Estos son los colores de traje de baño más seguros para niños y niñas

La elección del color del traje de baño o bañador para niños puede parecer una decisión basada únicamente en preferencias estéticas o modas, pero su impacto va mucho más allá. Según especialistas en seguridad, este aspecto aparentemente trivial puede ser determinante para garantizar el bienestar de los menores en piscinas, ríos, lagos y el mar. La visibilidad que ofrece el color del traje de baño en diferentes cuerpos de agua puede marcar la diferencia en situaciones de emergencia.

De acuerdo con los especialistas, los colores del traje de baño juegan un papel esencial en la capacidad de los adultos para localizar a los niños en el agua. En entornos acuáticos, ciertos colores tienden a confundirse con el entorno, dificultando su detección, especialmente si el niño está bajo el agua o en movimiento. Esto puede retrasar una intervención en caso de que el menor necesite ayuda, lo que podría tener consecuencias graves.

En cuerpos de agua grandes como el mar o lagos, los colores más visibles y seguros son el amarillo, el fucsia y el naranja. En contraste, tonalidades como el rojo y el celeste son menos perceptibles, mientras que los tonos fríos como el azul, el verde y el morado, así como los colores base como el gris, el negro y el blanco, tienden a desaparecer por completo en el entorno acuático.

En piscinas, los colores más recomendados son el rojo, el naranja, el fucsia, el morado y el negro, ya que ofrecen un mayor contraste con el agua. Por otro lado, tonalidades como el verde y el gris son poco visibles, y las variaciones de azul resultan prácticamente imperceptibles.

Se han realizado pruebas en piscinas y lagos para evaluar la visibilidad de diferentes colores de trajes de baño. Los resultados mostraron que los trajes de baño en tonos azules o grises “desaparecen” visualmente a menos de 60 centímetros de profundidad. En cambio, los trajes de colores neón, como el fucsia o el naranja, permanecen visibles incluso a más de 1,5 metros bajo el agua. Estos datos subrayan la importancia de optar por colores brillantes y contrastantes al elegir la ropa de baño para los niños.

Además de seleccionar un traje de baño en colores visibles, existen otras medidas esenciales para proteger a los niños en entornos acuáticos. Entre estas recomendaciones se incluye la supervisión constante de los menores mientras están en el agua, ya que ningún color de traje de baño puede sustituir la atención de un adulto. También se sugiere enseñar a los niños a nadar desde una edad temprana, lo que les proporciona herramientas para desenvolverse mejor en el agua.

El uso de flotadores puede ser un complemento útil, pero nunca debe considerarse un sustituto de la supervisión directa. Asimismo, se aconseja evitar ropa holgada o accesorios que puedan enredarse y representar un riesgo adicional para los niños.