Morat: “Antes era muy importante cantar en inglés si alguien quería trascender. Cada vez más se reivindica el español como un idioma válido”

‘Infobae España’ entrevista al grupo colombiano, que ha anunciado una gira de nueve fechas por España para octubre de 2026

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El grupo Morat, de izquierda
El grupo Morat, de izquierda a derecha. Juan Pablo Villamil, Martín Vargas, Juan Pablo Isaza y Simón Vargas. (Cedida)

La primera vez que Morat tocó en España fue hace una década. El grupo colombiano formado por Juan Pablo Isaza, Juan Pablo Villamil, y los hermanos Martín y Simón Vargas acudió al Intruso Bar, en el corazón del madrileño barrio de Chueca, para tocar sobre 190 metros cuadrados. “Ayer hicimos un showcase en el bar El Intruso en Madrid. ¡Gracias a todos los que asistieron!”, se puede leer todavía en la cuenta de Facebook de la banda, junto con una imagen en la que, además de lucir más cerca de los 20 que de los 30, aparecen totalmente apiñados en una pequeña tarima. Diez años después han colaborado —dos veces— con Aitana, Paulina Rubio —con quien dieron el salto a la fama—, Duki, Álvaro Soler o Tini, entre muchos otros; han publicado cuatro álbumes de estudio y han cambiado los bares por arenas y estadios.

Morat aterriza en Madrid a comienzos de noviembre para, primero, acudir a LOS40 Music Awards el viernes 7 del mismo mes en Valencia; segundo, porque al día siguiente actuarán en Tenerife, en el único concierto que celebrarán en España en 2025. Pero su encuentro con prensa se debe a un motivo todavía secreto para el gran público: el año que viene ofrecerán una gira por España, como parte de la promoción de su último álbum de estudio, Ya Es Mañana, publicado en mayo. Para cuando tiene lugar la entrevista, el 4 de noviembre en el Hotel Madrid Suecia, hay cinco fechas programadas, que minutos antes de comenzar a hablar con ellos se transformarán en siete. La entrevista, embargada hasta que se lance el anuncio, culmina muchos días después, cuando su equipo apura un poco más. “Lo más probable es que en unas horas estén sold out las dos fechas de Madrid y anuncien días adicionales, 30 y 31″, nos cuentan, por si da tiempo a añadirlo al texto. Y así ocurre. En total, Morat recorrerá España con nueve fechas en octubre del año que viene, pasando por partida doble en Barcelona, Pamplona, Valencia, Sevilla y cuatro días en Madrid. Más de la mitad está ya sold out. En medio de esta vorágine, se alzan con su primer Latin Grammy, el premio al Mejor Álbum de Pop/Rock del año.

“Nos encanta venir a España y realmente nos lo disfrutamos. Llegar a Madrid, salir a caminar, dar un paseo, tomarse una caña... Genuinamente, disfrutamos mucho este país”, cuenta el menor de los hermanos Vargas, Martín. Los cuatro están sentados en un sofá en una de las salas del hotel. Como superestrellas, una miembro de su equipo les explica que esta es su última entrevista antes de irse a hacer otra, y les recomienda subir a su habitación en caso de que lo necesites. A su alrededor, hay una decena de personas pendientes de ellos y de la conversación que tiene lugar en pleno centro de Madrid.

La entrevista empieza como no, hablando de Rosalía, que días atrás acababa de estrenar Berghain, dejando al mundo boquiabierto. Van a coincidir con ella en Valencia, siendo esta su primera actuación en directo tras la salida del su álbum, LUX. “En este momento en el que al parecer la inteligencia artificial va a ser capaz de reemplazar una grandísima parte de lo que muchas personas hacen en su día a día, probablemente una de las grandes responsabilidades de los artistas se convierta en dar una honestidad brutal o autenticidad máxima. Yo lo siento así un poco con lo que está haciendo ella”, apuna Simón, bajista del grupo. “No está tratando de repetir una fórmula con la cual va a volver a llegar a donde ya llegó, sino que está realmente abriéndose a hacer algo radicalmente distinto. A mí me encantó, la verdad. Me parece que el disco pinta bien interesante”.

Precisamente, Morat tiene varios referentes españoles, entre ellos Joaquín Sabina. “Eso también tiene que ayudar de alguna forma”, apunta Martín. España fue uno de los países que mejor les acogió en sus inicios, por lo que, apuntan, su relación con la península “es muy estrecha y nos encanta que sea así”. “Tuvimos mucha suerte y eso no lo dábamos por sentado. Cuando llegamos a España en 2015 y 2016, había más espacio para la música que nosotros hacíamos acá que en Latinoamérica. Eso también nos ayudó muchísimo, porque había una compatibilidad muy importante”. Para entonces, especialmente al otro lado del Atlántico, predominaba un género urbano —como el trap o el reggaetón— que, aunque ya tenía presencia en nuestro país, el pop seguía siendo la principal fuerza de la industria musical en España. “Sentíamos que nuestra música era más compatible con el ecosistema musical español que con el colombiano mismo”, reconoce Simón.

De sus primeros años por las calles de la capital recuerdan “caminar por la ciudad y salir de cañas”. “Madrid tiene una cosa muy mágica y es que es una ciudad en la cual el espacio público es muy democrático. La ciudad se presta mucho para caminar, para salir, para dar un paseo”, añade. “Cuando llegamos acá por primera vez, eso era, y sigue siendo muchos años después, maravilloso”. Aquí entra en juego el fenómeno fan, que en Latinoamérica definen como más “eufórico y un poco más descontrolado”. “En España se tiene un respeto muy particular al arte", añade el mayor de los hermanos. “Yo siento que acá la gente como que se reservaría un poco más de meter el grito de emoción porque hay alguien que está cantando. Eso es muy lindo también”.

Tras una veintena de conciertos en nuestro país desde sus comienzos por casi todas las comunidades autónomas, el culmen fue el pasado 21 de junio de 2024 en el Estadio Civitas Metropolitano ante 55.000 personas. “Sentimos que [España] catapultó nuestra carrera de muchas formas y siempre hemos sentido esta responsabilidad y este cariño de querer volver con cada gira y traer lo mejor de nosotros”, añade Juan Pablo Isaza, también guitarrista. En el caso el Ya es mañana Tour con la que miran al año que viene, “la intención siempre fue guardarnos para volver a España con una propuesta distinta”. “De momento son siete conciertos. Ojalá terminen siendo más”, confiesa. Finalmente, o por ahora, son nueve.

El grupo Morat, de izquierda
El grupo Morat, de izquierda a derecha, Juan Pablo Isaza, Juan Pablo Villamil y los hermanos Simón y Martín Vargas. (Cedida)

Precisamente, su cuarto álbum de estudio, con el que harán la gira mundial, es una oda a la nostalgia, entre otras cosas, a la par que se dejan guiar por las influencias de los años 90. “Tenemos una relación bastante fuerte con la nostalgia, pero diría que es positiva”, explica Martín, que añade que “es un sentimiento que romantiza un poco lo que fue". “Entiendo por qué la gente podría tener una relación tóxica con ella, pero creo que lo más bonito de la nostalgia es que nadie tiene nostalgia de algo malo. Solo se genera con cosas positivas porque si no es simplemente tristeza. Parte de lo que intenta hacer este disco es rescatar todo lo bonito del pasado, ver cómo lo traemos al presente y cómo actuamos para que el futuro sea lo mejor posible", explica Villamil. Isaza asegura que si bien cada uno tiene una relación con la nostalgia distinta, “como grupo no estamos tan atados a ninguna memorabilidad de la banda. No somos tan románticos hacia el pasado, siempre hemos estado mirando más hacia adelante, obviamente agradeciendo y valorando todo lo que pasó atrás, pero tampoco obsesionándonos con ello”.

El valor del español

El grupo no ha tenido un solo año malo desde que comenzaron. Cuatro discos, cientos de soldouts, colaboraciones por doquier, premios. Ellos también lo notan. “Sentimos que cada año que pasa es mejor al anterior. No hemos tenido todavía ese momento en el que el siguiente año de pronto no sea tan bueno. Pero llegará”, reflexiona Martín.

Además, el panorama musical ha cambiado durante la última década, tanto en su continente como en el nuestro. “Se ha abierto un montón, sin duda. Hay un montón de artistas de urbano que están empezando a hacer otras cosas”, añade. Ahora notan que cantar en directo se ha convertido en un parte “mucho más grande” de los artistas. “La banda es un formato perfecto para eso”.

Morat estará de gira en
Morat estará de gira en España durante octubre de 2026.

De hecho, el próximo mes de abril coincidirán en Coachella, uno de los festivales más prestigiosos del mundo, con los españoles Rusowsky, Carolina Durante y Mëstiza. “Antes era tan importante cantar en inglés si alguien quería trascender al mercado y ahora cada vez más se reivindica el español como un idioma válido a nivel mundial. Hay artistas interesados en colaborar con artistas latinos. Sin duda, ha cambiado mucho el panorama musical y es increíble”, asegura Villamil.

¿Lo habrían tenido más complicado de entrar hoy en la industria? “Sí, por completo. Nosotros entramos en un momento en el que las redes sociales no eran lo que son hoy, en el que si bien existía algo de expectativa y presión sobre los artistas para ser influencers, hoy pareciera que es un requisito mínimo", añaden. “Además, porque la forma de consumo de música de la gente hoy en día, 2025, es distintísima a lo que era el 2015″. “Hoy en día un artista nuevo tiene que ser artista y mil cosas más y eso es una vaina muy complicada. Nos quitamos el sombrero a los que la logran hoy porque está dura y el nivel de talento que hay es violento. La competencia ahí y la saturación es muy alta. No sé si lo habríamos logrado o no, me gusta pensar que sí, pero sin duda alguna lo habríamos sufrido más”, finaliza Simón.