La justicia de Texas suspendió la ejecución de Robert Roberson y ordenó una nueva revisión de su caso

La nueva suspensión de la ejecución fue comunicada exactamente siete días antes de que Roberson fuese sometido a la inyección letal en la prisión de Huntsville

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La Corte de Apelaciones en
La Corte de Apelaciones en lo Criminal de Texas suspendió la ejecución de Robert Roberson siete días antes de la fecha prevista. (AP Foto/Annie Mulligan)

La Corte de Apelaciones en lo Criminal de Texas decidió suspender, apenas una semana antes de su fecha programada, la ejecución de Robert Roberson, un hombre autista condenado a muerte por la muerte de su hija de dos años.

El tribunal ordenó una nueva revisión ante las dudas sobre la validez de la evidencia que llevó a su condena bajo el diagnóstico de “síndrome de bebé sacudido”, un tema que divide a la comunidad científica y judicial en Estados Unidos y que ha atraído atención nacional e internacional.

Según reportó The New York Times, el máximo tribunal estatal instó al tribunal de primera instancia a reconsiderar el caso de Roberson tras la revisión de pruebas médicas y testimonios presentados hace más de veinte años.

La suspensión de la ejecución fue comunicada exactamente siete días antes de que Roberson fuese sometido a la inyección letal en la prisión de Huntsville. El caso ha movilizado a figuras públicas, entre ellas el presentador Dr. Phil McGraw y el novelista John Grisham, quienes han manifestado su oposición a la ejecución.

El caso Roberson vuelve a
El caso Roberson vuelve a profundizar el debate sobre el uso de diagnósticos médicos y forenses en juicios penales en Estados Unidos. (Archivo)

La condena de Roberson surgió después de un juicio en 2003, donde los fiscales lo acusaron de haber sacudido violentamente a su hija Nikki, causándole la muerte. Durante el proceso, dos testigos declararon haberlo visto realizar el movimiento, y recrearon ante los jurados la acción utilizando un oso de peluche, de acuerdo con lo publicado por The New York Times.

No obstante, la defensa sostiene que existe una falta de consenso médico en torno al diagnóstico de “síndrome de bebé sacudido”, calificado por sus abogados como “ciencia basura”.

“Estamos aliviados y agradecidos. Confiamos en que una revisión objetiva de la ciencia y la evidencia médica demostrará que no hubo crimen”, expresó Gretchen Sween, abogada de Roberson, en declaraciones recogidas por The New York Times y CBS News.

Los defensores del condenado argumentan que la menor falleció por complicaciones médicas provocadas por una neumonía viral y bacteriana severa, agravada por medicamentos prescritos, y no a causa de maltrato infantil.

Nikki Roberson, hija de dos
Nikki Roberson, hija de dos años de Robert Roberson, murió en 2002; la causa de su fallecimiento es objeto de disputa entre peritos médicos y la fiscalía estatal. (Archivo)

El tribunal fundamentó su decisión en la llamada ley de “ciencia basura” de Texas, que desde 2013 permite impugnar condenas si la prueba pericial ha quedado desacreditada o superada por nuevos conocimientos. CBS News precisó que la Corte de Apelaciones ya aplicó esta ley en 2024 al caso de Andrew Roark, un hombre exonerado tras permanecer años en prisión por un diagnóstico similar.

“El tribunal ordena ahora a la corte de origen resolver el caso de Roberson a la luz del precedente sentando en el caso Roark”, señala el fallo de la Corte de Apelaciones de Texas. Según la defensa, al menos 40 padres y cuidadores han sido exonerados desde 1992 en Estados Unidos luego de que el diagnóstico de “síndrome de bebé sacudido” fuera cuestionado o refutado.

El fiscal general de Texas, Ken Paxton, sostiene que la evidencia médica sigue respaldando la condena de Roberson. Familiares de la niña y algunos médicos también insisten en que la muerte de Nikki derivó de episodios anteriores de abuso, según reportó CBS News. Por el contrario, los abogados de Roberson señalan que “las autoridades apresuraron sus conclusiones al basarse en una hipótesis que no resiste el análisis actual”.

Activistas y figuras públicas nacionales,
Activistas y figuras públicas nacionales, como Dr. Phil McGraw y John Grisham, han pedido reconsiderar la condena de Roberson. (Archivo)

Múltiples apelaciones

Desde la condena, los abogados de Roberson han presentado múltiples apelaciones ante tribunales estatales, federales y ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Han solicitado en reiteradas ocasiones la intervención del Departamento de Indultos y Libertad Condicional de Texas y del gobernador Greg Abbott, a fin de conseguir un nuevo juicio.

El impacto social y político del caso Roberson ha trascendido los tribunales. En 2024, un grupo bipartito de legisladores del Comité de Justicia Criminal de la Cámara de Representantes de Texas intervino y forzó el aplazamiento de la ejecución original, mediante una citación para que el propio Roberson testificara, según lo informado por The New York Times. La maniobra legislativa terminó en la Corte Suprema de Texas, que finalmente permitió reprogramar la ejecución.

La controversia sobre el diagnóstico de “síndrome de bebé sacudido” sigue provocando revisiones judiciales y reformas legislativas. La defensa de Roberson destacó que el precedente judicial sentenciado en el caso Roark podría ser determinante, y espera que se repita el resultado de exoneración. “La cuestión ahora es si el tribunal aplicará el mismo criterio a Robert que aplicó en el caso de Roark, quien ya fue exonerado”, aseveró Gretchen Sween.