre de Carlos Slim. REUTERS/Aziz Taher

Según reportes recientes, Jezzine cuenta hoy con una población aproximada de entre 3 mil y 4 mil habitantes, aunque en décadas pasadas llegó a albergar a más de 16 mil personas. Su tamaño reducido y su apego a las tradiciones lo convierten en un lugar que conserva el espíritu del Líbano profundo, el mismo que vio nacer al padre del magnate mexicano.

La visita de Carlos Slim a Jezzine

La historia familiar no estaría completa sin el regreso simbólico del hijo más famoso de Julián Slim Haddad al pueblo de su padre. En 2010, el mismo año en que Forbes reconoció a Carlos Slim como el hombre más rico del mundo, el empresario realizó una visita privada a Jezzine.

Durante ese recorrido, Slim conoció de primera mano el entorno donde creció su padre, recorrió los caminos del pueblo y estableció un reencuentro personal con sus raíces libanesas. La visita fue discreta, sin actos públicos, y desde entonces no se tiene registro de un nuevo regreso del magnate al lugar.

Actualmente, Carlos Slim tiene 85 años y aunque ha delegado gran parte de la operación de sus empresas a sus hijos y colaboradores cercanos, la memoria de Jezzine sigue formando parte del relato familiar del empresario. El pequeño pueblo libanés permanece como un símbolo del origen migrante que, con trabajo y perseverancia, dio pie a una de las historias de éxito más importantes de América Latina.