
En México, incorporarse plenamente a la vida económica no solo implica emprender un negocio, abrir una tienda o empezar a trabajar; también requiere cumplir con obligaciones fiscales que permiten a las autoridades identificar y dar seguimiento a las actividades productivas de cada ciudadano o empresa. El instrumento central de esta relación con el fisco es el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), una clave única que sirve tanto a personas físicas como morales.
Más que un simple requisito ante el gobierno, el RFC se ha consolidado como un elemento esencial en la vida económica y financiera del país. Su función principal consiste en identificar a cada contribuyente ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), pero además se ha vuelto indispensable para acceder a servicios bancarios, solicitar créditos y realizar múltiples trámites legales.
El RFC es un registro alfanumérico otorgado por el SAT que identifica de manera única a cada persona física (individuo) o persona moral (empresa u otra figura jurídica) que lleva a cabo actividades económicas en México. Este código permite que la autoridad fiscal lleve el control de los contribuyentes, supervise el pago de impuestos y asegure el cumplimiento de las distintas obligaciones fiscales.

La obligación de inscribirse en el RFC está regulada en el artículo 27 del Código Fiscal de la Federación. Esta norma señala que todas las personas físicas y morales que deban presentar declaraciones periódicas o que estén obligadas a expedir comprobantes fiscales digitales por Internet —es decir, facturas electrónicas— deben inscribirse en este registro. De acuerdo con el SAT, esto incluye a:
- Trabajadores asalariados.
- Prestadores de servicios profesionales (como médicos, abogados, consultores).
- Comerciantes y emprendedores con actividades empresariales, incluyendo quienes venden a través de plataformas digitales.
- Arrendadores de bienes inmuebles.
- Personas que compran o venden bienes (enajenación o adquisición).
- Quienes reciben ingresos por intereses o dividendos.
- Contribuyentes en regímenes como RESICO (Régimen Simplificado de Confianza) o RIF (Régimen de Incorporación Fiscal).
¿Por qué el RFC es indispensable para obtener un crédito bancario?

Solicitar un crédito bancario en México implica, entre otros requisitos fundamentales, estar inscrito en el RFC. Ese número funciona como el elemento central de la identidad tributaria del solicitante. Los bancos, bajo las disposiciones del artículo 115 de la Ley de Instituciones de Crédito, están obligados a acreditar plenamente la identidad de sus clientes antes de otorgar cualquier producto financiero.
El mismo artículo exige que las instituciones financieras establezcan procedimientos rigurosos para prevenir y detectar actividades ilícitas, como el financiamiento al terrorismo. El RFC es un dato esencial en estos controles, ya que respalda la información fiscal y económica del cliente.
Sin RFC, no es posible formalizar la mayoría de los trámites bancarios, incluyendo cuentas de ahorro o inversión, hipotecas y créditos empresariales. El sistema financiero actual lo reconoce como único identificador universal de contribuyentes.
Más Noticias
Estos productos de limpieza podrían ser peligrosos si los usas en temporada de frío
Durante la temporada fría, la ventilación limitada en los hogares puede aumentar la exposición a vapores tóxicos y reacciones químicas peligrosas

Quiénes son y cómo operan las Fuerzas Especiales de la Marina que participan en el Plan Michoacán
Cinco unidades de Fuerzas Especiales de la Marina participarán en el Plan Michoacán con la misión de capturar y extraer a líderes de los principales cárteles

Ángela Aguilar presume su anillo de bodas en su concierto y revela que Nodal se enoja si se lo quita
La cantante ha mencionado a Christian Nodal en todos sus shows

Guerrero registra sismo de 4.0 de magnitud
El Servicio Sismológico Nacional confirmó los detalles del temblor minutos después de su ocurrencia

Cuáles son las estafas más comunes en el Buen Fin y cómo evitar caer en ellas
Ciberdelincuentes emplean técnicas sofisticadas para robar datos y recursos financieros en temporada de ofertas comerciales

