El curioso negocio de Holger Rune con las raquetas que rompe en los partidos

El joven tenista danés Holger Rune, actual número 8 del ranking mundial, ha encontrado una manera innovadora de capitalizar uno de los gestos realizado por muchos tenistas del circuito, pero que también muchas la peor cara de este deporte: romper raquetas por frustración durante los partidos. Aprovechando estos momentos de tensión, Rune ha decidido convertir las raquetas que destruye en artículos exclusivos de colección que ahora están disponibles para sus seguidores a través de una tienda online.

El gesto de romper una raqueta no es nuevo en el tenis. De hecho, es una muestra de frustración visible en jugadores de todos los niveles. Son pocos los tenistas que no han sucumbido a este gesto. De hecho, de los pocos tenistas o único que nunca ha roto una raqueta ha sido Rafa Nadal. Sin embargo, otros como Alexander Bublik, Andrey Rublev o el australiano Nick Kyrgios han ganado notoriedad por estas acciones impulsivas. Hasta a Carlos Alcaraz se ha visto en algún partido perder los papeles y pagarlo con su raqueta. Rune se inscribe en esta última categoría, aunque ha decidido reinterpretar lo que para muchos es un simple desahogo en las pistas.

En su sitio web oficial, Rune ofrece una línea de productos que incluye merchandising convencional, como camisetas y gorras. No obstante, el verdadero atractivo para los aficionados reside en una sección que destaca por su singularidad: “Raquetas rotas utilizadas en partidos Oficiales”. En este apartado, las raquetas destrozadas por el danés durante competiciones se presentan como piezas únicas con su firma personal, autenticadas y ofrecidas como objetos de colección.

Al momento, la tienda de Rune cuenta con cinco raquetas en venta. Tres de ellas solo presentan daños superficiales, como golpes y pequeñas grietas en el marco, y tienen un precio de 5.000 euros. Las otras dos, que están visiblemente deformadas y completamente rotas, alcanzan un valor de 6.000 euros. Cada una de ellas está acompañada de una descripción que subraya su exclusividad: “Las raquetas destruidas de Holger Rune son objetos coleccionables extremadamente raros, utilizadas en partidos oficiales. Son un pedazo auténtico de la intensidad del deporte, totalmente únicas y disponibles en número limitado”.

Este es un gesto curioso que se suma a algunas acciones reseñables del tenista danés, como echar a su madre de Roland Garros. En medio de su partido contra el noruego Casper Ruud, Rune enfrentó un momento de frustración extrema. Durante un descanso, visiblemente molesto por como estaba transcurriendo el duelo, comenzó a gritarle a su madre, que se encontraba en las gradas.

Tras el partido, donde terminó derrotado, detalló: “Quiero mucho a mi madre. No fue mi intención echarla de la pista, pero, cuando estoy frustrado, necesito despejarme. No puedo escuchar a mi madre y a mi entrenador al mismo tiempo. Ella sabe cómo darme tranquilidad, por eso decidió marcharse”. Un curioso gesto que llegó a cabo el tenista, quien la tensión de las pistas se apoderó de él y acabó pagándolo con su madre.