Retrocultura Activa | Isekai: del tropo curioso al género más sobreexplotado del anime moderno

El isekai pasó de recurso narrativo a fenómeno saturado. Exploramos sus raíces, rarezas retro y cómo renovar un género que aún busca sorprender con mundos nuevos

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The Rising of the Shield
The Rising of the Shield Hero - Captura del trailer oficial

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Isekai: del tropo curioso al género más sobreexplotado del anime moderno

Bienvenidos una vez más a Retrocultura Activa, el lugar donde destripar etiquetas no es un hobby, sino una necesidad de orden mental. Porque todos sabemos, más o menos, qué es un shonen. Peleas, gritos, amistad y superación con puños brillantes. Todos ubicamos el shojo, con romance, miradas larguísimas, flores de cerezo y personajes que se enamoran cada cinco minutos. Hasta ahí, fácil.

Pero las cosas se complican cuando empezamos a hilar más fino. ¿Qué pasa cuando surgen palabritas raras como mecha (robots pilotados y ciudades en ruinas), moe (ternura, fanservice y chicas con ojos inmensos), yuri (romance entre chicas), yaoi (romance entre chicos), slice of life (la vida misma convertida en trama) o esa estrella que hoy nos convoca, el isekai?

De pronto, no basta con decir “anime de acción” o “historia de amor”. Aparecen etiquetas que se superponen, mutan y se escapan como jabón mojado. Es como la literatura, donde nada está encajonado del todo. Siempre hay obras que juegan a estar en varias estanterías a la vez, que rozan fronteras, que se ríen de las propias categorías. Y ahí está la gracia, ya que sin esas zonas grises, la cultura pop sería un catálogo rígido y aburrido.

Hoy abrimos esa puerta con llave retro, y vamos a rastrear de dónde salió el isekai, cómo pasó de ser un simple recurso narrativo a fábrica de clones con nombres kilométricos y qué joyitas viejas vale la pena rescatar antes de que la avalancha de títulos idénticos nos tape para siempre.

Ajusten la mochila de aventurero, revisen que no falte el grimorio, la espada +10 de daño y el manual para reencarnar en forma de slime.

Magic Knight Rayearth - Captura
Magic Knight Rayearth - Captura del trailer oficial

Orígenes: el viaje a otro mundo antes de que fuera moda

Aunque hoy el isekai se asocia principalmente con anime y manga, sus raíces son mucho más antiguas y universales. La idea del viaje a otro mundo, una realidad paralela o un universo mágico ha sido un recurso literario desde tiempos remotos. Pensemos, por ejemplo, en Alicia en el País de las Maravillas, donde una niña atraviesa un extraño hoyo para encontrarse en un mundo lleno de lógica absurda y personajes surrealistas. Otro clásico es El Mago de Oz, en el que Dorothy es transportada por un tornado a una tierra mágica, donde debe adaptarse y superar desafíos para regresar a casa.

Estas historias comparten la esencia fundamental del isekai: personajes que deben navegar en un entorno desconocido, con reglas propias y que se ven obligados a crecer y transformarse a través de la experiencia.

En Japón, esta idea se empezó a explotar con fuerza en la literatura ligera y el manga durante los años ochenta y noventa, cuando series como Fushigi Yûgi (1992) o Magic Knight Rayearth (1993) llevaron a personajes adolescentes a universos mágicos, donde debían cumplir misiones y enfrentar desafíos que los transformaban. En el anime, estas tramas se combinaban con elementos de fantasía, romance y aventura, apelando tanto a la nostalgia como a la escapatoria.

Sin embargo, no fue hasta la explosión del manga y anime de los años 2000 que el isekai empezó a consolidarse como un género independiente, separándose de la fantasía tradicional. La diferencia principal fue la inclusión recurrente de la idea del “protagonista moderno” que, ya sea por accidente, hechizo o reencarnación, termina en un mundo extraño, muchas veces medieval, con tecnología, magia y reglas propias.

Konosuba - Captura del trailer
Konosuba - Captura del trailer oficial

Los pilares del isekai: ¿Qué lo define realmente?

A pesar de la gran variedad de títulos y estilos dentro del isekai, existen ciertos elementos que casi siempre aparecen y funcionan como pilares del género. En primer lugar, está el traslado del protagonista desde su mundo cotidiano a uno completamente distinto. Este viaje puede ser a través de un portal mágico, una muerte seguida de reencarnación, o incluso mediante tecnología avanzada. No importa el método, el cambio de escenario es fundamental. Ahí es donde el personaje abandona su realidad conocida para enfrentar un universo con reglas y peligros nuevos.

Una vez en ese mundo extraño, el protagonista se embarca en un proceso de descubrimiento y aprendizaje. Debe entender las nuevas normas, que suelen incluir magia, sistemas de niveles o tecnologías desconocidas, para poder sobrevivir y, eventualmente, dominar su entorno. Este recorrido de adaptación es uno de los grandes atractivos del género, ya que refleja el deseo universal de superación y crecimiento ante lo desconocido.

Por lo general, el héroe no llega al nuevo mundo sin recursos. Suele poseer alguna ventaja especial, ya sea un poder único, un conocimiento moderno o una misión específica que lo distingue del resto. Esta característica permite justificar sus éxitos y alimenta el impulso de avanzar y mejorar, algo que resuena profundamente con la audiencia.

Además, el protagonista no suele estar solo. En la mayoría de las historias, forma alianzas o relaciones con habitantes locales u otros viajeros, creando así una comunidad que aporta soporte emocional y ayuda a enriquecer la trama. Estas relaciones suelen ser claves para el desarrollo de la narrativa y para mostrar diferentes perspectivas del nuevo mundo.

Finalmente, los objetivos del protagonista suelen ser claros y motivadores: regresar a casa, salvar el mundo al que llegó o, en algunos casos, dominarlo. Sin embargo, hay obras que juegan con estas metas y las vuelven ambiguas, introduciendo búsquedas más introspectivas o planteamientos más complejos que invitan a reflexionar sobre la identidad y el sentido del viaje.

Sword Art Online - Captura
Sword Art Online - Captura del trailer oficial

La popularización y explosión: De Sword Art Online a la saturación

La llegada del nuevo milenio trajo consigo el auge del Internet, la cultura gamer y la explosión global del anime. En ese contexto, el isekai se volvió la vía perfecta para atraer tanto a fans del gaming como del anime. Fue entonces cuando llegaron obras clave como Sword Art Online (2012), que combinó el isekai con la realidad virtual y los videojuegos, conectando con una audiencia masiva.

Después vinieron otros éxitos, como Re:Zero (2016), que añadió un tono más oscuro y psicológico al género o Konosuba (2016), que le dio una vuelta de tuerca satírica, burlándose de los clichés del isekai y la fantasía medieval.

Pero la fama también trajo problemas: la fórmula se empezó a repetir hasta el cansancio. El protagonista siempre masculino, con habilidades desproporcionadas, rodeado de un harén de personajes, enfrentando desafíos similares y con tramas que a menudo poco innovaban. Los nombres de los animes se volvieron cada vez más largos y rebuscados, generando una broma recurrente en la comunidad sobre títulos kilométricos y argumentales que se autodescriben.

Escaflowne - Captura del trailer
Escaflowne - Captura del trailer oficial

Joyas retro y rarezas que valen la pena rescatar

Para quienes se sienten abrumados por la saturación actual del género isekai, mirar hacia atrás en el tiempo puede ser una refrescante bocanada de aire. Explorar obras más antiguas permite descubrir títulos que, aunque menos conocidos o difundidos, se destacan por su originalidad, su capacidad para jugar con las reglas del género o simplemente por aportar matices y enfoques que muchas producciones modernas han dejado de lado.

Un buen ejemplo de esto es Those Who Hunt Elves (1996-1997), una comedia absurda que rompe con cualquier intento de solemnidad. En esta serie, un trío de protagonistas queda atrapado en un mundo de fantasía y debe buscar tatuajes mágicos invisibles que fueron arrancados de las pieles de las elfas que habitan ese reino. Lo que podría sonar como una premisa bizarra se convierte en un festín de humor negro, situaciones ridículas, fanservice descarado y parodia de clichés del género fantástico. Su irreverencia y descaro la transforman en una bocanada de aire fresco dentro del panorama isekai, recordándonos que no todo tiene que tomarse tan en serio.

Por otro lado, El Hazard (1995) es una obra que se inscribe más cerca de la tradición clásica del género. Mezcla aventura, fantasía y comedia, con un grupo de personajes transportados a un mundo alternativo lleno de misterios y conflictos. Su estética y narrativa están muy marcadas por la época de los noventa, lo que le confiere un sabor nostálgico, pero también un ritmo y desarrollo que hoy pueden sentirse refrescantes para quien está acostumbrado a fórmulas más aceleradas y predecibles.

The Vision of Escaflowne (1996) no es un isekai puro, pero su influencia y acercamiento al género son innegables. La historia sigue a una chica común y corriente que es transportada a un mundo fantástico donde confluyen mechas, magia y una trama cargada de drama y romance. Esta mezcla de géneros abre una puerta para exploraciones narrativas más complejas y ricas, demostrando que el isekai puede fusionarse con otros estilos sin perder su esencia, sino ganando en profundidad y diversidad.

Inuyasha - Captura del trailer
Inuyasha - Captura del trailer oficial

Finalmente, Inuyasha (2000) es un híbrido entre fantasía, aventura y romance que ha logrado un lugar especial en la memoria colectiva. Su premisa de una chica moderna que viaja al Japón feudal para enfrentarse a demonios y conflictos de poder trae a la mesa una combinación de elementos históricos con toques sobrenaturales y emotivos. Inuyasha amplió el espectro del isekai al integrar viajes en el tiempo y conexiones emocionales profundas, convirtiéndose en un puente entre la tradición y la innovación dentro del género.

Estas series enriquecen la historia del isekai y aportan variedad, originalidad y matices que muchas de las obras modernas parecen haber olvidado en su afán por repetir fórmulas exitosas. Revisitar estos títulos es un ejercicio necesario para entender cómo evolucionó el género y para redescubrir que la creatividad puede encontrarse en lugares inesperados.

Mushoku Tensei - Captura del
Mushoku Tensei - Captura del trailer oficial

La evolución y futuro del género

Hoy, con el isekai firmemente establecido como uno de los géneros predominantes en el anime moderno, los creadores se enfrentan al desafío de renovar una fórmula que, para muchos, comienza a sentirse repetitiva. Ante la saturación de títulos que reciclan tramas, personajes y mecánicas similares, surge una necesidad imperiosa de subvertir las reglas, jugar con las expectativas del público y explorar nuevas perspectivas dentro del mismo marco.

Uno de los ejemplos más destacados de esta renovación es Mushoku Tensei: Jobless Reincarnation (2019). Esta serie lleva el viaje del protagonista a otro mundo a un nivel de madurez y detalle poco común para el género. A través de una narrativa rica y bien construida, Mushoku Tensei profundiza en temas complejos como el arrepentimiento, la búsqueda de redención personal y el crecimiento emocional. Su protagonista, un hombre que reencarna en un mundo de fantasía después de una vida llena de frustraciones, se ve obligado a confrontar sus errores pasados mientras aprende a vivir de nuevo, lo que ofrece un enfoque más introspectivo y psicológico que muchos isekai convencionales.

Por otro lado, KonoSuba: God’s Blessing on This Wonderful World! (2016) se ha ganado un lugar especial entre los fans por su brillante sátira del género. Lejos del tono heroico o dramático que caracteriza a tantos isekai, KonoSuba se burla con descaro de todos los clichés y fórmulas gastadas. La serie sigue a un grupo de personajes poco convencionales y completamente ineptos en su aventura en un mundo de fantasía, donde las situaciones ridículas y los personajes con defectos exagerados se convierten en el motor de la comedia. Es un recordatorio de que el género puede ser divertido y autocrítico, sin perder su esencia de aventura.

En un terreno más serio y oscuro, The Rising of the Shield Hero (2019) introduce un tono más grave dentro del isekai. La historia sigue a Naofumi, un joven convocado a un mundo paralelo para convertirse en uno de los cuatro héroes legendarios. Sin embargo, es rápidamente traicionado y despreciado, lo que lo obliga a enfrentarse no solo a amenazas externas, sino también a injusticias y prejuicios dentro de ese nuevo mundo. La serie explora temas como la desconfianza, la superación personal y la lucha contra la corrupción, aportando una notoria profundidad emocional y moral que desafía las convenciones más ligeras del género.

Re:Zero − Starting Life in
Re:Zero − Starting Life in Another World - Captura del trailer oficial

Además de estos ejemplos, otras obras han intentado diversificar el panorama del isekai. Re:Zero − Starting Life in Another World (2016), por ejemplo, juega con la idea del viaje a otro mundo combinando elementos de suspenso, tragedia y thriller psicológico, donde el protagonista revive una y otra vez los eventos tras su muerte, enfrentando un tormento emocional constante. Por su parte, That Time I Got Reincarnated as a Slime (2018) ofrece una visión optimista y expansiva, donde el protagonista reencarna como un ser mágico con la capacidad de absorber habilidades, construyendo una comunidad y cambiando el mundo a su alrededor.

Estas series demuestran que, a pesar de la saturación y el riesgo de caer en la repetición, el género isekai sigue teniendo espacio para innovar y cautivar a nuevas audiencias. Ya sea a través de la madurez narrativa, la parodia inteligente o la exploración de temas más profundos, el isekai continúa reinventándose y manteniendo su lugar como uno de los géneros más populares y versátiles del anime contemporáneo.

El isekai empezó como un sencillo recurso narrativo para contar aventuras en mundos distintos, pero se convirtió en un fenómeno global con miles de historias que repiten, reinventan y a veces saturan el género.

Y como en todo género popular, la clave está en buscar la originalidad, la mirada fresca y la capacidad de sorprender. Mientras tanto, vale la pena rescatar las joyas clásicas y recordar que más allá del exceso, el deseo de explorar mundos nuevos y vivir aventuras sigue intacto. Así que, mientras otros se pierden en portales repetidos, aquí seguimos explorando lo inesperado. Nos vemos en la próxima aventura de Retrocultura Activa, donde cada mundo nuevo es solo el comienzo.