La joya natural de Cantabria: un parque natural que alberga el conjunto de humedales más importantes del norte de España

Más de 120 especies distintas de aves pasan por este espacio protegido, siendo uno de los mejores lugares para los amantes de la ornitología

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Parque Natural de las Marismas
Parque Natural de las Marismas de Santoña, en Cantabria (Adobe Stock).

Entre montañas, costas acantiladas y bellos pueblos, Cantabria se alza como uno de los destinos favoritos del norte español. Esta región acoge infinidad de secretos y tesoros que enamoran al viajero y que la sitúan como uno de los referentes naturales de nuestro país. De hecho, en la villa marinera de Santoña, se ubica uno de los parques naturales más singulares de España. Esta localidad, conocida por sus anchoas, su puerto y su patrimonio histórico, atesora uno de los espacios medioambientales más importantes de España: el Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel.

Este lugar es el conjunto de humedales más importante, en lo que a aves acuáticas se refiere, del norte de España, llegando a tener referencia de hasta 130 especies distintas, lo que lo convierte en el lugar perfecto para la observación de aves. Además, su extensión no se limita solo a Santoña, pues con sus más de 6.500 hectáreas abarca otros 10 municipios: Ampuero, Argoños, Arnuero, Bárcena de Cicero, Colindres, Escalante, Laredo, Limpias, Noja y Voto.

Un lugar de migración de aves

Parque Natural de las Marismas
Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, en Cantabria (Adobe Stock).

El Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel es un espacio protegido que engloba tres áreas: el estuario que forma el río Asón (Santoña-Laredo) y las marismas de Victoria y Joyel. Pero no solo eso, pues la reserva incluye también encinares, prados, dunas y playas, como la playa de Berria. Fue catalogado parque natural en el año 1992 y desde 1994 está declarado como Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA). Esto se debe a que es lugar de invernada de más de 15.000 ejemplares de más de 120 especies y juega un papel básico en el proceso de migración de decenas de aves acuáticas, entre ellas la espátula (la mitad de la población holandesa pasa por Santoña).

Pero no solo eso, pues cuenta también con una amplia diversidad de mamíferos donde destacan la comadreja y el turón, además de su ecosistema marino, donde se pueden encontrar peces como la dorada, el jargo, el salmonete o el salmón, entre otros. Pero más allá de su fauna, el parque natural conserva diversos molinos de mareas empleados antiguamente aprovechando la energía maremotriz. Además, en su interior se encuentra el Centro Penitenciario El Dueso o Penal del Dueso.

Para descubrir todo ello, el parque cuenta con un Centro de Interpretación en el Edificio Mirador, en Santoña, el cual ofrece visitas gratuitas. Una de las más conocidas es la que discurre sobre los diques de la Marisma de Solija, al norte del casco urbano de Santoña, por un camino que discurre paralelo a la carretera C-629, que une las poblaciones de Santoña y Berria. Este itinerario de poco más de dos kilómetros se puede recorrer en unas dos horas y cuenta con seis paradas con paneles explicativos. Es una actividad ideal para hacer en familia y con amigos, ya que no entraña apenas dificultad y muestra uno de los paisajes más especiales del norte peninsular.

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Cómo llegar

Desde Santander, el viaje es de alrededor de 35 minutos por las carreteras S-10 y A-8. Por su parte, desde Bilbao el trayecto tiene una duración estimada de 55 minutos por la vía A-8.