Estados Unidos arrestó a un ex soldado de la Guardia Revolucionaria de Irán en Minnesota

Un operativo en contra de la migración ilegal, liderado por agentes federales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) acabó con el arresto de 11 ciudadanos iraníes extranjeros en 48 horas.

Entre las personas detenidas desde el domingo 22 de junio, se encuentra Mehran Makari Sahel, exmiembro del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), una rama de élite que, según CBS News, pertenece a las fuerzas armadas iraníes. Fue arrestado en su domicilio, ubicado en las cercanías a St. Paul, Minnesota.

Makari Sahel, según lo revelado por el medio, admitió tener vínculos con Hezbolá, una organización que fue designada por el gobierno estadounidense como terrorista extranjera y que cuenta con el respaldo de Irán.

Funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) confirmaron el arresto de 11 ciudadanos iraníes “que se encontraban ilegalmente en EEUU” a través de una publicación de X (antes Twitter). Citando a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, estas personas fueron identificadas como “terroristas y extremistas violentos conocidos o sospechosos”.

Todos ellos ingresaron de manera ilegal a EEUU “a través de los parole fraudulentos de (Joe) Biden o de otras maneras”.

“Hemos estado diciendo que estamos sacando a los peores de entre los peores, y así es. No esperamos a que se produzca una operación militar para ejecutarla; cumplimos proactivamente el mandato del presidente (Donald) Trump de proteger la patria”, se lee en la publicación de redes sociales del DHS.

El departamento confirmó a CBS News que cinco de los 11 arrestados tenían condenas penales previas, las cuales iban desde hurto mayor hasta posesión de drogas y armas de fuego. Yousef Mehridehno, uno de los detenidos, llevaba casi ocho años viviendo sin documentos en EEUU.

Autoridades federales determinaron que Mehridehno había mentido en su solicitud de visa y, cerca de cuatro meses después de que fuera incluido en la lista de “terroristas conocidos o sospechosos” en el mes de febrero, fue arrestado por agentes federales el domingo 22 de junio en el centro de Mississippi.

Hasta el momento, de acuerdo con reportes de CBS News, ninguno de estos arrestos se ha vinculado con algún complot terrorista en específico, al mismo tiempo que el DHS declaró que no existen amenazas actuales o creíbles en el territorio nacional estadounidense, a pesar de la escalada en las tensiones en Medio Oriente.

Otro de los ciudadanos iraníes bajo custodia de la agencia federal es Ribvar Karmi, quien fue arrestado el domingo en el norte de Alabama. Un portavoz del DHS confirmó que hallaron una tarjeta de identificación del Ejército de la República Islámica del Irán.

Información proporcionada por funcionarios del ICE a CBS News confirmó que Karmi presuntamente era un francotirador del Ejército iraní que sirvió entre 2018 a 2021 y llegó a EEUU en octubre de 2024, utilizando una visa K-1 que, según el medio, sirve únicamente para los migrantes comprometidos con ciudadanos estadounidenses. Actualmente, se encuentra a la espera de ser deportado.

Aunado a los 11 ciudadanos de Irán, agentes federales detuvieron también a Linet Vartaniann, ciudadana estadounidense, bajo cargos federales de amenazar a un oficial del orden público, además de supuestamente albergar a un migrante indocumentado.

Agentes del ICE afirman que Vartaniann amenazó con disparar si algún oficial entraba a su casa.

Todos los arrestos que fueron realizados desde el domingo son parte de la ofensiva del gobierno para diluir la migración ilegal.

Tricia McLaughlin, subsecretaria del DHS, dijo durante una entrevista al medio que no esperarán a que se produzca “una operación militar” para ejecutar las órdenes de deportación. “Cumplimos proactivamente el mandato del presidente Trump de proteger la patria”, sentenció.