El santuario situado en lo alto de una montaña a más de 1.700 metros de altura que es de los más impresionantes de España

Marcando la frontera entre Salamanca y Cáceres, el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia, es uno de los rincones más singulares de la región. Es por ello que este enclave se convierte en un destino ideal para los amantes del senderismo y la naturaleza, los cuales pueden disfrutar de paisajes maravillosos. Pero no solo eso, pues la sierra alberga también pequeños pueblos llenos de historia y con un patrimonio monumental que es digno de visitar.

Sin embargo, si hay algo que destaca de este enclave es la Peña de Francia, un macizo rocoso que se eleva a más de 1.700 metros de altura y que se distingue gracias a la construcción que hay en la cima. Se trata del santuario de Nuestra Señora de la Peña de Francia, un templo de origen benedictino y ahora regido por los dominicos que se erige en lo alto de la montaña, dominando todo el paisaje. Este lugar, rodeado de una naturaleza imponente, combina el atractivo de su historia con el magnetismo de sus vistas panorámicas, atrayendo tanto a peregrinos como a visitantes interesados en la cultura y el paisaje de esta región.

La historia del Santuario de la Peña de Francia se remonta al siglo XV, cuando, según la tradición, el francés Simón Vela encontró una imagen de la Virgen María en una cueva en la cima de la montaña. Este hallazgo dio origen a la construcción del santuario, que ha sido desde entonces un centro de devoción mariana y un punto de encuentro espiritual. El conjunto arquitectónico actual se distribuye alrededor de una plaza del siglo XVIII, presidida por un rollo, símbolo del poder jurisdiccional que ejercía el prior del monasterio sobre los territorios de la montaña.

A un lado de la plaza se encuentra la puerta del convento, construida en el siglo XV, y al otro, la capilla de la Blanca, del siglo XVI, erigida sobre la cueva donde, según la tradición, fue encontrada la imagen de la Virgen. Ambas construcciones están conectadas por un porche corrido, en cuyo centro destaca el Balcón de Santiago. La iglesia, que alberga la imagen de la Virgen de la Peña de Francia, patrona de Salamanca, es un espacio de recogimiento donde los visitantes pueden apreciar la talla gótica de la Virgen, que se caracteriza por su tamaño pequeño y su expresión serena.

Pero esta construcción no solo destaca por su valor religioso, sino también por su ubicación privilegiada en el Parque Natural de Las Batuecas-Sierra de Francia. Desde su cima, los visitantes pueden disfrutar de unas vistas espectaculares que abarcan las sierras de Béjar, Gata y Gredos, así como los extensos campos de la provincia de Salamanca.

El acceso al santuario es un recorrido en sí mismo. La carretera serpenteante que lleva hasta la cima atraviesa paisajes que cambian según la estación: bosques frondosos, campos cubiertos de nieve en invierno y un estallido de colores en otoño. Esta combinación de naturaleza y espiritualidad convierte el lugar en un destino ideal para quienes buscan desconectar del ajetreo diario. A su vez, para visitarlo, recomiendan desde el portal de Turismo de Castilla y León ponerse en contacto con el santuario y consultar los horarios.

Igualmente, el viaje desde Salamanca es de alrededor de 1 hora y 15 minutos por las carreteras CL-512 y SA-210. Por su parte, desde Plasencia el trayecto tiene una duración estimada de 1 hora y 50 minutos por las vías A-66 y SA-220.