Cinco señales que podrían advertir un problema de salud en tu mascota, según un experto

Cambios sutiles en el comportamiento de tu mascota podrían ser los primeros indicios de un problema médico, advierte un veterinario especializado

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Prestar atención al comportamiento cotidiano
Prestar atención al comportamiento cotidiano de tus mascotas es clave para prevenir complicaciones mayores. (Freepik)

No todos los problemas de salud en perros y gatos comienzan con síntomas evidentes. Algunas enfermedades se manifiestan primero a través de cambios mínimos en la conducta diaria del animal. Detectar estos indicios puede marcar una gran diferencia en el diagnóstico y tratamiento oportuno.

El veterinario Pancho Cavero, especialista en comportamiento animal y con más de 530 mil seguidores en Instagram (@panchocavero), advierte que muchas veces estos síntomas pasan desapercibidos por considerarse parte del envejecimiento o del estado de ánimo del animal.

“Como tutores, tenemos la responsabilidad de mirar más allá de lo evidente (...) y no es exageración: detectar estas señales a tiempo puede hacer la diferencia entre un tratamiento temprano o una urgencia”, afirma el médico.

Esto es lo que dice el veterinario

Un gato enfermo necesita atención
Un gato enfermo necesita atención veterinaria inmediata para diagnosticar sus síntomas y garantizar su bienestar. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

De acuerdo con Cavero, prestar atención al comportamiento cotidiano es clave para prevenir complicaciones mayores. Por eso, recomienda observar con cuidado algunas modificaciones en los hábitos que podrían indicar que algo no está bien, incluso antes de que aparezcan síntomas físicos más notorios.

1. Menos ganas de jugar o salir

Una caída en el interés por actividades que antes motivaban al animal puede ser signo de dolor físico, fatiga crónica o estados anímicos alterados. Si el perro ya no se entusiasma con la correa o el gato ignora sus juguetes, conviene consultar al veterinario. No siempre se trata de “madurez”.

2. Bebe más agua de lo habitual

Un aumento en la ingesta de agua puede ser una señal temprana de enfermedades renales, diabetes u otros desequilibrios hormonales. También puede venir acompañado de una mayor frecuencia o urgencia al orinar.

3. Cambio en el olor corporal

Un aliento más fuerte, un olor inusual en las orejas o una fragancia corporal distinta pueden indicar infecciones, trastornos digestivos o problemas internos. “Los olores también son una forma de comunicación biológica que no debe ignorarse”, recuerda Cavero.

4. Duerme más o de forma distinta

Alteraciones en el sueño, como mayor somnolencia, interrupciones frecuentes o descanso inquieto, pueden ser síntomas de malestar general o afecciones que aún no se manifiestan de forma visible.

5. Cambios en la postura o forma de caminar

Caminar más lento, evitar escaleras, mantener la cola baja o las patas rígidas son comportamientos que pueden revelar molestias musculares, articulares o incluso neurológicas. Observar su movilidad cotidiana es clave para detectar estas señales.

¿Cuándo debo llevar a mi mascota al veterinario?

Las mascotas mayores necesitan controles
Las mascotas mayores necesitan controles más constantes debido al desgaste natural asociado a la edad. (Andina)

Llevar a tu mascota al veterinario de forma regular no solo es una medida preventiva, sino también una parte fundamental del cuidado responsable. Según el sitio oficial del Grupo Lovet, farmacéutica especializada en salud animal, el chequeo anual es indispensable, incluso si el animal parece estar sano. Estas revisiones permiten mantener al día las vacunas, prevenir parásitos y detectar enfermedades en etapas tempranas.

Durante los primeros meses de vida, los cachorros y gatitos requieren visitas más frecuentes, generalmente cada 3 a 4 semanas, hasta alcanzar entre 4 y 6 meses de edad. En ese periodo, el veterinario aplica vacunas de refuerzo y da seguimiento al desarrollo general del animal. El control riguroso en esta etapa puede prevenir complicaciones más adelante.

En contraste, las mascotas mayores necesitan controles más constantes debido al desgaste natural asociado a la edad. Se recomienda al menos dos consultas al año para detectar enfermedades como artritis, problemas dentales u otros trastornos crónicos. Las visitas regulares permiten ajustar tratamientos o dietas especiales según el caso.

Así mismo, si tu mascota presenta síntomas, sufre una lesión o vive con alguna enfermedad crónica como diabetes o insuficiencia renal, no se debe esperar. En estos casos, el seguimiento debe ser personalizado y más frecuente. “El veterinario desempeña un papel fundamental en el cuidado de su salud por su experiencia y conocimientos técnicos”, destaca la información oficial de Grupo Lovet.