Madre indocumentada con 36 años en EEUU se autodeportó a México por miedo a las redadas de ICE

Tras más de tres décadas viviendo en Estados Unidos, Regina, una madre latina, tomó la difícil decisión de autodeportarse a México por temor a las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).

De acuerdo con la información de Telemundo, la mujer, quien residió en el país durante 36 años sin resolver su estatus migratorio, dejó atrás a sus tres hijos y tres nietos para regresar a su lugar de origen.

La decisión fue documentada por su hija Julie, quien la acompañó en el viaje desde Los Ángeles hasta Tijuana, donde voló hacia Ciudad de México.

La señora Regina había considerado regresar a México desde que Donald Trump se perfilaba como candidato para un segundo mandato presidencial.

Sin embargo, la situación se tornó más urgente con el incremento de las redadas de ICE en Los Ángeles y otras ciudades del país, debido a las políticas migratorias del gobierno federal.

Según explicó Julie, la familia discutió la situación y concluyó que la autodeportación era la mejor opción para evitar que Regina fuera detenida o deportada de manera forzosa.

“Esto se está poniendo mal, hay que hacer algo, porque lo último que queremos es que paren a mi mamá, que la arresten o que la detengan por ser indocumentada”, declaró Julie en entrevista con Telemundo.

El viaje hacia México fue un momento cargado de emociones para la familia. Julie relató que, durante el trayecto, olvidaron los pasaportes, lo que obligó a su hermana a regresar por ellos.

Según informó Telemundo, este contratiempo les permitió compartir una última comida con su mamá antes de despedirse. “Nos quedamos muy tristes. Aunque yo quise aguantarme y no llorar para que viera que estábamos bien cuando se fuera, cuando vi que volteó fue cuando empezamos a llorar todos”, recordó Julie.

De acuerdo con el medio Telemundo, el esposo de Regina, quien ha sido su compañero durante 25 años, no pudo acompañarla debido a su propio estatus migratorio.

Decidieron que él permanecería en Estados Unidos trabajando unos meses más antes de considerar unirse a ella. Julie explicó que la familia había planeado inicialmente que su padre se fuera más adelante, pero las redadas en Los Ángeles aceleraron la decisión. “Estamos pensando que podemos hacer algo para que se pueda ir más temprano de lo que planeábamos”, comentó.

Sin embargo, a pesar de la tristeza que implicó la separación, Julie expresó que siente que esta decisión es lo mejor para su madre. Al llegar a su pueblo natal en Guerrero, Regina fue recibida con cariño por familiares y amigos, lo que la permitió reencontrarse con su propia madre, la abuela de Julie, después de muchos años sin verla. En un video compartido por la familia, Regina aseguró: “Estoy bien, no se preocupen”.

Julie subrayó que la intención de documentar este proceso no es promover las autodeportaciones, sino transmitir un mensaje de esperanza.

“El mundo no se acaba si los familiares tienen que regresar”, afirmó. Aunque extrañan profundamente a Regina, la familia ve su regreso como un merecido descanso tras años de arduo trabajo en Estados Unidos. “Ella vino a Estados Unidos a trabajar, a darnos una vida mejor a nosotros, sus tres hijos”, concluyó Julie.

La historia de Regina refleja los desafíos que enfrentan muchas familias inmigrantes en Estados Unidos, especialmente aquellas que viven bajo la constante amenaza de las políticas migratorias y las redadas.