ICE detiene a 16 miembros de la comunidad que ayudó a Estados Unidos durante la Guerra de Vietnam

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) confirmó la detención de 16 migrantes procedentes del sudeste asiático, la mayoría pertenecientes a la comunidad hmong, en el área de Detroit el pasado 30 de julio, según informó Newsweek. De acuerdo con el comunicado oficial, la operación fue dirigida por Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y forma parte de las recientes acciones orientadas a la deportación de individuos con antecedentes penales. El hecho ha generado una fuerte reacción entre defensores de derechos de los migrantes, legisladores estatales y miembros de la comunidad afectada.

“El operativo resultó en el arresto de múltiples extranjeros criminales ilegales, incluidos abusadores sexuales de menores, traficantes de drogas, un miembro de una banda conocido que obstruyó una investigación de asesinato y otros nacionales laosianos con historiales delictivos extensos”, sostuvo el DHS en un comunicado remitido por correo electrónico a Newsweek.

Detroit Free Press reportó que 15 de los migrantes fueron detenidos en oficinas de ICE de la ciudad, donde se presentaron para sus citas regulares, mientras que el restante fue arrestado en su lugar de trabajo en Lansing. Los migrantes fueron posteriormente trasladados a un centro de detención en el noroeste de Míchigan y de allí a instalaciones en Luisiana y Texas.

El contexto histórico de la comunidad hmong reviste especial relevancia: este grupo fue reclutado por la CIA durante la Guerra de Vietnam y el conflicto conexo en Laos para colaborar con las fuerzas estadounidenses, lo que generó que muchos huyeran a Estados Unidos como refugiados tras sufrir persecución en Asia.

Operativo de ICE motiva críticas por presuntos enfoques selectivos y prácticas de detención

Organizaciones defensoras de inmigrantes denuncian que estos arrestos responden a tácticas agresivas de control migratorio que se acentuaron bajo políticas de la administración anterior. Según los representantes legales y familiares, el operativo fue cuidadosamente planificado. “Esto pareció ser una operación dirigida, una forma sencilla para que los agentes de ICE detuvieran a personas sin tener que acudir a sus domicilios”, explicó Maiyia Xiong, esposa de uno de los inmigrantes detenidos, durante una conferencia de prensa.

Newsweek informó que la presión diplomática ejercida por el gobierno estadounidense desde 2017 facilitó las deportaciones hacia Laos, un proceso que anteriormente enfrentó dificultades. Según ICE, los arrestados contaban con órdenes de salida emitidas desde hace años por jueces de inmigración, pero hasta ahora no se había procedido a su expulsión por falta de documentos de viaje válidos; la reciente cooperación del gobierno de Laos permitió reactivar estos casos.

La comunidad hmong en Estados Unidos está formada mayoritariamente por refugiados y sus descendientes que nunca han conocido Laos. Mai Xiong, legisladora estatal y primera mujer de origen hmong electa en Míchigan, señaló en una transmisión por redes sociales que muchos de los detenidos nacieron en campos de refugiados fuera de Laos o llegaron a Estados Unidos cuando eran niños. “Algunos ni siquiera conocen ni han estado jamás en Laos”, afirmó la legisladora.

Historias personales evidencian arraigo y vínculos con Estados Unidos

Uno de los casos citados por Newsweek es el de Pang Nhia Hang Bailey, madre de cuatro hijos y residente en el país durante más de cuatro décadas, quien fue arrestada en la misma jornada. En otra historia, Sufeng Yang, que llegó de niño a Estados Unidos junto con su madre, figura entre los detenidos. Según su hija Anissa Lee, entrevistada por Detroit Free Press, Yang “buscaba seguridad y una vida mejor después de la guerra”.

Lee explicó que su padre “ha crecido aquí, estudió aquí y ha construido toda su vida aquí. Estados Unidos es todo lo que conoce. No es solo un residente legal, es contribuyente, proveedor, padre y cuidador”.

Los relatos familiares insisten en que los arrestados mantienen profundos lazos familiares y laborales en el país y consideran imposible una reintegración a Laos, país al que muchos jamás han regresado.

Presión de legisladores y demandas de transparencia ante el accionar de ICE

Las reacciones institucionales tampoco se han hecho esperar. Veintisiete legisladores estatales enviaron una carta a Kevin Raycraft, director de la oficina de ICE en Detroit, solicitando la liberación inmediata de las personas detenidas, de acuerdo con datos recogidos por Detroit Free Press. Al respecto, el representante estatal Donavan McKinney declaró durante una conferencia: “Es cruel, es incorrecto, es injusto y debe terminar. Pedimos su liberación. Las familias deben mantenerse unidas y no deben ser separadas en secreto. También solicitamos transparencia y responsabilidad para que hechos tan graves no vuelvan a repetirse”.

Por su parte, el DHS, en un comunicado recogido por Newsweek, reiteró que sus acciones se enfocan en “los peores de los peores, incluidos miembros de bandas, asesinos y violadores. Los extranjeros criminales ilegales no son bienvenidos en Estados Unidos”.

A la fecha, los migrantes permanecen bajo custodia en centros de detención de ICE, mientras representantes legales y funcionarios estatales mantienen esfuerzos coordinados para exigir que las autoridades pongan fin a la detención y ordenen la liberación inmediata de los afectados, según han hecho constar las fuentes consultadas en Newsweek y Detroit Free Press.