Cuatro infusiones frías para evitar la deshidratación en temporada de calor

Las infusiones frías se presentan como una alternativa natural y efectiva para combatir la deshidratación, especialmente durante las ondas de calor.

Estas bebidas, además de ser refrescantes, ofrecen beneficios adicionales al incluir ingredientes ricos en antioxidantes, electrolitos y compuestos bioactivos. Estas preparaciones no solo hidratan, sino que también contribuyen al bienestar general sin necesidad de azúcares añadidos.

Una de las opciones destacadas es la infusión fría de jamaica con limón y menta, que combina propiedades antioxidantes, diuréticas y refrescantes.

La flor de jamaica, rica en antocianinas, ayuda a mejorar la circulación y tiene un efecto diurético leve, mientras que el limón aporta vitamina C y potasio, esenciales para reponer electrolitos.

La menta, por su parte, actúa sobre los receptores térmicos, aliviando la sensación de calor. Para prepararla, se recomienda hervir un litro de agua con dos cucharadas de flor de jamaica, colar y enfriar, y luego añadir el jugo de un limón y hojas de menta antes de refrigerar.

Otra opción es el agua de pepino con albahaca y limón, ideal para quienes buscan una bebida ligera y altamente hidratante.

El pepino, compuesto en un 96% por agua, contiene potasio y magnesio, lo que favorece la rehidratación. La albahaca, con propiedades antiinflamatorias gracias a compuestos como el eugenol, complementa esta infusión junto con el limón, que aporta un efecto alcalinizante.

La preparación consiste en añadir rodajas de medio pepino, cinco hojas de albahaca fresca y el jugo de un limón a un litro de agua, dejando reposar en frío durante dos horas.

El té verde frío con jengibre y naranja se destaca por sus propiedades antioxidantes y termorreguladoras. El té verde contiene catequinas que protegen las células del daño oxidativo, mientras que el jengibre mejora la digestión y la circulación.

La naranja, rica en vitamina C y potasio, complementa esta bebida al prevenir la pérdida de electrolitos. Para prepararla, se deben infusionar dos bolsitas de té verde en un litro de agua caliente, añadir rodajas de jengibre y naranja, enfriar y servir con hielo.

Por último, la infusión de manzanilla con manzana y canela es una opción calmante y dulce de forma natural. La manzanilla, conocida por sus propiedades ansiolíticas y antiinflamatorias, se combina con la hidratación que aporta la manzana y los beneficios vasodilatadores de la canela.

La preparación incluye hervir un litro de agua con dos bolsitas de manzanilla, añadir rodajas de manzana roja y un trozo de canela en rama, enfriar y servir con hielo.

Según estudios, las bebidas que contienen minerales y compuestos bioactivos pueden ser más eficaces que el agua pura para mantener la hidratación, especialmente en condiciones de calor extremo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el European Hydration Institute respaldan que líquidos con sodio, potasio y glucosa en bajas concentraciones mejoran la absorción intestinal de líquidos, lo que resulta crucial durante la sudoración excesiva.

Cada una de las infusiones propuestas tiene un respaldo científico que avala sus beneficios. Por ejemplo, la flor de jamaica contiene antocianinas con efectos antioxidantes y vasodilatadores, mientras que el pepino es una fuente natural de potasio y magnesio.

El té verde, por su parte, aporta catequinas que reducen el daño celular, y la manzanilla tiene propiedades calmantes que ayudan a evitar golpes de calor relacionados con el estrés o la ansiedad.

Además de ser efectivas, estas infusiones son prácticas y pueden almacenarse en el refrigerador hasta por tres días. También se pueden transportar en botellas reutilizables, lo que las convierte en una opción sostenible para mantenerse hidratado fuera de casa.