Lin Wang, el paquidermo que luchó junto al Nuevo Primer Ejército de la República de China en la Segunda Guerra Mundial

El elefante asiático fue parte de operaciones militares aliadas antes de consolidar su legado en la memoria cultural de Taiwán, donde vivió hasta los 86 años

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El elefante asiático, que transportó
El elefante asiático, que transportó suministros en la guerra y superó múltiples adversidades, fue homenajeado durante décadas en el zoológico de Taipéi. (WikiCommons/Dominio público)

La historia de Lin Wang comenzó durante la Segunda Guerra Mundial, en el sudeste asiático. Capturado junto con otros paquidermos, el animal fue parte del esfuerzo militar aliado y más tarde se convirtió en una de las principales atracciones del zoológico de Taipéi, donde vivió hasta los 86 años, convirtiéndose en el elefante asiático más longevo en cautiverio.

De acuerdo con la información consultada en el diario Taipei Times, Lin Wang fue inicialmente conocido como A-Mei (阿美) y fue privado de su libertad en Myanmar junto con otros dos elefantes, A-Lan (阿蘭) y A-Pei (阿沛), para transportar suministros durante el conflicto bélico.

En enero de 1945, la 30.ª División del Nuevo Primer Ejército de la República de China confiscó a los paquidermos, quienes sirvieron durante tres meses antes de emprender un agotador viaje por tierra hacia Guangzhou, ciudad también conocida como Cantón.

Del grupo original de 13 ejemplares, seis murieron durante la travesía y cuatro fueron enviados a zoológicos de China. Tres de estos últimos acompañaron al general Sun Li-jen (孫立人), comandante del Nuevo Primer Ejército, en su traslado a Kaohsiung, donde asumió el liderazgo del Comando de Entrenamiento del Ejército.

El autor Yin Chun (尹駿), quien formó parte de la brigada que liberó a A-Mei, narró en su libro “La historia de Lin Wang” (Lin Wang’s Story), publicado en 1993, los pormenores de esta operación. Según el hombre, su unidad fue enviada para colaborar con los Aliados en la expulsión de las fuerzas japonesas de Myanmar. La 30.ª División tenía como objetivo capturar la ciudad de Namhkam en enero de 1945, pero su avance fue detenido por el río Ruili, cuyas fuertes corrientes impedían el cruce del ejército.

El plan de utilizar a los colosales mamíferos como un puente improvisado surgió tras obtener la información de un prisionero nipón sobre la existencia de los paquidermos de guerra. El jefe de división Tang Shou-chih (唐守治) pensó que podrían organizar una formación a lo largo del río, unidos por tablones para permitir el paso del ejército, así, Yin y otros cuatro hombres se disfrazaron de civiles birmanos y se adentraron en la base japonesa.

En el lugar encontraron trece ejemplares, cargados con municiones y provisiones, custodiados por cuidadores nativos. Según relata el autor, citado en Taipei Times, informaron a los hombres que los japoneses habían ordenado enviar los animales al frente, pero los cuidadores pronto percibieron que se trataba de un engaño y huyeron. De esa forma, los soldados lograron conducir a los elefantes al lado chino del río, asegurando su entrega al ejército.

Aunque el plan de construir un puente con los animales fracasó debido a la fuerza de la corriente, el ejército pudo cruzar y expulsar exitosamente a los japoneses de Namhkam. Los elefantes, incluyendo a A-Mei, se convirtieron en protagonistas de la conferencia de prensa tras la victoria, y sus fotografías dieron la vuelta al mundo, detalló el periódico taiwanés.

Durante el conflicto armado, los elefantes fueron utilizados para transportar suministros y remolcar piezas de artillería. Los registros citados en la fuente citada señalan que los soldados desarrollaron un gran afecto por ellos, especialmente por A-Mei, quien incluso fue condecorado con el título de “héroe”, según la organización Pacific Atrocities Education (PAE).

Tras tres meses de servicio directo, los paquidermos recibieron la orden de regresar a China, pero solo siete lograron sobrevivir al duro viaje por la Carretera de Birmania. En Guangdong, la guerra había terminado, pero los elefantes continuaron siendo parte de la vida militar, participando en la construcción de monumentos y en espectáculos para recaudar fondos destinados a paliar la hambruna en la provincia de Hunan.

De A-Mei a Lin Wang, una vida en el zoológico de Taipéi

Lin Wang y sus camaradas
Lin Wang y sus camaradas del ejército. (WikiCommons/Dominio público)

Posteriormente, A-Mei fue trasladado al zoológico de Taipéi en Yuanshan para “casarse” con Ma Lan (馬蘭), una cría joven que era la única elefanta del zoológico en ese momento. El personal rebautizó a A-Mei como Lin Wang (林王), que significa “rey de la selva”, sin embargo, los medios de comunicación publicaron erróneamente su nombre como 林旺, con pronunciación y caracteres distintos, un error que se perpetuó en la historia.

Según la información consultada en el medio asiático, Lin Wang pronto se convirtió en la principal atracción del zoológico, y al llegar a los 60 años, los niños lo llamaban cariñosamente “Abuelo Lin Wang”.

En un primer momento, el paquidermo podía moverse libremente por su recinto, pero cada año entraba en un período de celo durante el cual su agresividad aumentaba significativamente. Para controlarlo, el zoológico sujetaba una de sus patas, aunque él continuaba balanceándose y, en ocasiones, usaba su trompa para desengancharse. En 1977, se construyó un nuevo recinto para aislarlo temporalmente y finalmente se le retiraron las cadenas.

El zoológico buscó emparejar a Lin Wang con Ma Lan para asegurar la reproducción, pero cuando Ma Lan alcanzó la madurez sexual, Lin Wang ya era demasiado viejo, por lo que la pareja nunca tuvo descendencia. Aun así, convivieron durante décadas con una relación a veces conflictiva, pues Lin Wang llegó a perseguir y arrojar a la hembra a una zanja en varias ocasiones.

A pesar de estos episodios, los dos elefantes se llevaban generalmente bien, de hecho, cuando ella murió en 2002, Lin Wang manifestó su dolor golpeando la puerta de su recinto y emitiendo fuertes sonidos, como si llorara.

La popularidad del paquidermo siguió creciendo, y en 1983, el zoológico celebró su cumpleaños número 66, mostrando por primera vez al público su historia como elefante de guerra. Desde entonces, cada cumpleaños de Lin Wang se convirtió en un evento anual de gran relevancia para el zoológico, explicó Taipei Times.

La despedida del “Abuelo Lin Wang”

El elefante asiático, que transportó
El elefante asiático, que transportó suministros en la guerra y superó múltiples adversidades, fue homenajeado durante décadas en el zoológico de Taipéi. (WikiCommons/Dominio público)

Antes de ello, en 1986, el ejemplar fue trasladado al nuevo Zoológico de Taipéi en Muzha (木柵), a 20 kilómetros de distancia. El viaje fue particularmente complicado debido a la resistencia del elefante, pues aunque el zoológico colocó contenedores marítimos en su recinto con comida para que se acostumbrara, Lin Wang se negó a permanecer dentro.

Cuando finalmente intentaron cargarlo en un camión, los cuidadores tardaron más de dos horas y rompieron varias cuerdas en el proceso. Durante el traslado, Ma Lan también mostró resistencia, y en un momento el macho confundió una cabina telefónica con su compañera, cayendo en una zanja hasta que ambos fueron liberados y pudieron reunirse. Su nuevo recinto fue llamado la “Casa Blanca” por su color.

Lin Wang falleció en febrero de 2003, a los 86 años, un año después de la muerte de Ma Lan. Su longevidad y su historia heroica lo convirtieron en un testimonio viviente de la Segunda Guerra Mundial y de la historia de Taiwán. Durante décadas, los ciudadanos y visitantes del zoológico pudieron conocer a un elefante que no solo sobrevivió a los horrores de la guerra, sino que también dejó una huella imborrable en la memoria cultural del país.