Estados Unidos retira más de 60 toneladas de embutidos por error en el etiquetado

Más de 60 toneladas de productos listos para el consumo han sido retiradas del mercado por contener ingredientes no declarados en su etiquetado. Así lo anunció este viernes el Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (FSIS, por sus siglas en inglés), tras recibir una denuncia formal que activó una investigación interna.

Los productos afectados, todos fabricados por la empresa Gaiser’s European Style Provisions Inc., fueron distribuidos a nivel nacional en supermercados y mayoristas. El organismo advirtió que estos embutidos tipo bologna incluyen carnes no especificadas en las etiquetas, lo que representa una infracción regulatoria y un posible riesgo para personas con alergias alimentarias o restricciones dietéticas.

“El problema fue descubierto cuando FSIS fue notificado por la Oficina del Inspector General (OIG) de una denuncia recibida a través de la línea directa del OIG”, señaló el comunicado oficial del FSIS. Tras la investigación, el organismo concluyó que los productos contenían materiales cárnicos que no estaban mencionados en el etiquetado del producto.

El retiro afecta productos fabricados entre el 20 de marzo y el 20 de junio de 2025. Todos ellos llevan el número de establecimiento “EST. 5385” dentro del sello de inspección del Departamento de Agricultura.

Entre los artículos especificados por el FSIS figuran:

• Paquetes al vacío de “FAMILY TREE BOLOGNA VEAL” que contienen cerdo no declarado.
• Paquetes envueltos en plástico de “BABUSHKA’S RECIPE CHICKEN BOLOGNA” con presencia de cerdo no indicado.
• Paquetes plásticos de “FANCY BOLOGNA”, que aunque indican cerdo en la etiqueta, contienen también res y pollo no mencionados.
• Embutidos de “GAISER’S RUSSIAN BRAND DOKTORSKAYA BOLOGNA” que contienen carne de res no declarada.
• Productos etiquetados como “GAISER’S BOLOGNA VEAL” y “GAISER’S TURKEY BOLOGNA”, ambos con pollo y cerdo no incluidos en las etiquetas.
• Finalmente, “CHICKEN BOLOGNA KYPOYKA PABA”, etiquetado como pollo pero con presencia no declarada de cerdo.

La agencia también destacó que algunos de estos productos fueron pesados, envueltos y etiquetados directamente en tiendas minoristas, lo que complica aún más el control de trazabilidad para los consumidores.

En su boletín, el FSIS indicó que este retiro se encuentra clasificado como Clase III, lo cual significa que no se anticipan consecuencias adversas para la salud de los consumidores. Sin embargo, recalcaron que el problema no debe subestimarse.

“La agencia está preocupada porque algunos productos puedan encontrarse aún en los congeladores o refrigeradores de los consumidores”, explicó el FSIS en el documento oficial. Newsweek informó que también se intentó contactar a Gaiser’s para obtener declaraciones, aunque hasta el momento no se ha recibido respuesta.

Si bien no se han confirmado reacciones adversas por el consumo de estos productos, la agencia recomienda que cualquier persona con inquietudes por síntomas relacionados se comunique con su proveedor de atención médica.

El caso de Gaiser’s European Style Provisions Inc. se suma a una serie de retiros de alimentos en lo que va de 2025, la mayoría relacionados con contaminación, productos dañados o presencia de alérgenos no declarados.

Según datos de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés), millones de personas en el país presentan sensibilidades alimentarias. Los principales alérgenos identificados por la FDA son: leche, huevos, pescado, mariscos crustáceos, frutos secos, maní, trigo, soya y sésamo. La presencia no declarada de cualquiera de estos puede representar un riesgo grave.

En este contexto, errores de etiquetado como los reportados en el caso de Gaiser’s no sólo vulneran normas sanitarias, sino que además representan un potencial peligroso para consumidores alérgicos o que siguen dietas específicas por motivos religiosos o de salud.

El FSIS fue enfático en su recomendación final: los productos retirados no deben ser ingeridos bajo ninguna circunstancia. Los consumidores que los hayan adquirido deben desecharlos o devolverlos al punto de compra.

“Si se tienen dudas sobre algún producto o se necesita asistencia adicional, se puede contactar directamente a la línea del USDA para alimentos”, concluye el informe de la agencia.

El retiro, aunque clasificado como de bajo riesgo, pone nuevamente en foco los controles de calidad en la industria cárnica y el sistema de etiquetado. También subraya el papel fundamental de la supervisión institucional y las denuncias anónimas en la protección del consumidor.