Juez otorga amparo contra tortura y malos tratos a “El Pinto”, líder de La Barredora detenido en Jalisco

Ulises Pinto Madera, apodado como “El Pinto” o “El Mamado” e identificado como presunto segundo al mando de la célula criminal La Barredora, obtuvo un amparo con suspensión de plano tras ser detenido el pasado 23 de julio de 2025 en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco.

Casi dos días después de su captura en Jalisco, dicha recurso judicial fue concedido por el Juzgado Décimo Primero de Distrito en Materia Penal de la Ciudad de México, quien otorgó medidas cautelares para impedir que las autoridades lo incomuniquen, aíslen o maltraten durante su detención:

“De la lectura integral de la demanda, se advierte que los actos reclamados que se combaten en esta vía consisten en: detención ejecutándose, incomunicación [confinamiento y/o aislamiento], malos tratos [tratos inhumanos y/o golpes], tortura. Suspensión de plano respecto a los actos reclamados b), c) y d). Vista al Agente del Ministerio Público adscrito. Diligencias (...) Notifíquese personalmente a la directa persona quejosa”, resolvió el secretario del juzgado.

El operativo que derivó en su detención fue ejecutado por la Secretaría de Marina (Semar), el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y el Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Fue arrestado junto con su escolta, Jaime Gómez Delgado, sin resistencia y sin portar armas visibles.

Tras su captura, y según versiones oficiales recogidas por Milenio, Pinto fue trasladado vía aérea desde Jalisco a la Ciudad de México, escoltado directamente a las instalaciones de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), ubicada en la colonia Guerrero, donde se mantiene bajo custodia en espera de que se formalicen sus audiencias judiciales.

Pinto Madera fue policía estatal en Tabasco y se desempeñó como jefe de escoltas y operador cercano de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad estatal.

Ambos formaron la célula criminal conocida como “La Hermandad” o “Cártel Policiaco”, el cual infiltró corporaciones públicas para facilitar actividades ilícitas como extorsión, tráfico de personas, control de antros y narcotráfico.

Pinto fue el encargado de reclutar y coordinar células de sicarios y expolicías para operar en municipios estratégicos como Cárdenas, Paraíso y Villahermosa, consolidando una red de protección y violencia que controló extensas zonas del sureste mexicano.

En 2023, tras una ruptura con Bermúdez Requena, fundó su propia célula, La Barredora, respaldada por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Desde entonces, se convirtió en uno de los principales generadores de violencia en Tabasco, Veracruz, Campeche y Jalisco.

Las autoridades federales lo señalan por su participación en diversos delitos graves, entre ellos:

• Tráfico de drogas y narcomenudeo
• Extorsión y cobro de piso
• Tráfico y explotación sexual de personas
• Robo de hidrocarburos (huachicol)
• Desapariciones forzadas y homicidios con signos de tortura
• Control de bares, antros y giros negros en varias entidades

Finalmente, se le atribuye la responsabilidad en decenas de desapariciones y ejecuciones, muchas con evidencia de tortura y mensajes firmados por La Barredora.

Además, ha acumulado una importante fortuna ilícita con bienes inmuebles y vehículos de lujo en Zapopan, Guadalajara, Paraíso y Veracruz.