El corrido de “El Changuito Ántrax” que revela cómo es su relación con “El Mayito Flaco”

En medio de la guerra interna que ha fracturado al Cártel de Sinaloa, el nombre de Rafael Guadalupe Félix Núñez, alias El Changuito Ántrax, ha emergido con fuerza.

Lejos de mantener un perfil bajo, el líder del grupo armado Los Ántrax ha reaparecido no sólo por el papel que ha jugado en la guerra entre La Mayiza y Los Chapitos, sino también en un nuevo narcocorrido donde se habla de cómo es su relación con la familia Zambada, especialmente con Ismael El Mayo Zambada y su hijo Ismael Zambada Sicairos, El Mayito Flaco.

Mientras las facciones de Los Chapitos y Los Zambada se disputan el control de rutas, plazas y alianzas, El Changuito Ántrax se ha convertido en un operador central para la resistencia de La Mayiza.

Rafael Guadalupe Félix Núñez inició su carrera criminal en el año 2008, cuando el Cártel de Sinaloa se fragmentó tras la ruptura con los Beltrán Leyva. Bajo las órdenes de Rodrigo Aréchiga Gamboa, alias El Chino Ántrax, el joven Rafael se incorporó al naciente brazo armado del cártel, Los Ántrax, caracterizado por su capacidad de respuesta violenta y despliegue militarizado.

Fue detenido en 2014 en posesión de armas y cocaína, pero tres años después, en marzo de 2017, logró fugarse del penal de Aguaruto, en Culiacán, junto a otros operadores. Desde entonces, su paradero fue incierto hasta que documentos filtrados por el colectivo Guacamaya y reportes de inteligencia del Ejército Mexicano lo ubicaron en Manzanillo, Colima, como jefe de plaza del Cártel de Sinaloa en esa entidad.

El puerto de Manzanillo se ha convertido en un punto neurálgico para el tráfico de drogas, particularmente fentanilo, debido a la llegada constante de precursores químicos provenientes de Asia.

Según la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, desde su escape Félix Núñez se ha consolidado como un líder violento y estratégico en la logística internacional del cártel. En 2023, fue oficialmente sancionado por el gobierno estadounidense, junto a los hermanos Arzate García, conocidos como El Aquiles y La Rana.

En enero de este año, un video difundido en redes sociales mostró un interrogatorio de Los Chapitos a Jesús Ramón Pérez Núñez, quien se identificó como primo de El Changuito Ántrax, quien antes de presuntamente ser asesinado fue obligado a decir que había sido enviado por órdenes directas de su familiar a realizar ejecuciones en Culiacán.

El 18 de abril de 2025, el canal oficial de Arley Pérez en YouTube publicó el corrido “Changuito Me Apodaron”, interpretado por el propio Arley y Grupo Feroz, como parte del álbum De Parranda Por Durango.

Hasta la fecha, el video acumula 568 mil 272 visualizaciones, más de 6 mil 500 “me gusta”, y fue lanzado bajo el sello GPL Entertainment, Inc.

El corrido “Changuito Me Apodaron”, interpretado por Arley Pérez y Grupo Feroz, no es solo un tema musical: es una declaración estructurada sobre poder, lealtad y jerarquía dentro del Cártel de Sinaloa, en un momento crítico.

El personaje se retrata como alguien reservado, estratégico, pero con amplio control sobre operaciones, lo cual contrasta con estilos más visibles o impulsivos de otros actores del narco. Al afirmar que cuenta con el apoyo del “jefe Mayito Flaco” y que trabaja “pa’ Zambada sin descanso”, establece con claridad su posición dentro de la facción conocida como La Mayiza.

Uno de los fragmentos más reveladores es aquel en el que afirma que “el señor del sombrero” —una referencia directa a Ismael “El Mayo” Zambada— le otorgó el “timón del barco”.

Esta coincidencia no es menor. En su podcast Narcosistema, la periodista Anabel Hernández reveló que, durante las últimas semanas de libertad de El Mayo Zambada, éste se habría reunido en repetidas ocasiones con El Changuito Ántrax. Según esas fuentes, el propósito habría sido reorganizar la estructura del grupo.

La canción también deja en claro su cercanía con El Mayito Flaco. Aunque reconoce que no tienen lazos de sangre, subraya que la lealtad ha sido demostrada y correspondida, y que actualmente mantiene el mando de Los Ántrax con el respaldo de la familia Zambada.

Además de resaltar su posición jerárquica, el corrido alude a su identidad clave dentro de la estructura criminal. Se refiere a sí mismo como el “06”, una probable clave interna que alude a su nivel de mando dentro de la célula armada. La elección de ese número es menor que el famoso “09” que ostentó El Chino Ántrax.

La canción cierra con una despedida a “don Mayo Zambada”, lo que puede leerse como un homenaje o como una validación pública de que su figura ya no está activa físicamente, pero sí espiritualmente dentro de la organización.

“Dicen que soy calmado, mas nunca he sido dejado

Yo sé que no está fácil andar en lo que yo ando

Cuento con el apoyo del jefe Mayito Flaco

Sí, señor, pa’ Zambada trabajamos sin descanso

Por ahí andan los Ántrax y yo soy el que está al mando

El señor del sombrero me otorgó el timón del barco

Sí, señor, soy el 06, Changuito me apodaron

Yo ando de arriba a abajo, pa’ que ni me anden buscando

Y ahí nomás, mi compa Felino

Y arriba el Grupo Feroz, viejón

Así nomás, mi viejo, se oye

Y porque la lealtad siempre tе tiene las puertas abiеrtas, viejo

Recuerdo mis inicios, que empecé con el cuñado

Los recuerdos se vienen fumando un Marlboro blanco

Y ahorita aquí me encuentro al lado de mi carnal Flaco

No seremos de sangre, mas lealtad yo he demostrado

Siguen firmes los Ántrax y yo soy el que está al mando

El señor del sombrero y el jefe Flaco me dio el mando

Qué orgulloso me siento de todo lo que me ha pasado

Y a don Mayo Zambada siempre vamos a extrañarlo".