Terapia de libertad: el paseo que le devolvió la alegría a una perra tras casi 800 días en un refugio

Mezcla de Pitbull y de carácter cariñoso, disfrutó de una jornada especial en la playa gracias a una producción que busca sensibilizar sobre la adopción

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Moxie, una perrita mezcla de
Moxie, una perrita mezcla de Pitbull, disfruta un día de playa y helado tras 799 días en un refugio. (Wags and Walks)

Adoptar un perro es un acto de amor que cambia vidas, tanto para el animal como para el ser humano, sin embargo, a menudo los lomitos mayores o aquellos que llevan mucho tiempo en refugios, son pasados por alto en favor de los cachorros, una elección que, aunque comprensible, deja a miles esperando durante años una segunda oportunidad.

Afortunadamente, iniciativas como “Terapia de libertad” (Freedom Therapy) no solo les regalan momentos de felicidad a estos animales, también sensibilizan a la sociedad sobre la importancia de darles una nueva oportunidad. Este es el caso de Moxie, una cánida que, tras 799 días en un refugio, vivió un día de libertad inolvidable gracias a esta emotiva serie.

Moxie, una perrita de tres años y medio, mezcla de Pitbull y de carácter tímido pero cariñoso, es la protagonista de uno de los episodios de “Terapia de libertad”, una producción que busca mostrar el lado más humano del rescate y la adopción. Esta dulce perrita pasó más de dos años bajo el cuidado del refugio Wags and Walks, esperando a alguien que viera en ella no solo una mascota, sino un alma digna de amor y compañía.

Freedom Therapy es una producción de The Dodo For Animal People, una plataforma con enfoque emocional hacia el cuidado y la defensa de los animales. Bajo la dirección de Mónica Matute, cineasta y defensora de los derechos animales, esta serie propone una nueva manera de mirar a los lomitos que buscan una familia para empezar una nueva vida.

“Todos los perros de refugio merecen un día de paseo lleno de alegría, aventura y conexión”, enuncia la descripción de la serie también disponible en YouTube, en la que cada episodio sigue a un perro rescatado que disfruta de un día fuera del refugio, lleno de actividades que le permiten experimentar libertad, amor y felicidad genuina. Pero no es solo un paseo: “Es terapia para todos los involucrados”, añade la productora.

En el episodio dedicado a Moxie, Matute la recoge del refugio y la sube a su auto rumbo a los Canales de Venecia, en la ciudad de Los Ángeles. “Una de las cosas divertidas de sacar a un perro a una aventura es que también puedes explorar nuevos lugares juntos”, comenta.

Después de jugar en la playa de Venecia, el día termina con una dulce sorpresa, un helado para la canina. Un gesto simple, pero que cierra con ternura una jornada que, más allá de la diversión, representó una pausa en su larga espera. “Pudimos aprender más sobre Moxie, pudo relajarse, pudo olfatear; se lo pasó genial. Y al final del día, eso es lo que importa”, reflexiona Matute.

¿Quién es Moxie?

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Moxie, una perrita mezcla de Pitbull, disfruta un día de playa y helado tras 799 días en un refugio. (Wags and Walks)

El portal oficial del refugio Wags and Walks describe a Moxie como una perrita de aproximadamente 20 kilogramos muy inteligente y con ganas de complacer a su futura familia, pues aunque puede mostrarse tímida en ambientes nuevos, una vez que gana confianza, es extremadamente cariñosa.

Como “Terapia de Libertad” permitió observar, le encantan los paseos, los juegos de buscar y, por supuesto, los momentos tranquilos de cariño con las personas, dado que disfruta “acurrucándose para que le rasquen la cabeza y le acaricien la pancita”.

Gracias al entrenamiento recibido con @rosewoodk9, Moxie domina órdenes básicas y muestra una gran disposición para aprender. Aunque se lleva bien con otros perros, los especialistas del refugio creen que sería más feliz siendo la única mascota del hogar, para así recibir toda la atención y el amor que merece.

Después de tantos días esperando, Moxie aún espera su oportunidad, lo cual “Terapia de Libertad” busca fomentar, mirar más allá de la edad, del tiempo que llevan en refugios o de sus primeras reacciones de timidez. Porque, como dice Matute en otro capítulo: “Creo que cuando la gente va al refugio y ve a un perro mayor (senior), se desanima al instante porque creen que los perros mayores no tienen energía”.

¿Cuáles son los beneficios de adoptar un perro ‘senior’?

Convivir con animales cambia la
Convivir con animales cambia la dinámica diaria, promoviendo la actividad física, el bienestar y la interacción social. (Cuartoscuro)

Una de las barreras más grandes para la adopción de perros como Moxie es el prejuicio hacia los perros mayores. Según la Sociedad Estadounidense para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA), los perros mayores tienen una tasa de adopción del 25%, muy por debajo del 60% que alcanzan los cachorros y perros jóvenes.

Sin embargo, adoptar un perro senior tiene numerosos beneficios. De acuerdo con el portal Patas en Casa, estos animales tienen personalidades ya definidas, niveles de energía moderados y una mayor facilidad para adaptarse a los entornos hogareños. Suelen estar entrenados en lo básico, necesitan menos ejercicio y son ideales para hogares tranquilos o con personas mayores. “Son excelentes compañeros”, afirman.

Como cualquier ser vivo, requieren cuidados específicos, chequeos veterinarios regulares, dietas adaptadas, y a veces tratamientos especiales, pero a cambio, brindan un amor incondicional y una lealtad conmovedora. La veterinaria Elizabeth Brown, citada en la plataforma, lo resume de la siguiente manera: “Adoptar un perro mayor es una experiencia gratificante que salva vidas. Estos animales tienen mucho amor para dar y suelen ser ideales para personas que buscan compañía sin las exigencias de un cachorro”.