Charlie Kirk, activista conservador y aliado cercano del presidente Donald Trump, murió el miércoles tras recibir un disparo en un evento universitario, según informó Trump.
Kirk, de 31 años, cofundador y director ejecutivo de la organización juvenil Turning Point USA, es la última víctima de una oleada de violencia política en Estados Unidos.
Vídeos publicados en redes sociales por la Universidad del Valle de Utah muestran a Kirk hablando por un micrófono de mano mientras está sentado bajo una carpa blanca con los lemas “El regreso de Estados Unidos” y “Demuéstrame que estoy equivocado”.
Se oye un solo disparo y se ve a Kirk extendiendo la mano derecha mientras una gran cantidad de sangre brota a borbotones del lado izquierdo de su cuello. Se oyen a los espectadores atónitos jadear y gritar antes de que la gente empiece a huir.
Kirk estaba hablando en un debate organizado por su organización política sin fines de lucro. Justo antes del tiroteo, Kirk respondía preguntas de un miembro del público sobre tiroteos masivos y violencia armada.
El asesinato de Charlie Kirk, activista conservador y figura central de Turning Point USA, en un evento en la Universidad del Valle de Utah, volvió a encender la alarma sobre la violencia política en Estados Unidos.
El primer ministro británico, Keir Starmer, calificó el asesinato del activista conservador estadounidense Charlie Kirk como “desgarrador” y afirmó que “una joven familia ha sido privada de un padre y un esposo”.
En un mensaje publicado en X, agregó que los ciudadanos deben ser “libres de debatir abierta y libremente sin temor. No hay justificación para la violencia política”.
Por su parte, la ministra de Relaciones Exteriores, Yvette Cooper, declaró estar “profundamente conmocionada” por el crimen. La líder del Partido Conservador, Kemi Badenoch, sostuvo que el hecho constituye “un golpe a todo lo que representa la civilización occidental: discurso abierto, debate robusto y disenso pacífico”.
Por su parte, el líder liberal demócrata, Ed Davey, escribió en X que “la violencia política no debería tener lugar en la sociedad”.
El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, recordó su amistad de años con Charlie Kirk y señaló que, al igual que él, Kirk “era escéptico de Donald Trump en 2016”, aunque más tarde lo consideró esencial para la política estadounidense.
En un extenso mensaje publicado en X, Vance afirmó que Kirk lo impulsó a convertirse en candidato a la vicepresidencia de Trump y que “Charlie estuvo allí para mí … llamando y enviando mensajes constantemente, revisando a nuestra familia y ofreciendo orientación y oraciones”.
El vicepresidente destacó la influencia de Turning Point USA (TPUSA), organización juvenil conservadora cofundada por Kirk, en su campaña y administración. “Mucho del éxito que hemos tenido en esta administración se debe directamente a la habilidad de Charlie para organizar y convocar. No solo nos ayudó a ganar en 2024, también ayudó a formar todo el gobierno”, señaló.
Charlie Kirk siempre sostuvo que era mejor desafiar las malas ideas, tal y como él las veía, que tragárselas. Su vida profesional estuvo dedicada a esta creencia. A los 18 años abandonó la universidad para fundar lo que se convertiría en la organización juvenil conservadora más importante de Estados Unidos, Turning Point usa (TPUSA). El 10 de septiembre, Kirk fue asesinado a tiros en un campus universitario de Utah haciendo precisamente lo que le había dado fama, propósito y, para los seguidores de MAGA, gran reconocimiento: debatir con liberales.
Charlie Kirk fue una de las figuras decisivas en la estrategia conservadora para captar el voto joven que impulsó a Donald Trump en la carrera presidencial de 2024. Como líder de Turning Point USA y creador de una red de activismo en universidades de todo el país, Kirk no solo se consolidó como referente de la nueva derecha estadounidense, sino que estructuró una maquinaria que transformó la participación política entre los estudiantes, dándole al líder republicano una ventaja clave entre los votantes más jóvenes.
El asesinato de Charlie Kirk, figura destacada del activismo conservador estadounidense, durante un evento en la Universidad del Valle de Utah (UVU), reveló fallas en los protocolos de seguridad dentro del recinto, según denuncias de algunos asistentes recogidas por NBC News.
La gente se congregó frente al Hospital Regional de Timpanogos, donde Charlie Kirk fue declarado muerto tras recibir un disparo en la universidad. Los asistentes se alinearon en la calle, ondeando banderas estadounidenses mientras los autos pasaban tocando la bocina.
Los visitantes colocaron velas encendidas, ramos de flores y pequeñas banderas frente a un gran letrero del hospital, en homenaje al activista conservador.
A medida que el sol se ponía en Utah, algunos asistentes leyeron pasajes de la Biblia, mientras otros hablaron sobre continuar el trabajo que Kirk había iniciado con su organización y su activismo político.
El ex presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reaccionó al asesinato de Charlie Kirk por medio de un comunicado publicado en X.
“Aún no sabemos qué motivó a la persona que disparó y mató a Charlie Kirk, pero este tipo de violencia despreciable no tiene cabida en nuestra democracia“, afirmó.
“Michelle y yo oraremos por la familia de Charlie esta noche, especialmente por su esposa Erika y sus dos hijos pequeños”, concluyó el ex mandatario.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó a su aliado republicano asesinado Charlie Kirk como un “mártir de la verdad” y responsabilizó a la izquierda radical por el clima de tensión que, a su juicio, derivó en la muerte del activista conservador.
La Universidad del Valle de Utah emitió un aviso de que el campus estaba despejado casi seis horas después del tiroteo de Charlie Kirk, afirmando que “no existe ninguna amenaza continua para el campus”.
La investigación continúa y el campus permanecerá cerrado hasta el 15 de septiembre, según informó la universidad.