Cuáles son las propiedades curativas de tomar jugo de zanahoria, jengibre y cúrcuma por las mañanas

Sin duda empezar el día siempre es algo un poco difícil de lograr, ya que muchas veces nos sentimos bajos de energía.

Es por eso que es importante incluir en nuestros primeros alimentos bebidas que aporten nutrientes y que nos ayuden a fortalecer las defensas.

Y justo estos son los beneficios que puedes obtener si incluyes en tu desayuno un jugo de zanahoria, jengibre y cúrcuma, el cual tiene enormes propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y que refuerzan el sistema inmune, tal como te contamos a continuación.

El jugo de zanahoria, jengibre y cúrcuma combina ingredientes que contienen nutrientes y compuestos bioactivos asociados a distintos beneficios para la salud, entre los que destacan los siguientes:

• Zanahoria: Rica en vitamina A (proveniente de betacarotenos), apoya la salud visual, el sistema inmunológico y contribuye al mantenimiento de la piel. Contiene antioxidantes que ayudan a proteger las células frente a los radicales libres.
• Jengibre: Contiene gingerol, un compuesto con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. El jengibre se asocia con la reducción de molestias digestivas, como náuseas o indigestión leve.
• Cúrcuma: Su principio activo, la curcumina, ha sido estudiado por su potencial antiinflamatorio y antioxidante. La cúrcuma puede contribuir al cuidado del sistema digestivo y apoyar la respuesta natural del cuerpo frente a la inflamación.

Al consumir este jugo por las mañanas, el organismo recibe vitaminas, minerales y compuestos vegetales que contribuyen a una alimentación variada.

Ingredientes:

• 4 zanahorias medianas, peladas y cortadas
• 1 trozo pequeño de jengibre fresco (2-3 cm), pelado
• 1 trozo pequeño de cúrcuma fresca (2-3 cm), pelada(si no se consigue, puede usarse 1 cucharadita de cúrcuma en polvo)
• 1 vaso de agua (opcional, según la textura deseada)
• Jugo de medio limón (opcional)

Preparación:

1. Lava y pela las zanahorias, el jengibre y la cúrcuma.
2. Corta las zanahorias en trozos medianos.
3. Coloca todos los ingredientes en una licuadora o extractor de jugos. Si usas licuadora, añade el vaso de agua para facilitar el licuado.
4. Procesa hasta obtener una mezcla homogénea. Si deseas, agrega el jugo de medio limón.
5. Cuela el jugo si prefieres una textura más líquida.
6. Sirve de inmediato.

Se recomienda consumir el jugo fresco como parte de un desayuno balanceado que incluya otros alimentos ricos en fibra y proteína.

También se aconseja utilizar guantes al manipular cúrcuma fresca debido a que puede causar manchas en la piel, para evitar esto también es preferible la cúrcuma en polvo.