Cronología del caso Sasha Sokol y Luis De Llano: puntos clave para entender en qué va

La denuncia pública abrió un debate en 2022 y la situación afectó a la cantante en varios ámbitos

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La cantante compartió el mensaje
La cantante compartió el mensaje en sus redes sociales (Foto: Instagram/@timbiriche_4reva)

La denuncia que marcó un impacto en el debate nacional sobre abuso de poder en la industria del entretenimiento tuvo como protagonistas a Sasha Sokol, reconocida cantante y exintegrante del grupo Timbiriche, y al productor Luis de Llano Macedo.

El 8 de marzo de 2022, en el marco del Día Internacional de la Mujer, Sasha Sokol utilizó plataformas digitales para romper el silencio. Reveló que mantuvo una relación con Luis de Llano que comenzó cuando era menor de edad, enfatizando que el vínculo fue “ilícito y asimétrico por la diferencia de edad y el rol jerárquico que ejerció”. La artista denunció la manipulación vivida y cómo la percepción pública llegó en muchos momentos a responsabilizarla a ella misma del abuso.

Las reacciones no se hicieron esperar. En su momento, el público y especialmente los usuarios de Twitter, bajo el hashtag #YoSiTeCreoSasha, manifestaron apoyo incondicional a Sokol, generando una ola de comentarios que subrayaban el carácter delictivo de cualquier relación entre un adulto y una menor de edad en condiciones de poder desigual.

Desde el inicio, Sokol buscó proteger a su entorno familiar y pidió que las acusaciones no se dirigieran contra sus padres ni terceras personas. Nos vemos en los tribunales, advirtió públicamente a Luis de Llano tras sus declaraciones exoneratorias donde afirmó: No he cometido delito alguno.

Así dio la noticia 
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Así dio la noticia (Foto: Instagram/@sashasokolova)

Proceso legal y acciones judiciales de Sasha Sokol

La denuncia pública fue el punto de partida para que Sasha Sokol emprendiera un proceso judicial por la vía civil, mediante una demanda por daño moral contra Luis de Llano. De acuerdo con sus declaraciones, la reparación que eventualmente se le adjudicara sería donada íntegramente a ADIVAC, una organización especializada en la lucha contra el abuso sexual infantil.

En entrevistas, Sokol relató la dificultad de comprender en su niñez la anormalidad de los hechos que le tocó experimentar. “Claramente, yo tenía normalizada esta relación por el nivel de manipulación y grooming que viví. Estar con él me hacía sentir una niña especial, vista; porque el personaje al que todos a mi alrededor admiraban, aplaudían y respetaban, en lugar de irse con una mujer despampanante, me había mirado a mí“, compartió. El relato evidencia cómo la desigualdad de poder fue clave en la dinámica establecida.

La primera sentencia llegó a favor de Sokol. El juzgado del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México estableció que Luis de Llano violentó la dignidad, integridad física, intimidad y honor de la artista. El fallo ordenó al productor a reparar el daño, ofrecer una disculpa pública, tomar un curso de prevención de abuso sexual y abstenerse de volver a mencionar a Sokol o el caso en cualquier foro.

En ese proceso salieron a la luz más detalles, como la declaración del productor Javier Díaz Dueñas, quien aseguró que Sokol habría perdido un embarazo de De Llano cuando aún era menor de edad. La acumulación de hechos y testimonios aumentó la presión social y reforzó la demanda de justicia para la exintegrante de Timbiriche.

Sasha Sokol compartió nuevos pensamientos
Sasha Sokol compartió nuevos pensamientos sobre Luis de Llano (Foto: Infobae México)

A pesar de las críticas y los intentos del productor por desacreditar la versión de Sokol, el proceso legal se mantuvo firme y la condena civil se convirtió en un referente para otros casos similares.

Intervención de la Suprema Corte y repercusiones del fallo

La historia tomó un giro cuando el caso llegó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), escenario que determinó no solo el camino legal de la demanda, sino el precedente nacional respecto al abuso sexual infantil.

Atracción y resolución de la SCJN del caso de Sasha Sokol y Luis de Llano

En octubre de 2024, ante la notoria relevancia del caso, el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena promovió ante la Primera Sala de la SCJN la atracción de los expedientes de amparo directo derivados del juicio civil. Sokol celebró este avance legal:

“La Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió, por unanimidad de votos, ejercer la facultad de atracción para conocer los expedientes de amparo directo, derivados del juicio civil que promoví en contra de Luis de Llano. Esto quiere decir que será la Suprema Corte quien juzgará y decidirá en definitiva mi caso”.

En junio de 2025, la resolución finalizó con la confirmación, por parte de la Suprema Corte, de la condena civil impuesta a De Llano. El ministro Jorge Mario Pardo Rebolledo, al presentar el proyecto de sentencia, sostuvo: “Se determina que cualquier término de prescripción vulneraría los derechos de acceso a la justicia de las personas que sufrieron violencia sexual cuando eran menores de edad”.

Anotó también que establecer un plazo de prescripción pondría en peligro el derecho de la víctima a vivir sin violencia y a la integridad personal, por lo cual el Supremo Tribunal resolvió que en estos casos no debe operar prescripción alguna.

La SCJN obligó formalmente a Luis de Llano a reparar el daño, ofrecer una disculpa pública, tomar un curso especializado en prevención de abuso sexual y a abstenerse de referirse a Sasha Sokol o al caso bajo ninguna circunstancia. Este conjunto de medidas buscó reivindicar la integridad y honor de la víctima.

Reacción de Sasha Sokol

La cantante celebró la decisión del máximo tribunal y recalcó el impacto de la sentencia en términos sociales y legales: “Ninguna sentencia, por sí sola, tiene la capacidad de reparar tanto daño, pero valoro profundamente que el proyecto del Ministro Jorge Pardo Rebolledo valide el proceso que vivimos las víctimas al reconocer que: ‘…en casos de abuso sexual en contra de menores existen tres problemas para efectos de la prescripción…: (i) el paso del tiempo necesario para que la víctima asimile los hechos e identifique plenamente su carácter de víctima; (ii) el paso del tiempo para entender que determinados daños fueron causados por la violencia sexual; y (iii) la lucha interna que existe en las y los sobrevivientes para tomar valor y acudir a las instancias judiciales…’“.