El precioso pueblo que es uno de los más altos de Jaén y está repleto de flores: un rincón desconocido en el corazón de un parque natural

Sus calles aún conservan el pasado árabe de una localidad que está cargada de historia y riqueza patrimonial, algo de lo que también da fe su muralla, declarada Bien de Interés Cultural

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Iznatoraf es uno de los
Iznatoraf es uno de los pueblos más bonitos de Jaén. (AdobeStock)

Hay quienes dicen que Jaén es una de las provincias olvidadas de Andalucía, a menudo, eclipsada por la popularidad de otras como Sevilla o Málaga. Pero lo cierto es que son muchos los rincones que esconde y que destacan por su belleza. Este es el caso, por ejemplo, de Iznatoraf, un espectacular pueblo que es de los más altos de la región y que merece la pena visitar por todas las curiosidades que alberga. Y es que no solo está repleto de flores, sino que se encuentra en pleno corazón de un parque natural y es un lugar aún desconocido para una amplia mayoría de turistas.

En lo alto de un cerro que supera los mil metros de altitud, se encuentra Iznatoraf, uno de esos pueblos andaluces que parecen sacados de un cuento. Enclavado en la provincia de Jaén, destaca por su magia, su tranquilidad y sus calles llenas de flores. Este pintoresco municipio forma parte del Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, un entorno que no solo resalta su belleza, sino también su privilegiada ubicación.

La posición estratégica de Iznatoraf, en uno de los puntos más elevados de Jaén, lo convirtió en un lugar ideal para vigilar la zona. Aunque su función defensiva ha quedado atrás, hoy ofrece una impresionante vista panorámica de la Sierra de Las Villas, un espectáculo que invita a detenerse y disfrutar de su grandeza.

Un laberinto de callejuelas presidido por una iglesia del siglo XVI

Al recorrer sus calles, los visitantes no tardan en darse cuenta de que Iznatoraf está cargado de vestigios de su legado árabe. Su muralla, el tesoro más valioso de esta historia, fue declarada Bien de Interés Cultural en 1985, un reconocimiento a su valor patrimonial.

El laberinto de estrechas callejuelas que caracteriza a Iznatoraf esconde no solo su pasado, sino también puertas que durante siglos han sido testigos del paso de sus habitantes. Entre estas, destaca la puerta del Arrabal, un arco de medio punto que conecta con el corazón del pueblo, flanqueado por la imagen de la Virgen, que observa con serenidad el paso de los transeúntes.

Entre los lugares imprescindibles de Iznatoraf se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, un robusto templo construido entre finales del siglo XVI y principios del XVII por orden de Fernando III el Santo, quien la mandó erigir tras la reconquista de la villa a los musulmanes.

Para conocer más sobre las huellas de este rey, se debe visitar la Casa de San Fernando, una edificación señorial construida en piedra de sillería, situada en la plaza que lleva su nombre. Rodeada de empinadas calles, casas de una sola planta y balcones de hierro forjado adornados con flores de colores, esta casa es el reflejo de una época y de un monarca que marcó la historia de Iznatoraf.

El lugar ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza

Se dice que en una de sus habitaciones suceden fenómenos paranormales

Este pueblo no solo destaca por su propio encanto, sino también por el entorno que lo rodea. Como el único Pueblo Mágico de Jaén, forma parte de las Cuatro Villas, un conjunto de municipios que incluye a Sorihuela del Guadalimar, Villacarrillo y Villanueva del Arzobispo. Recorrer sus pintorescas calles, disfrutar de su gastronomía tradicional y sumergirse en la hospitalidad de sus habitantes es una experiencia esencial para quienes visitan esta región.

Para los aficionados al senderismo y a la naturaleza, el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, declarado Reserva de la Biosfera, es un destino ineludible. Este espacio protegido ofrece paisajes de una belleza singular que cautivan a todo aquel que se adentra en sus rincones.

Cómo llegar a Iznatoraf

Iznatoraf es accesible, principalmente, por carretera. La distancia desde Jaén es de, aproximadamente, 94 kilómetros, alrededor de 1 hora y 10 minutos.

Aunque no hay una línea directa de autobús desde Jaén a Iznatoraf, es posible tomar un autobús hasta Sorihuela del Guadalimar y luego un taxi hasta Iznatoraf. El tiempo total estimado para este trayecto es de unas 2 horas y 7 minutos.