¿Tienes 15 o 16 años, vives en el Edomex y quieres trabajar? Estos son los requisitos legales para hacerlo

Adolescentes de esta edad pueden trabajar legalmente cumpliendo disposiciones de la Ley Federal del Trabajo

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La Ley Federal del Trabajo
La Ley Federal del Trabajo prohíbe empleos a menores de quince años bajo cualquier circunstancia en México. (EFE/ Gustavo Amador)

El trabajo infantil o de menores de edad es definido usualmente como “todo trabajo que priva a los niños de su niñez, su potencial y su dignidad”, por lo que se considera que es “perjudicial para su desarrollo físico y psicológico”, según la Organización Internacional del Trabajo.

Por ello, los menores de edad que deseen integrarse al ámbito laboral en México deben cumplir con una serie de requisitos específicos establecidos por la Ley Federal del Trabajo, de acuerdo con la Secretaría del Trabajo.

Este procedimiento está dirigido a jóvenes de entre quince y dieciséis años, quienes necesitan una autorización formal para prestar sus servicios en un centro de trabajo. Con esta normativa se busca garantizar que el empleo no interfiera con su desarrollo educativo ni con su bienestar físico y emocional.

Requisitos para obtener la autorización laboral

Solo adolescentes de 15 a
Solo adolescentes de 15 a 16 años, con autorización, pueden trabajar en condiciones compatibles con sus estudios. (EFE/Carlos Ramírez)

La Ley Federal del Trabajo, en sus artículos 22 y 22 Bis, establece que los menores de quince años tienen prohibido trabajar bajo cualquier circunstancia. Por su parte, los adolescentes mayores de quince y menores de dieciséis años pueden trabajar únicamente si cuentan con la autorización de sus padres, tutores legales o, en su defecto, de instituciones como el sindicato al que pertenezcan, la Junta de Conciliación y Arbitraje, el Inspector del Trabajo o la Autoridad Política correspondiente.

Según informó la Secretaría del Trabajo, esta medida tiene como objetivo proteger los derechos de los menores y asegurar que su empleo sea compatible con su educación básica obligatoria.

El proceso para obtener la autorización laboral incluye una lista de documentos que deben presentarse en su versión original. Entre ellos se encuentran el acta de nacimiento y la CURP del menor, así como un comprobante de domicilio actualizado, que puede ser un recibo de servicios como agua, luz, teléfono, predial o renta, con una antigüedad no mayor a tres meses. Además, es necesario presentar una identificación oficial del menor, como su credencial escolar actualizada o un pasaporte vigente, junto con la identificación del padre, madre o tutor legal.

Otro requisito fundamental es la constancia de estudios oficial, que debe estar actualizada, firmada y sellada. En periodos vacacionales, se permite presentar la boleta de calificaciones o el recibo de inscripción al ciclo escolar inmediato siguiente. Asimismo, se requiere un certificado médico reciente, emitido exclusivamente por instituciones como la Cruz Roja, el DIF o un centro de salud, el cual debe estar firmado y sellado. Finalmente, se solicita una fotografía reciente tamaño infantil del menor.

La normativa también establece que los menores de edad que no hayan concluido su educación básica obligatoria solo podrán trabajar si la autoridad laboral correspondiente determina que existe compatibilidad entre sus estudios y el empleo.

Según detalla la Secretaría del Trabajo, esta disposición, incluida en el artículo 22 Bis de la Ley Federal del Trabajo, busca evitar que el trabajo interfiera con el desarrollo académico de los adolescentes. En este sentido, la autorización laboral se convierte en un mecanismo de control que permite a las autoridades verificar que las condiciones laborales sean adecuadas para los menores.

Detalles respecto a la autorización laboral para menores

La educación básica obligatoria no
La educación básica obligatoria no debe sacrificarse por motivos laborales, según la Secretaría del Trabajo. (Cuartoscuro)

La obtención de esta autorización no sólo permite a los jóvenes integrarse al mercado laboral de manera legal, sino que también les brinda la oportunidad de desarrollar habilidades económicas y profesionales desde una edad temprana.

Según informó la Secretaría del Trabajo, este proceso busca equilibrar las necesidades económicas de las familias con la protección de los derechos de los menores, asegurando que su bienestar y educación no se vean comprometidos.

La regulación del trabajo infantil en México responde a la necesidad de proteger a los menores de edad de condiciones laborales que puedan ser perjudiciales para su desarrollo.

Al exigir la autorización de padres, tutores o autoridades competentes, así como la presentación de documentos que acrediten su identidad, domicilio, estado de salud y situación académica, la Ley Federal del Trabajo establece un marco legal que busca garantizar la seguridad y el bienestar de los adolescentes en el ámbito laboral.