Springer Spaniel galés, un perro cazador y familiar con siglos de historia y lealtad inquebrantable

Sumar a un canen la familia es una decisión importante que no puede tomarse a la ligera, cada raza tiene comportamientos, hábitos y necesidades particulares de su especie. Elegir una mascota cuya personalidad no se adapte a tu estilo de vida podría traer algunos problemas en la convivencia diaria.

Para esta importante elección debes de tomar en cuenta el tamaño de la vivienda, si la mascota va a convivir con niños, el tiempo disponible para sus paseos y si es compatible con el estilo que llevas.

Bajo estos motivos te compartimos las características del Springer Spaniel galés, su historia, cuidados básicos y los tamaños promedio cuando alcanzan su edad adulta. Así como algunos consejos que te ayudarán a formarlo de la mejor manera, según la página web de Purina.

Compacto y simétrico, el Springer Spaniel galés es de tamaño mediano y tiene una constitución perfecta para la resistencia y el trabajo duro. Tiene un pelaje sedoso, brillante y ceñido al cuerpo, con flecos en las extremidades. Es de un precioso color rojo y blanco. Los machos adultos miden 48 cm y las hembras adultas, 46 cm. Pesan entre 16 y 20 kg.

El springer spaniel galés tiene la misma mirada bondadosa y leal que el resto de los spaniels y está completamente entregados a su familia. Es un compañero alegre y de buen carácter. Este perro se lleva bien con la gente en general, aunque puede mostrarse un poco reservado con los desconocidos. Es un perro familiar y necesita compañía. Fácil de adiestrar, el springer spaniel galés suele ser un perro magnífico para las pruebas de obediencia y como perro perdiguero.

La presencia de spaniels de color rojo y blanco se remonta al siglo XVIII en Gales. Solían encontrarse principalmente en Gales y al oeste de Inglaterra antes de popularizarse en el este de Inglaterra y Escocia y se empleaban como perros perdigueros y para la cría. Su versatilidad y su instinto cazador convirtieron a este springer spaniel en un candidato ideal para los amantes de los perros de todo el mundo y entre los siglos XIX y XX se exportaron al extranjero. Antes de su aceptación por parte del British Kennel Club en 1902, esta raza era conocida como cocker galés.

Una mascota de compañía trae muchos beneficios a la vida de las personas, pues la constante interacción con ellos genera resultados positivos en la salud física, familiar y de la comunidad en la que se desarrolla, de acuerdo con una investigación realizada por Human Animal Bond Research Institute (HABRI), organización a favor de los animales de compañía.

Steven Feldman, director de dicha asociación, explicó en su investigación que los perros o gatos son capaces de “amortiguar el estrés y ayudar a abordar el aislamiento social”. Convivir con un compañero peludo influye en gran medida a cuidar los niveles de presión arterial, frecuencia cardíaca y ayuda a la producción de hormonas relacionadas con el bienestar.

La misma organización realizó una encuesta en 2021 para evaluar qué tanto cambió la vida de las personas antes y después de integrar a un perro a su círculo familiar y los resultado impresionaron a los investigadores, pues el 61 por ciento de los propietarios aseguró que consideraría cambiar de casa con tal de que su mascota estuviera cómoda y el 45 por ciento buscaría cambiar de trabajo para compartir más tiempo con el animal.