Un policía de Nueva York le enviaba mensajes sexuales a una niña, pero resultó ser un agente encubierto

Un oficial del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), encargado de supervisar programas para jóvenes, se encuentra envuelto en un caso que generó gran indignación. Travis N. DeSouza, de 35 años, enfrenta cargos luego de presuntamente haber enviado mensajes de carácter sexual a un oficial encubierto que se hacía pasar por una adolescente de 14 años. Los fiscales han presentado acusaciones en dos condados debido a la naturaleza de las ofensas cometidas.

El caso comenzó cuando agentes de la policía desarrollaron una operación encubierta en octubre de 2024, luego de sospechas sobre la conducta inapropiada de DeSouza. Según detalló New York Post, esta acción fue motivada por su rol como supervisor del programa juvenil de la NYPD, Police Explorers, diseñado para jóvenes interesados en el ámbito de la seguridad.

Un oficial encubierto, quien simulaba ser participante del programa, contactó a DeSouza afirmando tener 14 años. “Por supuesto, deja de intentar atraparme ya,” respondió el acusado al ser consultado sobre si podía compartir su número, según la denuncia citada por el medio estadounidense.

De acuerdo con el mismo medio, el oficial envió varios mensajes inapropiados por Snapchat y otras plataformas, claramente consciente de que el destinatario se trataba de una menor de edad. “No sé por qué me haces pensar cosas que no debería debido a nuestra diferencia de edad. Debería decirte que pares, pero tu madurez y la forma en que actúas son diferentes,” habría escrito el agente al oficial encubierto.

El intercambio no terminó ahí; el policía mandó fotografías explícitas de sí mismo, incluido un retrato en ropa interior que fue acompañado del mensaje: “algo grande, quizá más de lo que puedes manejar”. Estos detalles forman parte de las pruebas presentadas en la denuncia.

El caso generó impacto en diferentes puntos de la ciudad, ya que las actividades delictivas del oficial, presuntamente, se desarrollaron tanto en Brooklyn como en Queens. En relación con ello, Patch corroboró que algunas interacciones ocurrieron mientras DeSouza estaba fuera de servicio, y otras, incluso, desde un edificio de la policía. Por esta razón, enfrenta cargos en ambos condados.

En el condado de Queens, las autoridades lo acusan de intento de difusión de material indecente a menores en primer grado, conducta indebida oficial, obscenidad en tercer grado e intento de poner en peligro el bienestar de un menor de edad.

Mientras tanto, en el condado de Brooklyn, está imputado por intento de difusión de material indecente a menores en primer grado, intento de poner en peligro el bienestar de un menor y obscenidad en tercer grado. Según informó New York Post, durante su comparecencia más reciente, un tribunal decidió liberarlo sin derecho a fianza, lo que ha sido objeto de críticas en ciertos sectores de la opinión pública.

Desde que salieron a la luz las acusaciones, el oficial fue suspendido de sus funciones sin goce de sueldo, según confirmó la propia policía de Nueva York. Patch señaló que el sujeto, quien cuenta con 13 años de servicio en las filas de la NYPD, fue asignado al Precinto 75 de Brooklyn, uno de los lugares donde realizó parte de las actividades ahora cuestionadas.

La conducta atribuida al oficial resulta especialmente preocupante debido a su vinculación directa con un programa dirigido a menores de edad, diseñado para fomentar el interés por una carrera en las fuerzas del orden.