Reservan por cinco años permisos que otorgó el INAH a MrBeast tras ingresar a zonas arqueológicas protegidas

El creador de contenido con más de 300 millones de seguidores afirma que logró ingresar a patrimonio mexicano con todos los permisos correspondientes

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Aunque el youtuber afirma que
Aunque el youtuber afirma que no hay denuncia, las autoridades mexicanas emitieron una petición para reparar el daño. (Foto de Jordan Strauss/Invision/AP Archivo)

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha catalogado como información “reservada” los permisos entregados al creador de contenido estadounidense MrBeast (James Donaldson) para grabar en zonas arqueológicas mayas, incluyendo Calakmul y Chichén Itzá.

El oficio interno establece que la documentación permanecerá sellada hasta cinco años, es decir, hasta 2030, al argumentar que existe un proceso administrativo en curso, cuya divulgación podría causar “resultados perjudiciales” para el Instituto.

El director del INAH, Diego Prieto, señaló que aún se encuentran en una etapa “conciliatoria” con la empresa Full Circle Media, representante de MrBeast. Detalló que se han propuesto acciones iniciales: una disculpa pública por los “excesos cometidos”, un convenio de colaboración y una reparación del daño al patrimonio cultural —aunque este último tendría carácter más simbólico que económico. Prieto agregó que el influencer “no atendió los términos de lo autorizado”, excediéndose en el uso de imágenes con fines publicitarios, lo que admitieron tras la filmación en sitio y en la postproducción.

El influencer fue captado en
El influencer fue captado en la zona arqueológica de Calakmul. Foto: Campeche Chulo

Una visita que salió demasiado cara

El conflicto estalló cuando, en mayo, el INAH presentó una demanda administrativa contra Full Circle Media por presunto daño a patrimonio cultural, por la inclusión de publicidad en el video “Exploré templos de 2000 años de antigüedad”, y por falsear algunos contenidos. Entre ellos, se le acusa de simular un vuelo de dron dentro de la pirámide de Kukulkán y pernoctar en zonas vedadas. Las autoridades señalan que dichas escenas fueron editadas, no reales.

El litigio también está acompañado de una denuncia por el uso no autorizado de la imagen de los sitios arqueológicos para fines comerciales. En el video, MrBeast promocionó su marca de chocolates Feastables y otras como Jack Link’s, dentro del contexto arqueológico, un uso que el INAH no aprobó. Además, la demanda señala que las tomas de dron y escenas de aventura teatralizada no solo violan las condiciones del permiso, sino que alteran la percepción pública del patrimonio histórico.

En respuesta, MrBeast, quien cuenta con más de 395 millones de suscriptores en YouTube, negó que estuviera siendo demandado y argumentó que su equipo filmó bajo los protocolos establecidos. A través de su cuenta en la red social X (antes Twitter), indicó que todas las actividades en la grabación fueron supervisadas por personal del INAH, y que la promoción comercial fue añadida durante la edición posterior . En dicho mensaje, también señaló que ha financiado proyectos de infraestructura —como pozos de agua— y colaborado con el INAH para fomentar la arqueología mexicana como agradecimiento por permitirle filmar.

Hasta la gobernadora de Campeche,
Hasta la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, estuvo presente en la visita del youtuber. (Foto: Facebook)

Layda Sansores defiende a MrBeast

Mientras tanto, el gobierno de Campeche asumió la responsabilidad por la realización del video en su territorio, argumentando que la producción obtuvo permisos vía la Secretaría de Turismo y autoridades locales, no directamente con la Secretaría de Cultura ni el INAH. La gobernadora Layda Sansores aplaudió la difusión global generada por el video, subrayando beneficios para el turismo local. No obstante, las secretarías de Cultura y Turismo estatal alegaron no ser sujeto obligado para la entrega de informes sobre la producción.

En los documentos reservados, INAH alega que cualquier divulgación en este momento podría entorpecer la resolución administrativa, la colaboración pendiente y el proceso de resarcimiento. Si bien el Instituto reconoce que el permiso de filmación se otorgó inicialmente bajo la premisa de permitir solo uso cultural, no publicitario, ahora está por confirmado que hubo uso con fines comerciales .

La resolución del proceso administrativo será crucial para sentar precedentes sobre el uso de patrimonio cultural en contenidos monetizados. El INAH ha dejado claro que no tolerará el empleo indebido de espacios arqueológicos en beneficio comercial, reforzando su compromiso con la protección del legado histórico y cultural de México.