Florida oficialmente se convierte en el segundo estado en prohibir el flúor en el agua pública

Florida ha adoptado una medida que lo sitúa como el segundo estado en prohibir el uso de flúor en el agua pública, tras la promulgación de la ley SB 700 por el gobernador Ron DeSantis. Esta legislación, también conocida como la Ley Agrícola de Florida, no menciona explícitamente el término “fluoruro”, pero establece restricciones sobre el uso de ciertos aditivos en el sistema de agua estatal.

En una conferencia de prensa celebrada antes de la firma del proyecto, el gobernador DeSantis subrayó que esta normativa impide que el flúor sea añadido al agua del estado, describiéndolo como una forma de evitar la “medicación forzada” y una violación del “consentimiento informado”, según NBC News.

Afirmó que el mineral podría tener efectos adversos en mujeres embarazadas y niños, e invitó a expertos, incluido el Cirujano General de Florida, Joseph Ladapo, para discutir sobre posibles efectos secundarios. La ley entrará en vigor el próximo 1 de julio.

El proyecto de ley fue firmado en Miami, donde la alcaldesa Daniella Levine Cava había vetado previamente una prohibición similar aprobada por la comisión del condado. Sin embargo, la comisión votó 8-4 para anular el veto de Cava, lo que DeSantis elogió como una decisión correcta, según reportó el medio.

Cava, demócrata, expresó su decepción por la prohibición, argumentando que ignora el consenso de expertos médicos que apoyan la fluoración del agua como una medida de salud pública.

La prohibición en Florida sigue el ejemplo de Utah, donde el gobernador Spencer Cox, republicano igual que DeSantis, firmó una ley similar a finales de marzo y que entrará en vigor el próximo miércoles.

Este movimiento ha sido aparentemente impulsado en parte por figuras como Robert F. Kennedy Jr., quien ha cuestionado los beneficios de la fluoración del agua.

A pesar de estas prohibiciones, importantes organizaciones de salud pública, como la Academia Estadounidense de Pediatría y la Asociación Dental Estadounidense, continúan defendiendo la fluoración del agua por su capacidad para fortalecer los dientes y reducir las caries en un 25%.

Además de Florida y Utah, otros estados como Kentucky, Massachusetts, Nebraska, Wisconsin y Carolina del Norte han implementado leyes para prohibir el flúor en sus sistemas de agua.

En contraste, Hawái, que nunca ha impuesto la fluoración, presenta una alta prevalencia de caries dental entre sus niños, con solo el 11% de sus residentes atendidos por sistemas de agua fluorada, según un estudio de 2015 del Departamento de Salud Estatal.

Durante la misma conferencia de prensa, DeSantis también promulgó la ley SB 56, presentada por la senadora Ileana García, que penaliza cualquier forma de modificación climática, incluida la siembra de nubes, una técnica utilizada para hacer llover en lugares que necesitan agua.

García, quien se desmayó brevemente durante la sesión informativa, argumentó que estas prácticas pueden mitigar los efectos del calentamiento global, aunque la ley ahora las prohíbe en Florida.

Un estudio de 2019 sugirió que los niveles de CI eran ligeramente más bajos en niños cuyas madres tenían altos niveles de flúor en la orina durante el embarazo, aunque los investigadores señalaron que sus hallazgos no eran concluyentes.

DeSantis utilizó este estudio para respaldar su postura, invitando a profesionales médicos, incluido el Cirujano General de Florida, Joseph Ladapo, a discutir los posibles efectos secundarios del flúor.

Aunque afirmó que los residentes de Florida tendrán otras opciones de acceder al mineral si así lo desean. “No hay nada que le impida a usted agregar flúor al agua de su casa”, añadió.

Mientras tanto, la decisión de Florida de prohibir la fluoración del agua marca un cambio significativo en la política de salud pública del estado.