Por esta razón Adolfo Ríos obligó a Memo Ochoa a dejarse el cabello largo

El distintivo característico que porta Guillermo Ochoa es su cabellera, el experimentado arquero siempre ha jugado con el cabello largo, se lo sujeta con una banda y sus chinos alborotados le han dado un estilo único. Sin embargo, cuando inició su carrera no fue así.

Cuando Memo Ochoa aún era joven y recién entrenaba con el club América en la Primera División, fue obligado por Adolfo Ríos a cambiar su apariencia, pues con Ríos García, Memo tuvo que dejarse el cabello largo. Fue en una entrevista que se viralizó en redes sociales donde el exarquero reveló cómo orilló al portero del Salernitana a tomar esa decisión.

Según compartió Adolfo Ríos en una charla para @americaxsiempre_, fue su idea de que los porteros americanistas volvieran a traer el cabello largo, así que Ríos obligó a todos los arqueros que tenía en aquel entonces el conjunto azulcrema, incluido Ochoa.

“Conocimos a Memo cuando él venía de fuerzas básicas a entrenar con nosotros y esto con la autorización de Néstor Rafael Verderi. En ese tiempo estaba Cristian Martínez, estaba Beto (Alberto) Becerra, Hugo Pineda y nosotros ya traíamos de varios torneos porque yo les dije ‘¿saben qué?, vamos a regresar a lo que era antes el portero de América’”, recordó.

El arquero de Cristo argumentó sus razones para tener cabellera larga y lo compartió con el resto del plantel.

“Me dicen ‘¿cómo a lo que era antes?’, ‘el cabello largo’, entonces me dicen ‘¡no ¿cómo crees?!’, ‘saben qué, nos vamos a dejar el cabello largo. Si queremos vernos como lo que era un Rafa Puente, vamos a dejarnos el cabello largo’ , ‘órale, nada más porque nos dices’”, sentenció.

Debido a que esta norma ya llevaba tiempo dentro del plantel de Coapa, cuando Memo Ochoa entró tuvo que enfrentarse a esta idea. Adolfo Ríos habló seriamente con Paco Memo para decirle cómo serían las cosas en América si quería llegar a ser el portero titular.

De inmediato, cuando Ochoa escuchó esa indicación se preocupó, según recordó El arquero de Cristo, pues él tenía el cabello corto y le preocupaba la reacción de su papá. Adolfo Ríos compartió incluso cómo bromeó con el joven Guillermo Ochoa sobre esa situación.

El portero retirado se animó a hablar con el papá de Ochoa para explicarle la razón de esa indicación.