
El Festival Axe Ceremonia, celebrado el pasado sábado 5 de abril en el Parque Bicentenario de la Ciudad de México, se vio marcado por un desafortunado incidente cuando una estructura metálica colapsó, provocando la muerte de dos fotógrafos que cubrían el evento. Las víctimas fueron identificadas como Miguel Hernández y Berenice Giles, quienes trabajaban para el medio “Mr. Indie”.
Los jóvenes fueron retirados del lugar y trasladados a un hospital, donde el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó, mediante una tarjeta informativa, que se les atendió por traumatismo craneoencefálico y fracturas. Sin embargo, según el reporte médico, ambos llegaron sin signos vitales al nosocomio.
Ante el incidente, al menos cinco horas después, las autoridades de la Ciudad de México suspendieron el evento, que estaba programado para realizarse en dos días. Por otro lado, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México inició una investigación para determinar las responsabilidades en este lamentable suceso.
La alcaldía Miguel Hidalgo involucrada en la autorización del evento señaló a los organizadores por no informar sobre la instalación de las grúas, afirmando que esta fue “una decisión de última hora”. No obstante, videos promocionales del festival muestran dichas estructuras identificadas como puntos de encuentro seguros dentro del parque.

El segundo día del festival fue cancelado, y en su lugar, el 6 de abril decenas de fotógrafos, amigos y colegas de las víctimas se reunieron a las afueras del Parque Bicentenario para exigir justicia. En medio de flores, veladoras y consignas, los manifestantes exigieron esclarecer los hechos y garantizar condiciones seguras para los trabajadores de medios en futuros eventos.
Durante el lunes 7 de abril los restos de Miguel Hernández y Berenice Giles fueron velados por sus respectivas familias en puntos distintos de la Ciudad de México. El fotógrafo fue trasladado a su domicilio en la alcaldía Iztapalapa, mientras que el funeral de Berenice se llevó a cabo en la funeraria Gayosso; el martes será llevada a Aguascalientes estado donde creció.
En el velatorio la familia de la fotógrafa declaró a los medios de comunicación que la cámara con la que Berenice estaba trabajando en el evento masivo, está perdida, ya que ni las autoridades o los servicios médicos se las han entregado.
“La cámara sigue perdida. No se que había ahí, supongo que fotos de lo de siempre, sus artistas, eventos pero la cámara no la hemos encontrado”, señalaron.
Se trata de una cámara marca Canon modelo T3i, de acuerdo a sus padres solo se les entregó el lente. Por lo que falta el cuerpo de la cámara y la memoria. Primeros reportes señalan que la fotógrafa tenía consigo la cámara al momento del accidente que le quitó la vida.

De igual manera, en el homenaje póstumo que se les dedicó a las víctimas en la FES Aragón de la UNAM, una alumna presentó una cartulina con el siguiente mensaje: “Ayúdanos a encontrar la cámara de Bere. Modelo Canon T3i. ¡Justicia para su trabajo!”.
Por otro lado el periodista Carlos Jiménez compartió por medio de sus redes sociales una fotografía de la cámara el fatídico día, donde aparentemente Berenice tiene puesta la cámara y se encontraba completa.
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