CJNG y Ciro Gómez Leyva: Estas son las inconsistencias en la versión que involucra a El Mencho en el atentado

La reciente sentencia contra Pedro Francisco Gómez Jaramillo, alias El Pool, y Héctor Eduardo Martínez Jiménez, alias El Bart, reavivó uno de los episodios más graves contra la libertad de expresión en México: el atentado contra el periodista Ciro Gómez Leyva, ocurrido la noche del 15 de diciembre de 2022 en la Ciudad de México.

Ambos fueron condenados tras declararse culpables bajo el esquema de procedimiento abreviado, reconociendo su participación directa en el ataque y señalando como autor intelectual a Armando Escárcega Valdez, El Patrón. Este último, de acuerdo con las declaraciones, habría dicho que la orden de matar al periodista venía de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Sin embargo, periodistas han comenzado a cuestionar esta narrativa.

El señalamiento hacia El Mencho se dio a conocer el pasado 10 de junio, cuando durante una audiencia judicial la Fiscalía General de la República (FGR) leyó la confesión de El Pool, quien afirmó que el atentado fue un “encargo del señor Mencho”.

Según la versión oficial, los autores materiales fueron instruidos en un centro de entrenamiento del CJNG en Ciudad Guzmán, Jalisco, por un sujeto identificado como El Primo, de nacionalidad colombiana. También se identificó la participación de Juan Antonio Cisneros, alias El Dedotes, e Israel Jiménez Ávila, alias El Yeyé.

A partir de estas declaraciones, la FGR construyó una línea de responsabilidad ascendente que culmina con El Mencho como el orquestador del plan. No obstante, esa lógica es precisamente la que ha generado escepticismo entre especialistas en seguridad, crimen organizado y periodistas como Óscar Balderas.

Durante una entrevista con Luis Cárdenas en MVS Noticias, Balderas señaló que esta hipótesis es una “conclusión floja”, al asumir que toda acción criminal bajo el membrete del CJNG necesariamente pasa por su líder.

“El cártel de Jalisco es una estructura descentralizada, casi de franquicias criminales, con gerencias locales que operan con cierta autonomía. No se parece en nada al Cártel de Sinaloa, donde todo pasaba por El Chapo o El Mayo”, explicó.

Por otro lado, el eslabón clave en esta cadena de mando es El Patrón. De acuerdo con las confesiones, fue él quien entregó la fotografía de Gómez Leyva a los sicarios y quien afirmó que se trataba de una orden del líder máximo del CJNG.

Pero aquí surgen varias dudas, según el comunicador. El Patrón no era considerado una figura relevante dentro del mapa criminal antes del ataque. Según Balderas, “es un tipo que no figuraba prácticamente en ningún mapa criminal hasta que ocurrió el atentado contra Ciro”.

Para algunos analistas, esto representa un salto lógico difícil de justificar: pasar de un operador de bajo perfil a ser interlocutor directo de El Mencho, una figura cuyo paradero es desconocido desde hace años y cuya comunicación, según las propias autoridades, está estrictamente controlada.

El periodista Ciro Gómez Leyva ha reconocido públicamente el trabajo de la FGR, y ha confiado en sus abogados, entre ellos Javier Esquinca, quien ha seguido de cerca todas las audiencias. Sin embargo, el propio comunicador ha matizado su postura: “La explicación la tomo, la acepto, pero no me satisface del todo”.

En entrevistas recientes y en sus espacios informativos, Gómez Leyva ha expresado con claridad sus reservas sobre la narrativa oficial. Señaló que conocía desde abril de 2024 las declaraciones de los implicados, quienes narraron su participación en detalle, incluyendo su entrenamiento en Jalisco y el rastreo digital que hicieron del periodista.

Pero cuestionó con firmeza lo superficial de esa supuesta investigación criminal: los autores materiales dijeron que solo “lo googlearon”, buscaron videos en YouTube y lo vigilaron una o dos noches afuera de las instalaciones de Imagen Televisión.

Con evidente ironía, Gómez Leyva ha reiterado su desconcierto ante lo que considera una trama endeble: “¿En serio así fueron los hechos?”, “¿Y si no fue por esa nota, por cuál fue?”, ha dicho al aire, refiriéndose a la versión de que todo se habría originado por la publicación de una nota sobre familiares de El Mencho.

Además, expresó escepticismo sobre la logística del ataque: “¿El cártel Jalisco manda matar así porque sí? ¿Con tipos que ni siquiera eran sicarios profesionales y que nunca habían trabajado para ellos?”.

Hasta ahora, 14 personas han sido detenidas en relación con el atentado. Siete hombres y seis mujeres enfrentaron diversos cargos. Cuatro de las mujeres ya fueron sentenciadas mediante procedimiento abreviado y se encuentran en libertad. De los cinco acusados de tentativa de homicidio, dos ya fueron condenados y tres más se espera que reciban sentencia en las próximas semanas.

El Patrón sigue siendo una pieza pendiente en el proceso judicial. Según el abogado Javier Esquinca, ha manifestado su deseo de acogerse a una salida alterna, pero hasta ahora no se le ha concedido.

Las hipótesis sobre el móvil también resultan frágiles. Una de las versiones indica que el atentado podría haberse relacionado con una cobertura de 2021 sobre la desaparición de dos marinos en Zapopan, donde se mencionaban a familiares de El Mencho. Pero esa información fue difundida por varios medios, no solo por Gómez Leyva.

El periodista ha enfatizado que ese tipo de notas fueron publicadas por al menos ocho medios nacionales, incluidos periódicos y televisoras, y que su programa no pudo haber sido el único visto por los agresores aquella noche.

La sentencia contra los sicarios marca un avance en el proceso legal, pero no despeja las dudas sobre la cadena de mando ni sobre la lógica detrás del atentado, según los periodistas.