Cuando la frase “cuidado con el perro” tiene un significado que pocos imaginamos

Durante una reunión familiar, los dueños de un Yorkipoo de 16 años optaron por atar un globo a su collar con la leyenda “cuidado con el perro” para evitar que los invitados tropezaran con él.

La idea permitió que el can pudiera participar en la fiesta sin quedar apartado ni encerrado, facilitando que pudiera moverse libremente entre los asistentes sin riesgos.

Esta celebración se realizó por el compromiso de Erica, hermana de Alexa Stockhausen, quien fue la mente creativa detrás de esta ingeniosa solución.

La dueña del canino contó en entrevista para The Dodo, que la iniciativa fue todo un éxito: “Les encantó, todos ya lo adoran y saben que es un perro mayor”. La simple idea no solo protegió al perro, sino que también provocó ternura y simpatía entre quienes compartieron el festejo.

El globo no solo provocó sonrisas, sino que también fue una solución práctica y efectiva para proteger a Marley. “Nadie tropezó, así que fue un 10 sobre 10”, aseguró su dueña, quien destacó que el perro llevó el globo puesto durante toda la celebración sin ningún problema.

El perro llegó a la familia cuando la chica estaba en octavo grado y no dejaba de pedir un cachorro. Desde ese momento, el canino se convirtió en un miembro esencial de la familia, siempre buscando estar cerca de sus dueños. La dueña declaró: “Siempre ha sido un perro muy sociable” y recordó cómo el Yorkipoo insistía en acompañarlos en todo momento: “Si nosotros estamos en el sofá, él tiene que estar en el sofá también”.

Durante la pandemia de COVID-19, Alexa regresó a su hogar de la infancia en Long Island después de varios años viviendo en Nueva York. Su perro, cariñosamente apodado “Muppet”, mostró una inmensa alegría al reencontrarse con ella, ya que mientras su dueña atendía llamadas de trabajo, el cachorro permanecía siempre sentado en su regazo o justo a su lado, siguiéndola por toda la casa.

A pesar del paso del tiempo y de que el can se ha vuelto un poco más lento, su esencia permanece intacta. La cuidadora del animal subrayó que, aunque ahora se desplaza con mayor tranquilidad, continúa siendo un perro feliz, conservando su carácter alegre y sociable a lo largo de los años.

Los usuarios respondieron con entusiasmo y buen humor a las imágenes de Marley con pañal y globos. Muchos expresaron mensajes cargados de ternura, como “Sigue siendo un bebé para mí” y “Aww... este viejito”, mostrando un profundo cariño y sensibilidad hacia los perros en la etapa adulta.

Por otra parte, hubo quienes se sintieron identificados con la situación y compartieron experiencias similares: “Adoro a los viejitos, tienen un lugar especial en mi corazón, hicimos lo mismo con mi perrita de 15 años”, reflejando empatía y un vínculo emotivo con sus propias mascotas mayores.

Algunos internautas destacaron la utilidad del pañal y el toque festivo que aportan los globos, con comentarios como “¡Qué gran idea!” y “¡El pañal es ideal para evitar accidentes!”. Además, varias personas compartieron consejos prácticos y experiencias personales, por ejemplo: “Después de tropezarme con mi perro y fracturarme el tobillo, ¡me parece una excelente idea!” o “Esto funciona bien, hasta que intentan pasar por la puerta para canes”.