Estados Unidos y Trinidad y Tobago reforzaron su cooperación para combatir las redes delictivas vinculadas al régimen de Maduro

El jefe del Estado Mayor estadounidense, Dan Caine, y la primera ministra Kamla Persad-Bissessar analizaron el impacto del narcotráfico, el tráfico de armas y la influencia de grupos criminales relacionados con la dictadura de Caracas durante una reunión en Puerto España

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El jefe del Estado Mayor
El jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Dan Caine, durante un discurso en una base militar de Virginia (Andrew Harnik/REUTERS

El gobierno de Estados Unidos reafirmó su compromiso de estrechar la colaboración con Trinidad y Tobago en temas de seguridad y defensa regional, en medio de las tensiones con la dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela tras el despliegue de fuerzas estadounidenses en el Caribe para contener el narcotráfico.

El jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Dan Caine, sostuvo una reunión con la primera ministra trinitense, Kamla Persad-Bissessar, para coordinar estrategias conjuntas frente al tráfico ilícito y la actividad de organizaciones criminales en el área, según informó Joseph Holstead, portavoz militar del organismo.

El encuentro se desarrolló bajo estrictas medidas de confidencialidad, sin acceso a la prensa ni declaraciones posteriores. Durante las conversaciones celebradas en Puerto España, ambas partes analizaron los desafíos regionales asociados al tráfico de drogas, armas y personas, además del impacto de grupos delictivos que operan a lo largo de la cuenca caribeña.

Caine “expresó su admiración a Trinidad y Tobago por su continuo liderazgo y colaboración en avanzar con objetivos en común”, a la vez que subrayó que Washington seguirá “comprometido en trabajar cercano a Trinidad y Tobago para enfrentar amenazas en conjunto”.

El jefe del Estado Mayor
El jefe del Estado Mayor de Estados Unidos, Dan Caine, sostuvo una reunión con la primera ministra trinitense, Kamla Persad-Bissessar, para coordinar estrategias conjuntas frente al tráfico ilícito y la actividad de organizaciones criminales en el área (Crédito: Embajada de Estados Unidos en Trinidad y Tobago)

La primera ministra Persad-Bissessar, por su parte, calificó la reunión como “excelente” y remarcó la solidez de la alianza con Estados Unidos en su cuenta oficial de X.

Indicó que ambos gobiernos comparten la prioridad de “garantizar la seguridad y la estabilidad regional”, con énfasis en enfrentar redes criminales de tráfico y reforzar los mecanismos de cooperación antinarcóticos. Fuentes del gabinete trinitense precisaron que Caine y su equipo discutieron tanto la estrategia operativa para los próximos meses como la situación generada por la actividad militar en aguas cercanas a Venezuela.

La visita de Caine forma parte de las medidas impulsadas por la administración de Donald Trump para reforzar la presencia de Estados Unidos en el Caribe ante la amenaza que representa Nicolás Maduro, a quien Washington acusa de liderar la organización terrorista Cartel de los Soles y por cuya captura ofrece una recompensa de cincuenta millones de dólares.

El despliegue naval estadounidense, incluyendo el portaaviones USS Gerald R. Ford y la operación “Lanza del Sur”, ha elevado la tensión con el régimen de Caracas, que acusa a Washington y a Trinidad y Tobago de crear un escenario hostil en el Caribe.

El gobierno trinitense, aunque respalda las maniobras estadounidenses, intentó matizar su posición frente a Caracas.

La recompensa millonaria de Estados
La recompensa millonaria de Estados Unidos por la captura del dictador Nicolás Maduro

Persad-Bissessar declaró que “el territorio de Trinidad y Tobago no va a ser usado para lanzar ningún ataque contra el pueblo de Venezuela”, en respuesta a las críticas del dictador venezolano, quien denunció que su país vecino estaría “hipotecando” sus intereses nacionales para alinearse con las estrategias de Washington.

Expertos en seguridad consultados por medios internacionales han advertido que la visita de Caine y el incremento de cooperación militar entre Estados Unidos y Trinidad y Tobago podrían tener repercusiones en la política regional.

El exteniente de la Guardia Costera trinitense, Norman Dindial, explicó que “el rol del oficial militar de mayor rango en Estados Unidos es proveer ayuda en los comandos combativos y enfatizar en la estrategia militar para objetivos de seguridad nacional estadounidense”.

Esto no tiene que ver con combatir la criminalidad, sino sobre la guerra y sus estrategias”, añadió.

El despliegue militar estadounidense en el Caribe ha involucrado ejercicios con soldados norteamericanos en Puerto Rico y maniobras navales coordinadas con países aliados de la zona.

El jefe del Estado Mayor
El jefe del Estado Mayor estadounidense, Dan Caine, y la primera ministra Kamla Persad-Bissessar analizaron el impacto del narcotráfico, el tráfico de armas y la influencia de grupos criminales relacionados con la dictadura de Caracas durante una reunión en Puerto España (Crédito: Embajada de Estados Unidos en Trinidad y Tobago)

La agenda de la visita de Caine incluyó discusiones sobre desarrollo de capacidades institucionales, intercambio de información de inteligencia y planificación de estrategias conjuntas para interceptar cargamentos ilícitos, así como explorar nuevas formas de colaboración en patrullaje marítimo y seguridad fronteriza.

(Con información de EFE)