
El Museo del Louvre ha sido este fin de semana el escenario de un robo que ha dejado a todo el mundo con la boca abierta: cuatro ladrones, en siete minutos, lograron extraer hasta ocho joyas de “un valor inestimable” de uno de los espacios más famosos del museo, la Galería Apolo.
El suceso fue tan sonado que incluso el propio Emmanuel Macron aseguró, a través de sus redes sociales, que todas las obras serían recuperadas y los autores “llevados ante la justicia”. Al fin y al cabo, el Louvre es el museo más visitado de todo el mundo y, desde hace mucho tiempo, uno de los símbolos de Francia.
Al margen de la investigación, que sigue abierta, el robo del Louvre ha recordado a muchos cinéfilos lo que se cuenta en una de las series europeas más exitosas de la historia de Netflix. Hablamos de Lupin, la conocida ficción protagonizada por Omar Sy en la que se actualiza la figura del legendario ladrón Arsene Lupin, creado a finales del siglo XIX por el escritor Maurice Leblanc.
El primer gran éxito de Francia en Netflix
Y es que, justo después de conocerse la noticia del atraco del Louvre este domingo, Ariel Weil ya adelantaba que el trabajo de los criminales que habían asaltado el museo parecía “de Arsène Lupin”. Este ladrón de guante blanco ha sido adaptado en numerosas ocasiones para la gran y la pequeña pantalla. De la película de Jacques Becker en 1957 pasamos a una adaptación más moderna en 2004, dirigida por Jean-Paul Salomé, no sin pasar por la genial serie animada dirigida por Hayao Miyazaki, Lupin III, cuyo protagonista se inspira parcialmente de los libros de Leblanc.
Ahora bien, ninguna de estas producciones ha logrado alcanzar la repercusión que tuvo, en el momento de su estreno, la serie de Lupin de Netflix. Esta producción, que adapta libremente las novelas originales y las enfoca en la Francia actual, superó los 70 millones de visualizaciones tras su primer mes, convirtiéndose en un fenómeno global que, actualmente, cuenta con tres temporadas que han seguido gustando a los telespectadores, tal y como demuestra su porcentaje de críticas positivas en webs como Rotten Tomatoes.

La coincidencia entre la serie de ‘Lupin’ y el atraco al Louvre
Ahora bien, si en algo recuerda Lupin a los sucesos del Louvre es, precisamente, por el primer episodio de esta producción. La carta de presentación del personaje y de la serie no es otra que, precisamente, un atraco en el museo de arte más famoso de París y del mundo. Assane Diop (nombre real en esta versión del mítico personaje) busca hacerse con un collar de diamantes de María Antonieta, una joya legendaria que solo se ha expuesto temporalmente en el museo.
El atraco de Lupin es perfecto: se disfraza e infiltra en el museo para hacerse con la joya sin que nadie lo descubra. Una estrategia tan perfecta que muchos no han tardado en relacionar con lo visto durante el fin de semana. Eso sí, entre las piezas robadas no se encontraría este collar, sino una diadema de María Amelia, última reina de Francia, unos pendientes de esmeralda de María Luisa, un broche relicario que lució Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III, y a la que también le pertenecía otro con una cascada de diamantes que le regalaron en el día de su boda, y que también ha sido robado.
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