Florida enfrenta aumento de casos de influenza en la temporada invernal

El inicio del invierno en Estados Unidos se caracteriza por un notable incremento en los casos de influenza y otros virus respiratorios. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), siete estados, los cuales incluyen Florida, sus vecinos del sureste, y Puerto Rico, están experimentando altos niveles de contagio. La última semana ha sido especialmente crítica, así lo han señalado medios locales.

Los niños, particularmente, parecen ser los más afectados durante esta temporada. Dadilia Garcés, médico epidemióloga y profesora del Miami-Dade College, en conversación con T51 Miami, subrayó la importancia de la vacunación, especialmente durante festividades como Halloween, Thanksgiving y Navidad, períodos donde tradicionalmente aumentan los casos de virus respiratorios. Garcés destaca que la vacuna contra la influenza es crucial para reducir los riesgos de complicaciones severas en menores.

Además de la influenza, otro virus que gana terreno es el norovirus, comúnmente conocido como “gripe estomacal”. Es un virus altamente contagioso que es una de las principales causas de gastroenteritis. Según Garcés, se transmite principalmente por ingestión de alimentos contaminados, y sus síntomas incluyen diarrea y vómitos. La especialista enfatiza la importancia del lavado de manos como medida preventiva y advierte que en poblaciones vulnerables, como niños y mujeres embarazadas, el norovirus puede ser extremadamente peligroso.

Los síntomas típicos incluyen diarrea, vómitos, náuseas y dolor de estómago. También pueden presentar fiebre, dolor de cabeza y dolores corporales. Los síntomas suelen aparecer de 12 a 48 horas después de la exposición al virus y generalmente duran de 1 a 3 días.

No hay un tratamiento específico para el norovirus. El manejo de la enfermedad se centra en el alivio de los síntomas y la prevención de la deshidratación, especialmente en niños pequeños, ancianos y personas con sistemas inmunitarios debilitados. La rehidratación con líquidos, ya sea oralmente o por vía intravenosa en casos severos, es crucial.

Si bien, los casos de hospitalización por COVID-19 han disminuido, los hospitales en Florida reportan altas cifras de visitas por otro tipo de enfermedades respiratorias. Thomas Unnasch, profesor emérito distinguido de la Facultad de Salud Pública de la Universidad del Sur de Florida, señaló para News Miami, que este fenómeno es típico de la temporada y está relacionado con el aumento de la socialización y el contacto entre las personas.

Hasta el momento, los CDC estiman que ha habido al menos 780 mil casos de gripe. Además, el virus respiratorio sincitial (VSR) también ha generado preocupación. Unnasch observa que la situación actual podría centrarse en el VSR y la influenza, lo que relega al COVID-19 a un segundo plano.

A pesar de la incertidumbre sobre la eficacia de las vacunas contra la gripe actuales, los médicos siguen recomendando la vacunación como una de las medidas más efectivas para prevenir hospitalizaciones. Las medidas preventivas adicionales incluyen el uso de mascarillas, desinfectantes de manos, y mantener una buena higiene personal.

De acuerdo a los CDC, aproximadamente el 35% de los adultos y el 33% de los niños en Estados Unidos han sido vacunados contra el virus de la gripe.

La situación actual refleja la continua importancia de medidas preventivas y la vacunación para enfrentar la temporada invernal y sus desafíos sanitarios asociados. Con el aumento de casos y la propagación de varios virus, las autoridades sanitarias y los expertos médicos instan a la población a mantener la vigilancia y adoptar prácticas saludables para protegerse a sí mismos y a sus comunidades.