Murió un niño de 11 años tras recibir disparos durante una broma de “ding dong ditch” en Texas

Un niño de 11 años murió después de recibir varios disparos al participar en una popular broma conocida como “ding dong ditch” en el este de Houston, en la noche del sábado 30 de agosto.

La Policía de Houston informó que el incidente ocurrió cerca de las 23:00 horas en el bloque 9700 de Mimbrough, cuando el grupo de niños ejecutaba el juego en un vecindario residencial.

La dinámica de la broma “ding dong ditch”, también llamada por algunos como “doorbell ditch”, consiste en acercarse a la puerta de una casa, tocar o presionar el timbre y huir antes de que el propietario abra.

Esta práctica, que se ha hecho viral en plataformas como TikTok, ha generado preocupación entre padres de familia y líderes comunitarios debido a los riesgos implicados ante reacciones imprevisibles.

Según confirmó la policía, el niño, acompañado de varios amigos, tocó la puerta de una vivienda cuando, sorpresivamente, el ocupante de la casa salió y disparó en dirección a los menores.

“El niño recibió un par de heridas de bala”, relató la teniente Amber Khan, del Departamento de Policía de Houston, a la cadena local KHOU desde el lugar de los hechos. Khan agregó que paramédicos del Departamento de Bomberos de Houston trasladaron al menor a un hospital cercano, donde permaneció hospitalizado en estado crítico antes de su muerte este lunes.

El portavoz policial Shay Awosiyan precisó que la identidad del atacante no ha sido revelada, ni tampoco se ha informado sobre la presentación de cargos formales. La persona señalada por el tiroteo fue detenida poco después, aunque el caso sigue bajo investigación y no se descartan nuevas diligencias.

La noticia conmocionó a vecinos de la zona, quienes se manifestaron consternados ante la gravedad del incidente y los peligros del acceso armas de fuego en el entorno doméstico.

Theresa Jones, residente del área, expresó su inquietud ante medios locales: “la sola idea me entristece. Es realmente triste, creo que no deberíamos tener armas al alcance de los niños. Una bala no tiene nombre”.

Hasta el momento, las autoridades no han reportado otras personas lesionadas durante el suceso, aunque recalcaron el impacto emocional en la familia y el círculo cercano del menor. “En este momento, nuestras oraciones están con la familia del niño que ha sido baleado”, afirmó un oficial del área de delitos mayores de la policía de Houston, señalando la gravedad de la situación.

Las bromas de “ding dong ditch” han cobrado notoriedad en los últimos años gracias a su difusión en redes sociales y no son ajenas a tragedias anteriores. En mayo de este año, un hombre de Virginia fue acusado de homicidio en segundo grado tras disparar mortalmente a un adolescente implicado en otra broma similar.

Además, en 2020, un hombre en California protagonizó un accidente fatal que dejó tres adolescentes muertos luego de un episodio de “doorbell ditch” en el que persiguió al automóvil de los jóvenes involucrados; fue sentenciado a cadena perpetua en 2023.

Diversas organizaciones comunitarias y padres han advertido sobre el incremento de riesgos asociados a este tipo de desafíos virales, exhortando a los menores y sus familias a considerar el peligro real que pueden acarrear actividades catalogadas como inocentes o inofensivas en la era digital.

Investigadores han instado a cualquier persona que disponga de información sobre el caso a comunicarse directamente con el Departamento de Policía de Houston, mientras continúa la indagatoria para esclarecer las circunstancias y determinar la responsabilidad penal del acusado.