Alerta máxima por huracán Erick en Guerrero tras aislamiento provocado por la tormenta Dalila

Habitantes de Ayutla, Tecoanapa y Florencio Villarreal se ven afectados por la presencia constante de fenómenos naturales

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Autoridades activan planes de emergencia
Autoridades activan planes de emergencia en Guerrero ante la llegada del huracán Erick, que amenaza con intensas lluvias y vientos. (Imagen de archivo. EFE/Francisca Meza)

Diez municipios del estado de Guerrero se encuentran en alerta máxima debido a la intensificación del ahora huracán Erick. Las autoridades desplegaron de manera conjunta a elementos de la Guardia Nacional, DEFENSA, SEMAR y tanto el gobierno estatal como municipal implementaron acciones para proteger a la población.

Con el fin de mantener a salvo a los pobladores, se activaron el Plan DN-III y el Plan Marina pero Guerrero ha sido el punto de encuentro de desastres naturales como el huracán OTIS que fue de categoría cinco y el huracán John, categoría tres.

Al verse afectado constantemente por estos fenómenos naturales, el estado ha experimentado problemas de recuperación, pues recientemente la tormenta tropical Dalila también causó estragos en ciertas regiones como Tierra Colorada en el municipio de Juan R. Escudero, donde colapsó el paso provisional sobre el río Omitlán.

Dalila causa colapso de puente en Guerrero

El colapso de un puente
El colapso de un puente provisional por las lluvias de la tormenta tropical Dalila deja incomunicados a habitantes en Guerrero. (REUTERS/Javier Tinoco)

Dicha situación dejó incomunicados a los habitantes de Tecoanapa, Ayutla y Florencio Villarreal (Cruz Grande), en la región de Costa Chica, Guerrero.

Las lluvias provocadas por la tormenta tropical Dalila durante el pasado fin de semana arrastraron la estructura provisional, que había sido construida por los vecinos con apoyo de autoridades locales.

Este incidente agrava la situación de aislamiento que enfrentan estas comunidades desde septiembre de 2024, cuando el puente original colapsó debido a las lluvias del huracán John.

El puente provisional, entregado por autoridades municipales y estatales el 1 de marzo de este año, fue diseñado como una solución temporal mientras se reconstruye la estructura definitiva. Sin embargo, desde su inauguración, los vecinos advirtieron que no soportaría las lluvias intensas.

Estas previsiones se confirmaron el pasado viernes y sábado, cuando el aumento del caudal del río Omitlán destruyó el vado, dejando nuevamente incomunicados a los habitantes de los municipios afectados, según información publicada por el medio local Sur Acapulco.

El puente original, que conectaba a estas comunidades con otras regiones de Guerrero, colapsó hace casi un año. Desde entonces, los pobladores han enfrentado dificultades para trasladarse, dependiendo de soluciones temporales que no han sido suficientes para garantizar una conexión segura y estable.

Según denunciaron los usuarios del tramo carretero, el gobierno federal aún no ha concluido la reconstrucción del puente definitivo, a pesar de que las obras comenzaron en abril de este año. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT) estima que los trabajos finalizarán en diciembre.

El impacto del colapso del paso provisional ha sido significativo para los habitantes de la región. De acuerdo con testimonios recogidos por Sur Acapulco, José Luis, vecino de la comunidad de “El Cortijo”, en el municipio de Ayutla, el tiempo de espera para cruzar el río podría extenderse hasta dos horas, dependiendo de la instalación de lozas que permitan el paso.

Por su parte, Raúl Felipe, también residente de Ayutla, explicó que, en su caso, tendría que tomar una ruta alternativa a través de Acapulco para llegar a Chilpancingo, lo que implica un recorrido mucho más largo y complicado.

El puente provisional, construido con el apoyo de las comunidades locales y autoridades estatales, fue una medida de emergencia implementada cinco meses después del colapso del puente original.

Sin embargo, su diseño no fue suficiente para resistir las condiciones climáticas adversas que afectan regularmente a la región. Las lluvias de la tormenta tropical Dalila, que azotaron la zona el pasado fin de semana, evidenciaron la fragilidad de esta solución temporal.

La situación ha generado críticas hacia las autoridades responsables de la reconstrucción del puente definitivo. Los habitantes de los municipios afectados han expresado su frustración por los retrasos en las obras y la falta de soluciones efectivas para garantizar la conectividad de la región.

Mientras tanto, las comunidades continúan enfrentando dificultades para acceder a servicios como transporte y actividades económicas debido al aislamiento provocado por el colapso del paso provisional.