¿Cuándo se prevé que termine la temporada de lluvias en México e inicie la canícula?

La temporada también podría registrar mayor precipitación durante mayo y junio de acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua)

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La alta actividad eléctrica durante
La alta actividad eléctrica durante la temporada de lluvias y la vulnerabilidad social aumentan el riesgo de muertes por rayos en México. Créditos: UNAM Global

En México, la temporada de lluvias está ligada al desarrollo de ciclones tropicales y variaciones climáticas regionales. Según información oficial del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la temporada de lluvias se extiende en el océano Pacífico desde el 15 de mayo y en el Atlántico a partir del 1 de junio. El cierre de esta temporada se da en ambas cuencas el 30 de noviembre.

Durante esta etapa, el país se mantiene bajo vigilancia ante la presencia de ciclones y tormentas que pueden traer lluvias intensas, vientos fuertes, deslaves e inundaciones, por lo que las autoridades recomiendan a la población mantener planes de protección civil y mochilas de emergencia listas, así como estar informados a través de los avisos y alertas que emite Protección Civil y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).

Para 2025, el SMN prevé la formación de entre 16 y 20 ciclones en el Pacífico, y de 13 a 17 en el Atlántico. No todos estos sistemas impactarán en territorio mexicano, pero en promedio, tres ciclones del Pacífico y dos del Atlántico llegarán a tocar tierra en México. La temporada también podría registrar mayor precipitación durante mayo y junio de acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), por lo que la vigilancia constante es fundamental, especialmente en zonas susceptibles a estos fenómenos.

Al finalizar la temporada más intensa de lluvias, México experimenta un fenómeno climático conocido como la canícula. Este período ocurre, generalmente, durante la última quincena de julio y se extiende por cerca de 40 días. La canícula se distingue por un aumento notable en las temperaturas, condiciones de cielo despejado y baja probabilidad de lluvias, lo que contrasta con el resto del verano.

Las entidades más afectadas durante la canícula suelen ser Veracruz, Tabasco, Tamaulipas, Nuevo León, San Luis Potosí, Colima, Michoacán, Guerrero, Oaxaca y Chiapas, mientras que los estados del centro y norte como Ciudad de México, Zacatecas, Aguascalientes, Coahuila y Querétaro suelen quedar fuera de los efectos de este fenómeno.

Se recomienda a la población mantenerse informada a través de fuentes oficiales para prepararse ante cambios bruscos de clima, ya que tanto la temporada de lluvias como la canícula pueden presentar ligeras variaciones cada año. Prepararse y estar atentos a los avisos oficiales es clave para reducir riesgos ante eventos climáticos extremos.

Es importante conocer el estado del tiempo y las advertencias que ofrecen los organismos dedicados a ello, ya que puede ayudar a prevenir accidentes frente a los desastres naturales.